El Supremo rebaja a dos años la pena de Núñez, expresidente del Barça, por el 'caso Hacienda'

• Fue condenado por cohecho activo por la Audiencia de Barcelona
• También rebaja la pena para el exinspector jefe de Hacienda Huguet

El Tribunal Supremo ha rebajado de seis a dos años y dos meses la pena por cohecho activo que impuso la Audiencia de Barcelona al expresidente del Fútbol Club Barcelona José Luis Núñez, quien en principio podría eludir el ingreso en prisión gracias a la rebaja en el castigo.

La sentencia rebaja también la pena para el exinspector jefe de Hacienda de Cataluña José María Huguet, cuyo castigo queda en 6 años y diez meses por cohecho pasivo, falsedad en documento oficial y prevaricación (frente a los 13 que le impuso la sentencia recurrida).

La decisión sobre el ingreso o no en prisión de Núñez depende del tribunal sentenciador, pero éste tendrá en cuenta, además de su avanzada edad, el hecho de que la pena impuesta supera en solo dos meses los dos años de condena, límite que, habitualmente, permite eludir la cárcel.

En una sentencia notificada este miércoles el Tribunal Supremo ha estimado parcialmente los recursos de casación de Núñez y de Haguiar y también por otros diez condenados -presentados contra la condena que les impuso la Audiencia de Barcelona en julio de 2011-.

Así, ha acordado importantes rebajas en las penas (de nueve años, por ejemplo, en el caso del ex inspector jefe de Hacienda en Cataluña).

El Supremo aplica el atenuante de dilaciones indebidas

En su sentencia, el Supremo explica que se ve obligado a estas rebajas en las penas por dos motivos, el primero de los cuales radica en la aplicación de la atenuante de dilaciones indebidas, dilaciones que atribuye a la decisión "cuestionable" que se tomó en la Audiencia de acumular siete piezas en un solo procedimiento, cuyo juicio se prolongó "de manera disparatada".

El segundo de los motivos por los que el Supremo rebaja las penas obedece a que, según explica mostrando "extrañeza" en su sentencia, en ningún momento de todo el procedimiento se formuló acusación por el delito de fraude fiscal.

El fallo del Supremo se produce en contra del criterio del fiscal, que en la vista de los recursos que se desarrolló en octubre ante este tribunal pidió que se confirmaran las condenas.

Durante aquella vista del recurso todos los abogados defensores adujeron que se debía aplicar la atenuante de dilaciones indebidas ya que los hechos juzgados -la existencia de una trama corrupta en la Inspección de Hacienda en Cataluña- sucedieron en los años 1991 y 1992.

Dádivas millonarias para los inspectores por guardar silencio

En virtud de la trama aludida, los inspectores condenados mantenían un "pacto de silencio" mientras cobraban dádivas millonarias de los empresarios a los que beneficiaban. El Supremo ordena que se decomisen tres millones de euros de manos de los reos.

En concreto, José Luis Núñez Clemente (grupo "Núñez y Navarro") y su hijo Josep Lluís Núñez Navarro desarrollaron "una compleja práctica ilícita" basada en sobornos para eludir el coste fiscal de los beneficios que obtenía el grupo constructor.

En esta trama hubo numerosos implicados y, así, la sentencia condena a cinco inspectores (además de a Huguet, a Manuel Abella -6 años y 10 meses-, Roger Bergua -2 años-, Álvaro Pernas -2 años- y Juan José Lucas -multa de 54.000€-).

El Supremo también condena a Núñez Clemente y a su hijo, José Luis Núñez Navarro (al que impone los mismos dos años y dos meses que a su padre), al igual que a otros implicados, a todos los cuales impone penas inferiores a las del expresidente del Barcelona.

Sobornos para defraudar 13 millones de euros

La condena de la Audiencia relataba cómo el soborno que pagó Núñez a los inspectores de Hacienda sirvió para defraudar 13 millones de euros.

El juicio por el llamado caso Hacienda fue uno de los más largos y complejos habidos en la historia de la Audiencia de Barcelona (nueve meses y dieciséis imputados, de los que solo dos, entre ellos Javier de la Rosa, salieron absueltos).

El sumario se desglosó del caso Torras y afectó a destacados empresarios como los Núñez y los ex altos cargos de Hacienda en Cataluña Josep Maria Huguet y Ernesto Aguiar -que fue exculpado durante la instrucción-.

Precisamente, la amistad del exsecretario de Estado de Hacienda Josep Borrell con Huguet y Aguiar forzó a este a renunciar, en 1999, a ser el candidato del PSOE en las elecciones generales.