Ejecutado el cubano Juan Carlos Chávez por el asesinato de un niño de 9 años
- Es el cuarto reo ejecutado con clorhidrato de Midazolam en Florida
- El Estado ha ejecutado a 82 presos desde 1976
Especial: La pena de muerte en el mundo
El cubano Juan Carlos Chávez, condenado por el asesinato del niño Jimmy Ryce, de 9 años, ha sido ejecutado este miércoles en una cárcel estatal de Florida, después de una retrado de casi dos horas a la espera de un fallo del Tribunal Supremo de Estados Unidos.
A Chávez, de 43 años, le suministraron la inyección letal pasadas las 7 de la tarde en la prisión de Starke, en el norte de Florida, después de que el tribunal federal desestimara un recurso por los nuevos componentes en el cóctel mortal del estado.
Los abogados de Chávez habían presentado el pasado 6 de febrero una apelación que buscaba posponer la pena de muerte del cubano, al argumentar que la nueva composición de la inyección mortal viola la Constitución al considerarla un "castigo cruel e inusual".
Florida ha ejecutado a 82 reos desde que se restableció la pena capital en el estado en 1976, según datos del Departamento de Prisiones
Sin embargo, el fallo del Supremo federal fue opuesto y, siguiendo el protocolo de la prisión, un particular, a quien pagan 150 dólares, le suministró la inyección letal.
Polémica entorno a la nueva inyección letal
El cubano se convirtió así en el cuarto reo en el estado ejecutado con clorhidrato de Midazolam, un fármaco que ha sido polémico desde su aprobación en septiembre pasado como parte de la inyección letal en Florida.
La nueva droga se usa para sustituir el barbitúrico pentobarbital, cuyo fabricante prohibió su uso para ejecuciones, y busca provocar la inconsciencia del reo antes de suministrarles las otras drogas letales.
Sin embargo, el Centro de Información sobre la Pena de Muerte, una organización sin ánimo de lucro, considera que la droga puede no ser tan efectiva como sedante lo que provocaría que el reo sienta un dolor innecesario cuando se le suministren los otros dos fármacos.
Chávez, un labriego que llegó en 1991 a Miami, fue condenado por el secuestro, violación y asesinato de Ryce, ocurrido en 1995 en una zona rural del condado de Miami y que conmocionó a todo el país.
El niño fue secuestrado a punta de pistola poco antes de llegar a su casa tras bajar del autobús escolar. Tras mantenerlo encerrado durante varias horas en su furgoneta, en donde lo violó, Chávez lo asesinó cuando éste intentó escapar, y luego lo descuartizó.
Chávez fue arrestado tres meses después, cuando se encontró la mochila de Ryce escondida en su tráiler.
Ley contra violadores
A partir de ese momento, los Ryce buscaron impulsar una ley contra los violadores, aprobada en 1998 y que permite al estado detener de forma indefinida a depredadores sexuales violentos hasta que puedan probar que se han rehabilitado.
También crearon el Centro Jimmy Ryce, en Vero Beach, en el centro de Florida, que asesora a padres en la prevención de secuestros por parte de violadores, y coopera con las autoridades policiales para lograr una respuesta más rápida frente en estos casos.
La madre de Jimmy Ryce, Claudine, murió en 2009 de un infarto, mientras que su medio hermana, Martha, se suicidó el año pasado.
Autoridades de la prisión estatal de Florida reportaron la muerte de Chávez a las 8:17 de la tarde.
Entre los testigos de la ejecución de Chávez, unos 35 en total, estuvieron el padre del niño asesinado, el abogado Don Ryce, y el hermano de éste, Ted.
Horas antes, la Arquidiócesis de Miami realizó una vigilia por Chávez, al igual que por la víctima y su familia, en la iglesia católica de Santa Marta.