Rajoy: Europa comienza en 2014 "un tiempo nuevo", "con expectativas radicalmente distintas"
- Asegura que en el Consejo Europeo de diciembre "se respiraba otro aire"
- Apunta una "incipiente recuperación" en la Unión Europea
- Destaca como retos, la creación de empleo y la liberalización de los servicios
- Toda la oposición critica el optimismo del presidente
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha asegurado que Europa ha entrado en 2014 "con expectativas radicalmente distintas" y con la impresión de que se comienza "un tiempo nuevo".
Así lo ha indicado Rajoy en su primera comparecencia en el Congreso de los Diputados en este 2014, en la que ha informado sobre el Consejo Europeo de los pasados 19 y 20 de diciembre. En esa cumbre, ha asegurado, que "se respiraba otro aire", ya que se confirmó "el comienzo de incipiente recuperación", se constaban los avances en la reducción de los desequilibrios internos y en el saneamiento del sistema financiero, y se siguió adelante con la integración europea con decisiones importantes sobre la unión bancaria.
El presidente también ha resumido las tareas pendientes que apuntaron los líderes de la Unión Europea: la prioritaria, crear empleo y luchar contra el paro, sobre todo, el juvenil; mostrar más atención a liberalización del sector servicios, y poner fin a la fragmentación de los mercados financieros y "a las muy diferentes condiciones de financiación de empresas en los distintos países".
"Hito fundamental" en la construcción europea
Rajoy ha destacado los "nuevos e importante pasos" dados en diciembre para avanzar en la unión bancaria, como la aprobación del marco de resolución de entidades bancarias y el sistema de fondos de garantía de depósitos, y el acuerdo político logrado entre los líderes europeos sobre el futuro mecanismo de resolución.
Con esas decisiones, España ha logrado sus dos objetivos, según Rajoy, ya que se "minimizará" el coste para el ciudadanos en futuras crisis bancarias y se pondrá fin a la discriminación entre Estados miembros, porque -ha asegurado- "todas las entidades financieras recibirán el mismo tratamiento" y no estará afectado por el país al que pertenezcan.
Para el presidente español, el acuerdo sobre el mecanismo común de resolución ha sido "un hito fundamental en la construcción europea, algo que parecía impensable hace unos meses", ya que -a su juicio- "va mucho más allá de lo que pretendían muchos países, que era solo una red de autoridades nacionales".
Además, Mariano Rajoy ha considerado adecuada para actuar con rapidez la autoridad creada para ejecutar la reestructuración o liquidación de entidades y ha destacado que habrá una junta de resolución "con estatus de agencia europea en la que estarán representados todos los países".
Sobre el fondo de resolución, el presidente ha subrayado la mutualización gradual que se irá produciendo en un período de diez años, lo que permitirá -según él- que "cuando una entidad financiera española necesite reestructurarse, podrá recurrir a fondos aportados por toda la banca europea".
Balance de dos años en la UE
El jefe del Ejecutivo ha realizado también un balance de la política española y europea al haber pasado el ecuador de la actual legislatura. En ese resumen, Rajoy ha destacado el contraste entre la situación económica que había en las cumbres europeas de hace dos años (sobre las que -ha dicho- planeaba una "nube negra" formada por "la zozobra y el desasosiego") y la que se celebró hace un mes.
"Cuando llegué a Gobierno de España, la política europea se circunscribía a la consolidación fiscal", ha indicado, antes de añadir que, eso cambió después de que 14 gobernantes europeos firmaran una carta dirigida a los presidentes de la Comisión y del Consejo europeos en febrero de 2012 para destacar la importancia de emprender reformas. También ha recordado que lo mismo expuso él en otra carta enviada a esos mismos destinatarios en la que recogía cinco ejes que consideraba claves para la recuperación económica.
Según Rajoy, "estas ideas y otras en la misma dirección fueron recogidas por el Consejo Europeo de junio de 2012 y fue el punto de inflexión que marcó un nuevo camino en la política económica europea", que se reflejó también en la actuación de la Comisión Europea y el Banco Central Europeo.
