Scarlett Johansson deja Oxfam por anunciar una empresa que opera en asentamientos judíos
- Su campaña para SodaStream es "incompatible" con la labor de Oxfam
- La compañía tiene su mayor fábrica en territorios ocupados de Cisjordania
- "Salvar el mundo es mi verdadero trabajo", dice la actriz en el anuncio
La actriz estadounidense Scarlett Johansson ha abandonado su papel de embajadora de la organización caritativa Oxfam por participar en una campaña publicitaria de una empresa de refrescos israelí que opera en territorios ocupados de Cisjordania, según ha anunciado este jueves Oxfam.
"El papel de Johansson promocionando la empresa SodaStream es incompatible con su rol de embajadora mundial de Oxfam", por lo que la organización "ha aceptado su decisión de renunciar" al cargo honorífico, ha anunciado Oxfam en un comunicado.
"Oxfam cree que empresas como SodaStream, que operan en asentamientos, agravan la pobreza y la negación de los derechos de las comunidades palestinas por las que trabajamos y a las que apoyamos", ha afirmado la organización no gubernamental. "Oxfam se opone a todo comercio de los asentamientos israelíes, que son ilegales bajo la ley internacional".
El anuncio en la SuperBowl
El anuncio de la polémica será emitido durante la SuperBowl, la final de la Liga de fútbol americano y uno de los espacios más codiciados para una campaña publicitaria. "Como muchos actores, salvar el mundo es mi verdadero trabajo", dice la actriz al principio del anuncio.
El multimillonario acuerdo publicitario ha provocado una airada reacción entre activistas y grupos humanitarios, que critican que una embajadora de Oxfam ponga rostro a una compañía que tiene su mayor fábrica en una colonia judía. La empresa emplea a trabajadores palestinos e israelíes y asegura ser un modelo de cooperación pacífica, pero los asentamientos son considerados ilegales según el Derecho internacional y han sido condenados por Oxfam.
El pasado año el anuncio de SodaStream, una máquina con la que se pueden hacer refrescos con gas sin salir de casa, ya generó críticas y organizaciones humanitarias pidieron a la SuperBowl que no lo emitiera. El grupo 'Voces judías por la paz' denunció que explota los recursos naturales de un territorio ocupado y a los trabajadores palestinos.
La polémica llega en un momento delicado para las negociaciones de paz entre israelíes y palestinos auspiciadas por EE.UU. Funcionarios israelíes temen que si el diálogo fracasa, se produzca una llamada al boicot económico de Israel y de sus asentamientos.
"Burbujas de sangre"
En un artículo difundido el pasado viernes en The Huffington Post, Johansson se defendió de la polémica afirmando: "Sigo apoyando la cooperación económica e interacción social entre un Israel democrático y Palestina".
El portavoz de la actriz ha añadido, además, que "ella y Oxfam tiene diferencias de opinión fundamentales en temas como el boicot, la desinversión y el movimiento de sanciones".
Al Yazira se refiere al caso como "burbujas de sangre" y califica sus argumentos de "pobres", "absurdos", "inconsistentes" y "cínicos".
Johansson colaboraba con Oxfam desde 2005 y en 2007 se convirtió en embajadora mundial de su causa.