La oposición venezolana asegura que hay orden de detención contra su líder Leopoldo López
- Le acusan de liderar los disturbios violentos de este miércoles
- López aseguró que las protestas continuarían
- Sin embargo, el líder opositor se encuentra en casa, según su formación
Un tribunal de Caracas, Venezuela, ha dictado una orden de detención contra el dirigente opositor Leopoldo López por los incidentes registrados el miércoles en los que murieron tres personas y más de una veintena resultaron heridas tras una marcha en Caracas, según ha llegado a confirmar su propia formación política, Voluntad Popular, a la cadena BBC Mundo. Por el momento, no hay confirmación oficial por parte del Gobierno.
"Me confirman en @VoluntadPopular la orden de captura a López. Es grave y puede ser un detonante de más protestas. A las 11, rueda de prensa", apunta en su cuenta de Twitter el corresponsal de BBC Mundo en Venezuela, Daniel Pardo.
La información también ha sido publicada por el periódico caraqueño El Universal, que cita fuentes judiciales y muestra una supuesta imagen de la orden judicial, en la que la jueza 16 de Control de Caracas, Ralenys Tovar Guillén, ha aceptado una petición del Ministerio Público (MP) para detener a López y ha ordenado al Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) aprehenderlo y allanar su residencia.
Los delitos de los que se acusan al dirigente opositor incluyen asociación para delinquir, instigación a delinquir, intimidación pública, incendio de edificio público, daños a la propiedad pública, lesiones graves, homicidio y terrorismo, señaló el diario.
López animó a continuar la protesta
Sin embargo, la información aún es confusa. Una fuente del partido Voluntad Popular, que encabeza López, ha indicado a Efe que, por el momento, solamente tienen conocimiento de la orden por la publicación del diario y que ni se ha ejecutado la instrucción ni han recibido notificación formal. López se encuentra reunido con sus abogados "evaluando la situación", según la misma fuente.
El dirigente de Voluntad Popular animó el miércoles a sus seguidores a continuar con las movilizaciones pese a la violencia desatada en las calles. "Sépalo usted señor Maduro: haga lo que haga, esto que comenzó no va a parar hasta que se conquiste el cambio en paz y democracia para todos los venezolanos", dijo López en rueda de prensa.
Mientras, según Efe, el líder opositor no ha sido detenido. Así lo ha informado a la agencia el coordinador de Voluntad Popular, Carlos Vecchio. "Mucha gente me ha preguntado dónde está Leopoldo. En su casa. ¿Y donde está Leopoldo? Verificando lo que salió", ha afirmado Vecchio, en rueda de prensa, sobre el paradero del líder opositor.
Leopoldo López, exalcalde del municipio caraqueño de Chacao, es una de las figuras opositoras al chavismo más relevantes de Venezuela. En 2008 fue inhabilitado políticamente tras la acusación de corrupción la Contraloría. El líder opositor llevó el caso a la Corte Interamericana de Derechos Humanos que falló a su favor en 2011, aunque el Gobierno venezolano consideró “inejecutable” el fallo.
Capriles reivindica su llamamiento a la salida no violenta
Mientras, el líder opositor venezolano Henrique Capriles ha vuelto este jueves a tomar distancia de las fuerzas de la oposición que exigen la salida anticipada del Gobierno, al defender su opción por un "camino más largo" que evite situaciones que lleven a la violencia.
"Nosotros elegimos el camino más largo, a algunos no les gusta, pero es el camino seguro", ha señalado Capriles en una rueda de prensa donde ha repudidado los incidentes registrados el miércoles. El líder de la oposición venezolana y excandidato presidencial ha salido al paso de quienes lo cuestionan por supuesta pasividad frente al Gobierno y ha señalado que "hay momentos donde debe primar la razón por encima de la emoción".
"La violencia le interesa a este Gobierno para tapar la crisis (...) Nosotros hemos advertido, claramente, que la violencia solo le conviene a un lado", ha señalado. "Las bolas o la valentía no se miden por quien insulte más, hable más duro o tire mas piedras", ha agregado.
Tres fallecidos tras una jornada de movilizaciones
La supuesta orden detención se produce tras una jornada, la de este miércoles, de multitudinarias manifestaciones y violentos disturbios. Una marcha por el centro de Caracas convocada y desarrollada de forma pacífica contra la situación económica, la política de Maduro y recientes detenciones de estudiantes por altercados en el oeste del país degeneró en enfrentamientos violentos que acabaron con la vida de dos personas.
Horas más tarde, una tercera víctima se registró en Chacao, municipio del este de Caracas, en incidentes atribuidos por el alcalde de la localidad, Ramón Muchacho, a "grupos irregulares". Además se produjeron 66 heridos y hay al menos 69 detenidos por los incidentes en marchas en todo el país. Según informó el presidente del Parlamento, Diosdado Cabello, uno de los tres fallecidos era un líder del histórico colectivo chavista 23 de enero.
"Murieron tres personas en Caracas lamentablemente, y pudieron perder la vida muchos más. Pero tenemos uno de ellos, Juan Montoya, un dirigente social (...) Bassil Alejandro Dacosta Frías y otra persona que falleció más tarde en (el municipio capitalino) Chacao", ha precisado la fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega.
La fiscal indicó además que durante los incidentes 54 vehículos, seis de organismos del Estado y el resto de particulares, sufrieron daños. "Lo peor fue contra el Ministerio Público, eso fue planificado, eso fue direccionado y vamos a investigar", señaló sobre el lanzamiento de objetos por parte de algunos jóvenes encapuchados que destrozaron la fachada de la sede de la Fiscalía.
"No solamente los autores materiales, sino también los autores intelectuales (...) estamos trabajando en eso. Estamos practicando todas las diligencias de investigación necesarias para determinar quiénes son los responsables", ha afirmado al respecto, según Efe. El presidente venezolano, Nicolás Maduro, repudió la violencia y denunció un "rebrote nazifascista", mientras que sus adversarios le acusaron de suspender las garantías constitucionales.