El protagonismo del presidente español en ese cambio ha sido cuestionado por el líder socialista, Alfredo Pérez Rubalcaba, quien ha atribuido la bajada de la prima de riesgo española a las palabras del presidente del BCE, Mario Draghi, en septiembre de 2012, cuando aseguró. "Haré todo lo necesario para salvar el euro y les garantizo que será suficiente". El cuestionamiento de Rubalcaba ha abierto un agrio debate entre ambos políticos:
Finalmente, Rajoy ha destacado que el cambio de rumbo en la política europea ha permitido dejar atrás la recesión en Europa y, aunque ha reconocido que "las cifras de desempleo siguen siendo inaceptablemente elevadas", ha asegurado: "Creo que podemos decir que lo peor ya ha pasado".
PSOE: Esta unión bancaria no habría evitado los problemas actuales
Precisamente, esa afirmación ha sido muy cuestionada por los partidos de la oposición, que critican con dureza el optimismo del Gobierno. Así, todos los partidos -a excepción del PP- han recordado las altas cifras de paro en España, la escasez de crédito para particulares y pymes, la creciente desigualdad en la sociedad y la falta de políticas sociales para atender los problemas de los ciudadanos.
Así, el secretario general del PSOE, Alfredo Pérez Rubalcaba, ha criticado las decisiones sobre la unión bancaria porque son "insuficientes" y no logran los dos objetivos fundamentales: que se abaraten los créditos y que el erario público no pague futuras crisis bancarias.
El líder socialista ha citado a algunos "economistas prestigiosos" que consideran que si la unión bancaria, tal y como se está definiendo, hubiera existido antes de la crisis de 2008 "nadie hubiera notado la diferencia" y "los problemas serían los mismos".
Respecto al mecanismo de resolución, Rubalcaba ha remarcado: "No lo llamaría mecanismo único, lo llamaría asamblea de resolución porque es un guirigay" y "lo menos adecuado" para una actuación de emergencia. "Es malo porque garantiza la preeminencia de los países más fuertes. Los bancos recibirán un tratamiento u otro en función de la fuerza de sus respectivas autoridades nacionales", ha añadido el dirigente del PSOE.
Para Pérez Rubalcaba, los 55.000 millones de euros marcados como objetivo final para el fondo de resolución es "insuficiente". "Basta compararlo con el rescate bancario de España: 40.000 millones. Serán 130 bancos los que se supervisará, 27 billones de euros de activos. Un fondo de esta cuantía es insuficiente para hacer frente a una eventual crisis bancaria, que esperemos que no se produzca", ha añadido.
Además, ha destacado que durante los 10 años de transición hasta la mutualización "seguirán pagando los Estados, es decir, los ciudadanos".
Rubalcaba ha insistido en la falta de atención a los ciudadanos y sus problemas que se viene repitiendo en los sucesivos Consejos Europeos, lo que no augura un buen resultado en las próximas elecciones europeas.
"De política social no hay nada y es la principal crítica a todos los Consejos Europeos de los últimos dos años", según Rubalcaba. Así, ha enumerado que "las graves acusaciones de los ciudadanos a la UE" son la ausencia de políticas sociales, la nula preocupación por los problemas de los ciudadanos, y "la rapidez con la que se atienden crisis bancarias frente a la renuencia con que se atienden las necesidades de las personas".
CiU avisa que no habrá recuperación si no fluye el crédito
El portavoz económico de CiU en el Congreso, Josep Sánchez Llibre, ha respondido al presidente del Gobierno que la "cacareada" recuperación económica en la que ha insistido el jefe del Ejecutivose quedará en una mera mejora de indicadores, que convivirá con el "desaliento" de empresas y familias, si sigue sin fluir el crédito.
En su intervención, Sánchez Llibre ha rebajado el optimismo de Rajoy y ha insistido en que España tiene un "problema tremendo" de crédito y que éstae es la "clave de bóveda de la recuperación y el crecimiento".
