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El mundo de la literatura lamenta la muerte de Juan Gelman

  • La comunidad de la cultura iberoamericana ha manifestado su pesar
  • La red social Twitter también se ha llenado de palabras de condolencias

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Imagen de archivo del poeta argentino Juan Gelman durante una conferencia en Monterrey en julio de 2008.
Imagen de archivo del poeta argentino Juan Gelman durante una conferencia en Monterrey en julio de 2008.

El mundo de la cultura se ha vestido este miércoles de luto por la muerte del poeta Juan Gelman, que ha fallecido a los 83 años en la capital de México, donde residía desde hace más de veinte años.

El secretario de Cultura de la Argentina, Jorge Coscia, ha considerado que Juan Gelman ha formado parte de "la mejor tradición de la literatura argentina".

"Su propia vida es un poema comprometido", ha agregado Coscia, para quien la obra del poeta "demuestra una relación profunda entre capacidad creativa, poesía, literatura y compromiso".

La red social Twitter se ha llenado de palabras de condolencias tras conocerse la noticia de su muerte.

El presidente del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes de México (Conaculta), Rafael Tovar ha escrito en su cuenta personal que el "poeta del alma mexicana, poeta mayor, ha muerto. Mi pésame a sus deudos". Antes la institución informó en un comunicado oficial que el autor había estado hospitalizado antes de su fallecimiento y ha dado a conocer que será velado a partir de las 9:00 hora local en una funeraria del centro de la capital.

Carme Chacón también le ha dedicado unas palabras desde su Twitter: "Al poeta de la denuncia, al hombre comprometido, al ser inconformista, al admirado Juan Gelman. Gracias por tantas enseñanzas. Aquí seguirás".

El poeta argentino Horacio Salas también ha manifestado su persar por la muerte de Gelman ha declarado a la agencia oficial Telam que "pasan tantas cosas por delante de la ventana de mi vida... trabajos, redacciones, risas... porque Juan, hasta que pasó lo que pasó (su hijo y nuera desaparecidos) era un tipo con el mejor humor".

"Gelman fue un grandísimo poeta, sin necesidad de decir que fue el más importante de la Generación del 60" argentina, ha agregado Salas, convencido de que "cambió el castellano escrito, se atrevió a lo que nadie, tomó todos los riesgos, fue casi un inventor de la poética del riesgo, tomar a San Juan de la Cruz junto a Homero Manzi... eso es tirarse en la pileta vacía".

Su discípulo Daniel Freidemberg ha afirmado que su figura es decisiva en la poesía argentina, especialmente tras la publicación de Violín y otras cuestiones (1956), que "ayudó a encontrar su propia lengua, una poética específicamente argentina".

Solo le faltaba el Nobel

"El único premio que le faltaba era el Nobel y nunca se anquilosó, ni acomodó, cuanto más lo premiaban más áspera y desafiante se volvía su poesía, cada vez buscaba más lejos y más hondo", ha concluido Freidemberg.

El escritor Jorge Boccanera ha definido a Gelman cono "un maestro de la vida" y ha subrayado que "nos quedará como un legado esta gran obra y este gran ejemplo de vida".

Boccanera, que acompañó al poeta en su última visita a Buenos Aires, el pasado mes de agosto, durante la presentación de su libro Hoy  ha afirmado que "Gelman fue además un militante político que supo siempre pelear por ensanchar el espacio de la libertad", ha continuado Boccanera, que acompañó al poeta en su última visita a Buenos Aires, el pasado mes de agosto, durante la presentación de su libro Hoy.

"Su obra es una especie de Guernica hablado y nos quedará como un legado esta gran obra y este gran ejemplo de vida", ha apuntado.

En Hoy, que reúne casi 300 textos poéticos en los que el autor reflexiona sobre la realidad argentina, Gelman incluyó sus impresiones tras conocer la condena a los represores del centro de detención clandestino donde estuvo secuestrado su hijo, Marcelo Ariel, asesinado por el aparato de la dictadura militar argentina (1976-1983).

La poesía habló por él

En aquella ocasión, un Gelman emocionado prefirió dejar que la poesía hablase por él y leyó varios textos sobre las cosas que fueron y dejaron de ser, las que no pudieron ser, las deudas con el pasado y las cartas que no se pudieron enviar.

"Gracias por estar aquí y sobre todo por aguantarme", dijo Gelman para despedirse del público que le ovacionaba.

La organización de derechos humanos H.I.J.O.S. ha señalado en un que "ahí se va Juan, a alguna reunión con Rodolfo (Walsh) y otros tantos compañeros. Allá se va Juan, a contarles a los 30.000 (desaparecidos durante la dictadura) que pudo encontrar a su nieta Macarena".

La dictadura y los asesinatos de su hijo Marcelo y su nuera, embarazada de ocho meses cuando fue secuestrada, marcaron la vida del poeta, que se volcó en la búsqueda de su nieta, entregada a la familia de un policía en Uruguay.

Gelman localizó a su nieta Macarena en el año 2000, y en 2011 la Corte Interamericana de Derechos Humanos condenó al Estado uruguayo por la desaparición de María Claudia García, nuera del poeta, y por la supresión de identidad de su hija, Macarena Gelman.