Al menos dos muertos en choques entre el Ejército y los grupos de autodefensa en Michoacán
- El Ejército ha iniciado una operación para desarmar a estos grupos civiles
- Los grupos exigen que el Estado desarme antes a una banda de 'narcos'
Las fuerzas federales mexicanas han comenzado a desarmar a los grupos de autodefensa que actúan en el estado de Michoacán contra una banda de narcotraficantes. Al menos un grupo se resiste a entregar las armas y se han registrado enfrentamientos en los que han muerto entre dos y 12 personas, según las fuentes.
Fuentes del Gobierno de Michoacán confirmaron a Efe que miembros del Ejército y la Marina comenzaron el lunes por la noche el desarme en la localidad de Nueva Italia, en el municipio de Múgica, así como en las localidades de Parácuaro y Antúnez, en el municipio de Parácuaro.
No obstante, Estanislao Beltrán, uno de los principales líderes del grupo de autodefensa de Tepalcatepec, que en fechas recientes se ha extendido a otros municipios de Michoacán, declaró por teléfono a Efe que su agrupación se resistirá al desarme. "Aquí estamos con el Ejército. No vamos a entregar las armas. Aquí nos vamos a morir. Aquí nos vamos a morir todos", dijo Beltrán.
El líder denunciaba además que los militares habían matado a tres de sus hombres y una niña que les acompañaba después de que un grupo cerrara el paso al Ejército que acababa de desarmar a las autodefensas en Antúnez, municipio de Parácuaro. Por su parte, fuentes de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) citadas por la prensa local han rebajado a dos el balance en circuntancias no detalladas.
Por su parte, el periódico Reforma, que no cita fuentes oficiales, apunta que los fallecidos en incidentes en Múgica y Parácuaro.
Debate dentro de los grupos de autodefensa
Por su parte, el también líder de ese grupo de autodefensa de Tepalcatepec y dirigente del Consejo General de Autodefensas y Comunitarios de Michoacán, José Manuel Mireles, parecía más dispuesto al desarme. En un vídeo difundido por televisión, dijo que el Consejo "atiende al llamado de la Secretaría de Gobernación y también de nuestro amigo el gobernador del estado (Fausto Vallejo)".
"Nosotros lo único que queremos es que se restablezca el Estado de derecho, no que se pierdan los poderes, porque eso sería una revolución civil que no íbamos a parar", decía. Sin embargo, horas después en las redes sociales decía que ese vídeo estaba manipulado y que la decisión la tomarán de forma colectiva, informa el corresposal de TVE en México, Javier Gutiérrez.
Enfrentados al narcotráfico
Este lunes, el secretario mexicano de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong, exhortó a los grupos de civiles armados que se integren en los cuerpos policiales o, de lo contrario, depongan sus armas y regresen a sus lugares de origen.
Poco después, diversos líderes de los grupos de autodefensa respondieron al Gobierno que antes de dejar las armas deberían ser detenidos los principales líderes de la organización criminal Los Caballeros Templarios.
La organización de Los Caballeros Templarios nació en diciembre de 2010 como escisión del cártel de La Familia Michoacana y desde entonces ha aumentado su poder en la región. Además del tráfico de drogas hacia Estados Unidos, la agrupación está acusada de delitos como extorsiones, secuestros y homicidios.
El gobernador del estado de mexicano de Michoacán, Fausto Vallejo, anunció que a partir de hoy despachará desde el municipio de Apatizingán, considerado bastión del cártel del crimen organizado de Los Caballeros Templarios y que desde hace días vive sumido en una ola de violencia.
"Como medida extraordinaria les informo que, como jefe del Ejecutivo estatal, a partir de ahora despacharé de manera recurrente en Apatzingán y en toda la región, tanto como sea necesario, hasta que sus habitantes se sientan seguros y normalicen sus vidas", afirmó Vallejo en una conferencia de prensa.
Vallejo firmó hoy con el Ejecutivo federal un acuerdo para poner fin a la violencia en la región de Tierra Caliente, que en los últimos días se ha recrudecido, después de que civiles que integran "grupos de autodefensa" arrebataran el control de varios municipios a Los Caballeros Templarios.