Yanukóvich y la oposición ucraniana vuelven a dialogar tras una jornada de alta tensión
- Los líderes opositores rechazaron liderar el Gobierno y piden elecciones
- Un grupo radical ha ocupado unas horas el Ministerio de Justicia
- Blog: Ucrania, al borde del abismo, por Carlos Franganillo
El presidente ucraniano, Víctor Yanukóvich, ha anunciado una nueva reunión esta tarde con los líderes de la oposición después de que la tensión en el país haya alcanzado nuevas cotas por las protestas antigubernamentales, entre ellas la toma durante unas horas de la sede del Ministerio de Justicia en Kiev.
Esta reunión se produce dos días después de que los líderes de los principales partidos de oposición rechazaran la oferta de Yanukóvich para ocupar los puestos de primer ministro y viceprimer ministro tras una semana entera de violentos enfrentamientos en las calles de Kiev. Además, desde el fin de semana las protestas se han extendido a otras ciudades.
La crisis adquiere cada vez más relevancia internacional. El secretario general de la ONU ha vuelto a instar al Gobierno al diálogo y la Unión Europea y Rusia preparan su cumbre bilateral de este martes con Ucrania como telón de fondo, sobre la cual una y otra potencia mantienen posiciones radicalmente enfrentadas.
Sesión en la Rada
Al anochecer, la presidencia ucraniana ha informado de que Yanukóvich ha vuelto a recibir a los tres líderes de la oposición parlamentaria, Arseni Yatseniuk, del partido Batkivshina, Vitali Klitschkó, del Udar, —quienes rechazaron el sábado los dos máximos cargos del Gobierno— y Oleg Tiagnybok, de Svoboda.
El encuentro se produce en víspera de la sesión extraordinaria de la Rada Suprema (Parlamento) en el que la oposición espera la dimisión en pleno del Gobierno del primer ministro Nikolái Azárov.
La sesión parlamentaria fue convocada con la promesa de que la mayoría que tiene el Partido de las Regiones de Yanukóvich debatiría cambios en el Gobierno y en el paquete de leyes que restringen el derecho a las manifestaciones y endurecen los castigos por su incumplimiento, cuya aprobación a mediados de enero provocó una escalada de las protestas.
Aunque Yanukóvich ofreció incluso reformar la Constitución para que el poder Ejecutivo esté repartido entre la Presidencia y el Parlamento (en la actualidad Ucrania es una república presidencialista), la oposición no se conforma con esas promesas e iInsisten en la convocatoria de elecciones anticipadas, tanto parlamentarias como presidenciales, y en la retirada total de las polémicas leyes.
La ex primera ministra Yulia Timoshenko ha pedido desde la cárcel a sus compañeros de Batkivshina, formación que preside, que "no acepten las humillantes condiciones ofrecidas por las autoridades".
La ultraderecha, protagonista
Mientras, el centro de Kiev sigue prácticamente tomado por miles de manifestantes que mantienen una frágil tregua con la policía antidisturbios. Además, en los últimos días se han hecho fuertes en varios edificios gubernamentales y entre el domingo y el lunes han ocupado durante varias horas el Ministerio de Justicia, lo que llevó a su titular, Yelena Lukash, a amenazar con pedir la declaración del estado de excepción si no lo liberaban.
Los manifestantes radicales, que decían pertecer a la desconocida organización Causa Justa, solo se han retirado cuando han acudido hasta allí representantes del partido ultraderechista Svoboda (Libertad) junto a un funcionario del ministerio, informa Efe citando al canal 5 de la televisión local.
Previamente, un diputado de Batkivschina había tachado la toma del edificio de "provocación". Uno de los activistas, armados con palos y enmascarados, dijo que se proponían “tomar todos los edificios oficiales hasta que le llegue el turno a la propia residencia del presidente". En la calle habían levantado barricadas con sacos de nieve.
Otros edificios como el Ayuntamiento de Kiev y la Casa de los Sindicatos son controlados por manifestantes más o menos radicales desde finales del pasado mes de noviembre, cuando empezó esta crisis y las multitudinarias protestas en toda Ucrania por la negativa de Yanukóvich de firmar el Acuerdo de Asociación con la Unión Europea.
En su lugar, Kiev reforzó sus relaciones con Rusia, su principal socio económico. Precisamente, este martes el presidente ruso, Vladímir Putin, participará junto a los presidentes del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, en una cumbre de formato reducido en Bruselas.
Mientras, la tensión se extiende a otras ciudades. Según medios locales, la ciudad de Dnipropetrovsk (la cuarta más poblada del país, con un millón de habitantes, y situada al sureste de Kiev) ha sido la última en sumarse a los disturbios. Durante la pasada madrugada del lunes, miles de opositores intentaron entrar en la sede del gobierno regional y hubo enfrentamientos con la policía, que detuvo al menos a 14 personas.