Así, ha admitido los avances que se han alcanzado en el Consejo Europeo para la consecución de la unión bancaria, aunque ha indicado que las decisiones tuvieron "más de gestación que de materializaciones concretas". En este sentido, ha lamentado que esta unión bancaria no será operativa hasta 2026, porque "se necesita antes".
Izquierda Plural: hay "una campaña de marketing" de la recuperación
El diputado de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA) en el Congreso, Joan Coscubiela, ha acusado al presidente y al resto del Gobierno de ser los "fariseos del siglo XXI", por predicar la "austeridad, pero sin practicarla".
"Molesta profundamente a los ciudadanos esta campaña de marketing sobre una recuperación que solo está en las estadísticas. Es un verdadero insulto a la ciudadanía. ¿En qué notan los ciudadanos la recuperación? ¿Hay acaso más personas trabajando, o solo crece la frustración y la desesperanza, y por eso cae la población activa? Las políticas de su Gobierno no crean empleo sino que lo precarizan, mientras bajan los salarios y la tasa de cobertura de las prestaciones, y aumenta desigualdad. ¿En qué puñetas consiste la recuperación de la que hablan?", se ha preguntado.
Además, para el diputado catalán las decisiones adoptadas en el último Consejo Europeo "no han hecho más que agravar el profundo desequilibrio entre las políticas de ajuste duro e injusto, y las de crecimiento y creación de empleo".
"Cuando se trata de ajustes van a la velocidad de la luz. Cuando se trata de reformas estructurales exigidas por los mercados avanzan a la velocidad del guepardo, destruyendo conquistas sociales de décadas. Pero cuando se trata de políticas de crecimiento, solo hay palabras huecas, sin contenido", ha reprochado.
Para Coscubiela es "vergonzoso" que los estados miembros lleven 18 meses hablando de un Plan de Crecimiento y Empleo cuyos fondos "no aparecen por ningún lado" y que, hasta en seis cumbres diferentes, se haya tratado el asunto del paro juvenil y se hayan comprometido recursos europeos que aún no se han aplicado, y que previsiblemente no llegarán hasta finales de año.
Sobre las decisiones en unión bancaria, el diputado de Izquierda Plural ha considerado que, "en el fondo, han renunciado a que esta unión bancaria juegue papel alguno en esta crisis. La diseñan para futuras crisis, y eso es un error, injusto y tiene graves riesgos", ha advertido, antes de apostillar que los cambios en el sector financiero que se han decidido hasta ahora y las ayudas inyectadas a la banca española ni siquiera ha servido para reactivar el crédito.
Finalmente, Coscubiela ha defendido la alternativa de la Izquierda Plural, que pasa por una reestructuración "ordenada" de la deuda privada y pública, parte de la cual es "ilegítima" e "impagable", y cuyo peso está "condenando a países y ciudadanos a una larga agonía de muchos años, y al incremento del paro, la pobreza y la desigualdad, solo para que los bancos acreedores no aporten ni un esfuerzo en la salida de la crisis de la que son los principales responsables".
UPyD pide que se obligue a los bancos a dar crédito
Por su parte, la portavoz parlamentaria de UPyD, Rosa Díez, ha pedido este martes al Gobierno que obligue a los bancos que tengan determinados beneficios a conceder un mínimo de crédito a las empresas a modo de "servicio de interés general", de la misma forma que las compañías de telecomunicaciones contribuyen a dar un servicio universal de comunicación a los ciudadanos o las eléctricas han de garantizar el suministro de energía.
Más concretamente, Díez ha sugerido que a las entidades financieras que superaran un porcentaje de beneficios anuales debería exigirles una reserva, como una suerte de obra social, para facilitar créditos a las empresas, particularmente a las pymes.
Además, cuando la falta de liquidez de la empresa derivase de las deudas generadas por administraciones morosas, las entidades financieras que hayan recibido fondos públicos deberían realizar un renovación de sus créditos.