Los Legionarios de Cristo piden perdón por los abusos sexuales de su fundador Maciel

• En un comunicado han pedido perdón a las vícitmas
• Consideran "gravísimo y objetivamente inmoral" su comportamiento 
• Reconocen que la congregación religiosa corrió el peligro de desaparecer

Imágen del rio Tiber a su paso cerca del Vaticano en Roma

Los Legionarios de Cristo reunidos en su Capítulo General en Roma han expresado su reprobación de los comportamientos "gravísimos y objetivamente inmorales" de su fundador Marcial Maciel y han pedido perdón a sus víctimas mediante un comunicado.  La declaración, expuesta en un comunicado, reconoce que la congregación religiosa corrió el peligro de desaparecer" y que "la ayuda de la Santa Sede fue imprescindible para descubrir cómo la personalidad y el modo de actuar del Maciel estaba afectando a la congregación".

"Los Legionarios de Cristo piden perdón a todas las personas afectadas por su conducta y por las deficiencias de la congregación", informa Efe. También expresan su "hondo pesar por el abuso de seminaristas menores de edad, los actos inmorales con hombres y mujeres adultos, el uso arbitrario de su autoridad y de bienes, el consumo desmesurado de medicamentos adictivos y el haber presentado como propios escritos publicados por terceros".

Actitud "incomprensible e incoherente"

El fundador de la congregación, Marcial Maciel, además de abusar sexualmente sobre muchos seminaristas, tuvo tres hijos con dos mujeres diferentes. Apartarlo de su ministerio fue la primera medida drástica que tomó Benedicto XVI contra la pederastia, además de ordenar una investigación.

Según indican, les resulta "incomprensible" la "incoherencia" que Maciel siguiera presentándose durante décadas como sacerdote y testigo de la fe "mientras ocultaba estas conductas inmorales" y se dirigen a las víctimas de sus actos para pedirles un perdón que Maciel no les dio y que habían esperado de él "en vano", añade Europa Press.

El comunicado recoge un balance de la Comisión de Acercamiento - para la atención a víctimas de Maciel -, que atendió los doce casos que se le presentaron, y que ha concluido su trabajo. La congregación pide al nuevo Gobierno "que mantenga este compromiso de seguir buscando la reconciliación".

Habría podido desaparecer

Los Legionarios de Cristo reconocen que su congregación religiosa "habría podido desaparecer" y apuntan que "la ayuda de la Santa Sede fue imprescindible para descubrir cómo la personalidad y el modo de actuar del padre Maciel estaban afectando" a la misma.

Por otra parte, reflexionan sobre los pasos que se han dado en el proceso de renovación - revisión del carisma, ejercicio de la autoridad y formación - y admiten que les queda "mucho" por hacer y que esto exige "no sólo un cambio de textos legislativos, sino una conversión continua de mente y corazón".

En la revisión de las actuales constituciones, según apuntan, han separado lo que realmente expresa el patrimonio carismático de la congregación de otros elementos accidentales. Estos tres años han sido, según precisan, "un prolongado examen de conciencia" comunitario para "descubrir y purificar" lo que en su comportamiento personal e institucional no era propio de la vida religiosa.

Este comunicado de la organización religiosa se produce un días después de que el Comité para los Derechos del Niño de las Naciones Unidas acusa al Vaticano de encubrir los casos de abusos sexuales a menores para preservar su reputación. El informe es la mayor crítica a la Iglesia Católica por parte de un organismo internacional. El Vaticano, por su parte, ha rechazado las conclusiones de dicho informe.