La productora de Pocoyó, en preconcurso de acreedores, pide autorización para emitir bonos
- Zinkia solicitó el preconcurso de acreedores el pasado 31 de octubre
- En 17 días expira el plazo para decidir si se acoge al concurso de acreedores
- La empresa necesita refinanciar su deuda, cercana a los 10 millones
El presidente de Zinkia Entertainment, creadora de Pocoyó, José María Castillejo, ha sacado adelante en la Junta General Extraordinaria de la empresa celebrada este martes la autorización para delegar al consejo de administración de la compañía la aprobación de una nueva emisión de bonos convertibles o canjeables, han señalado accionistas del grupo.
Castillejo ha aprobado esta autorización con los votos que él ostenta y con la práctica totalidad de los votos en contra del resto de accionistas presentes en la Junta, que se ha producido a 17 días de que termine el plazo establecido para la situación de preconcurso de acreedores, que la compañía solicitó el pasado 31 de octubre.
Una vez reflejada su oposición a la propuesta, Castillejo incorporó dos nuevos puntos en el orden del día de la Junta, en los que solicitó el cese de Angel-Martín Ortiz y Alberto Delgado como consejeros de Zinkia, aduciendo "falta de confianza" en ellos, tal como han informado en un comunicado los propios vocales. El cese de estos consejeros se ha llevado a cabo con los votos favorables de Castillejo y con los votos en contra de la casi totalidad del resto de accionistas presentes.
El presidente de Zinkia, en concurso de acreedores
Ortíz y Delgado han explicado que Castillejo ya comunicó en el mes de diciembre pasado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) su situación de concurso de acreedores, tanto de la sociedad que posee las acciones de Zinkia, Jomaca 98, como él a título personal.
Además, han acusado al presidente de la compañía de estar utilizando su posición de mayoría en Zinkia "teniendo una frágil situación de la misma, ya que tiene en fase de ejecución un 33% de sus acciones como garantía de un crédito a favor de Miguel Valladares, proceso que ha suspendido temporalmente al declararse en concurso de acreedores, y el resto de sus acciones pignoradas por la Fundación Santa María de los Peñotes y por parte también de Miguel Valladares, con vencimiento en el mes de marzo del año 2015".
Ambos consejeros han advertido en su intervención en la Junta para no respaldar la propuesta del fracaso de la emisión de bonos que vencía el 31 de octubre, en la que no se consiguió el interés de los inversores, así como del hecho de que el presidente de Zinkia no ha presentado un acuerdo de refinanciación de su deuda, cercana a los 10 millones, con los acreedores de la compañía ni un plan de viabilidad que analice la situación de la empresa, ni tampoco ha desvelado si iniciará el proceso de concurso.
Asimismo, han subrayado el hecho de que la compañía ha comunicado en dos ocasiones y tras requerimiento de información por parte del Mercado Alternativo Bursatil (MAB), la falta de datos de cierre de la facturación, que podrían registrar una desviación presupuestaria de al menos el 10% sobre las previsiones para el ejercicio 2013, "manteniendo, de esta manera, la línea de incumplimiento sistemático de las previsiones publicadas en los ejercicios anteriores".