Monitorización de bebés de alta tecnología
- Ropa con sensores y pequeños gadgets permitirá conocer el estado del bebé
- Los pequeños procesadores hacen que este tipo de inventos sea posible
- Intel apuesta cada vez más por tarjetas y procesadores para estos gadgets
Aprovechando el Consumer Electronics Show (CES) celebrado a principios de enero, Intel presentó algunas aplicaciones para su nueva tarjeta/procesador Edison, que incluye procesador Quark de 400MHz y componentes de 22nm de bajo consumo.
Entre sus aplicaciones están servir de 'corazón' para pequeños robots, para los dispositivos de 'llevar encima' integrados en la ropa y el cuerpo y para gadgets concretos como un sistema de monitorización de bebés que ha recibido el premio al mejor producto infantil de esa feria de electrónica.
La tarjeta Edison está pensada para los dispositivos integrados en la ropa o el cuerpo (wereables). Tiene el tamaño de una tarjeta de memoria SD como la que se usa en teléfonos inteligentes, tabletas y portátiles, pero con toda la potencia de un ordenador al completo, por lo que los desarrolladores pueden crear prototipos fácilmente y sin preocuparse por cuestiones de tamaño, peso o fragilidad (dentro de lo razonable).
Tarjeta para monitorizar bebés
Un ejemplo práctico de sus posibilidades es un sistema llamado Mimo Baby Monitor. La tarjeta forma parte de un pequeño dispositivo con forma de tortuga de plástico redondeada que va incorporada en la ropita del bebé: incluye la batería y los sensores que mediante electrónica flexible salen por la tela para controlar la temperatura, humedad o movimientos del pequeño de la casa. En este caso particular la tortuga es impermeable, por razones obvias.
La información captada por el monitor Mimo se envía mediante señales Bluetooth y wifi a cualquier teléfono inteligente iPhone o Android que esté cerca. De este modo se puede hacer que suene el teléfono con un aviso si por ejemplo el bebé se moja durante la noche o si tiene demasiado frío o calor.
Además de conectarse con los dispositivos móviles tradicionales, Mimo también puede conectarse con otros equipos y gadgets caseros que estén preparados para ello. El fabricante imagina por ejemplo una taza en la que hay incorporados unos led de colores luminosos con iconos sobre el estado del bebé. Por ejemplo su temperatura si tiene fiebre.
Quizá en el poco tiempo podamos hacer que en la 'casa conectada' llena de dispositivos inteligentes el biberón se vaya calentando automáticamente en cuanto el bebé llora por la noche -sería otra de las posibilidades- pero de momento habrá que conformarse con disfrutar simplemente de una mayor sofisticación en lo que es la monitorización tradicional.
De una forma u otra, al final la mamá o el papá tienen tendrán que ir a la cuna a resolver la situación en cada momento. ¿O inventarán también robots para esto?