Las FARC condenan por primera vez un atentado propio en el marco de la negociación de paz

• El atentado acabó con la vida de un civil, aunque "no era la intención del ataque"
• Anuncian correctivos contra la unidad y tachan la acción de irresponsabilidad
• El presidente Santos ha valorado con cautela el comunicado de la guerrilla

El Secretariado de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de  Colombia (FARC) ha emitido este viernes una histórica e insólita condena por el atentado cometido por una de sus unidades el pasado 16 de enero en el suroeste de Colombia y ha anunciado "correctivos disciplinarios" para los autores del ataque.

Los máximos jefes de la guerrilla han expresado, mediante un comunicado elaborado en las Montañas de Colombia, su "repudio" hacia una acción contra población civil, que dejó un muerto y más de 50 heridos en Pradera, departamento del Valle del Cauca.

En la mañana del 16 de enero, al día siguiente de finalizar la   tregua unilateral declarada por las FARC con motivo de las fechas  navideñas, una de sus unidades  hizo estallar una moto con explosivos el  centro de Pradera.

La declaración emitida este viernes por la guerrilla supone un giro en su estrategia militar, ya que nunca hasta ahora habían hecho tan explícito el rechazo  a que la población civil se vea afectada en sus ataques, tal y como lo  pide el Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) de acuerdo con el  Derecho Internacional Humanitario (DIH).

Anuncian "correctivos disciplinarios"

Aunque la cúpula rebelde ha defendido a los autores asegurando que  "jamás tuvieron la intención de ocasionar algún daño a la población  civil", también ha aclarado que esta circunstancia "no excluye su responsabilidad por la falta de previsión de los efectos contra ella".

"Así no se hace la guerra, esa no es la filosofía ni la orientación política o militar que nos caracteriza", agregaron los jefes guerrilleros.

No sólo han condenado el ataque, sino que los altos cargos de la guerrilla han anunciado también "correctivos disciplinarios" para "el mando de una de las unidades que componen el Bloque Móvil Arturo Ruiz", los autores del ataque, aunque no han especificado cuáles serán dichas sanciones.

Sólo en dos ocasiones anteriores las FARC habían asumido errores  en sus actos: en 1998, con el asesinato de tres indigenistas  estadounidenses, y en 2007, con la muerte de once diputados regionales  del Valle del Cauca secuestrados.

En el caso de los legisladores, la guerrilla reconoció su  "responsabilidad como garantes de la integridad de los diputados", tras  los hechos confusos en los que murieron y que las FARC achacaron a un  enfrentamiento armado. En 1998, las FARC secuestraron a tres  indigenistas estadounidenses en Arauca (noreste) y sus cadáveres fueron  hallados semanas después en el lado venezolano de la frontera, una  acción que la guerrilla prometió castigar.

Las FARC sancionaron a los guerrilleros responsables con la construcción de caminos y a aprender a leer y escribir, en un hecho que fue tomado como una nueva burla al país.

Nuevo giro en las negociaciones

Según ha explicado a Efe el experto Ariel Ávila, esta insólita condena pública se enmarca dentro del proceso negociador que las FARC y el Gobierno discuten desde noviembre de 2012 en La Habana: "necesitan dar confianza, por esto lo hacen", matizó.

La condena ha sido recibida con cautela por el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, que calificó de "infinita torpeza" el atentado rebelde y que este viernes ha "valorado" el paso efectuado.

Santos, en una entrevista reciente con el programa Los Desayunos de TVE, aseguró que "las víctimas también son conscientes de que han de hacer sacrificios. Dónde se traza la linea entre justicia y paz, ese es el meollo de ese problema".

Juan Manuel Santos, presidente de Colombia: "Las víctimas también son conscientes de que han de hacer sacrificios"

En el otro extremo, el ministro de Defensa, Juan Carlos  Pinzón, que habitualmente muestra una fuerte oposición a las FARC, ha asegurado este viernes que "el reconocimiento de actos de terrorismo es un acto de  cinismo y sinvergüencería".

La unidad de la Columna Móvil Gabriel Galvis, del  Bloque Arturo Ruiz, que cometió el atentado no está, según los expertos del Centro de Recursos para  el Análisis de Conflictos (CERAC), conforme con las negociaciones  de paz, lo cual supone un problema para la dirección de la guerrilla.