Mas-Colell: "No daremos nunca ningún paso que nos pueda dejar fuera de Europa"
- El conseller tranquiliza a los empresarios de las consecuencias del soberanismo
- "Si somos cuidadosos, el conflicto no afectará negativamente a la economía"
- Defiende que el autogobierno es necesario para el progreso económico catalán
El consejero de Economía y Conocimiento, Andreu Mas-Colell, ha afirmado este miércoles que la Generalitat no dará "nunca ningún paso" que pueda dejar a Cataluña fuera de Europa y que quienes tengan este temor pueden estar tranquilos; asimismo ha señalado que el conflicto político no afectará negativamente a la economía si se lleva con cuidado.
En un almuerzo-conferencia en la Cámara de Comercio de Barcelona, ha opinado que España está demostrando ataques a las competencias de las autonomías y de Cataluña con leyes como la de educación, la de unidad de mercado y la del sector local, y que "Europa, tarde o temprano, se deberá implicar" porque Cataluña no tiene ninguna intención de abandonar la UE.
"Nosotros no daremos nunca ningún paso que nos pueda dejar fuera de Europa, porque somos europeístas de raíz. Europa es libertad, civilización, democracia, tolerancia y respeto, y todo eso nos protege", ha aseverado.
"La invocación a Europa será constante, no nos quedaremos encerrados en casa", ha añadido, ya que el Gobierno balear explicará a Europa y al mundo las políticas centralizadoras e uniformadoras del Gobierno de España, y Cataluña no se dejará chafar con la excusa de la crisis, ha recalcado.
Autogobierno para el progreso económico
Ha definido el conflicto político con el Gobierno central como la lucha entre el deseo de autogobierno de Cataluña y la obsesión del Gobierno español por impedirlo, y ha defendido que el autogobierno de Cataluña es una necesidad para su progreso económico.
"Persistiremos pacíficamente, democráticamente y haciendo grandes mayorías, y Cataluña tendrá la oportunidad de decidir su destino para transformar el conflicto en diferencia".
Después de que la semana pasada se diera a conocer un manifiesto de unos sesenta directivos alemanes contrarios a la independencia y de que esta semana las patronales CEOE y Foment rechazaran implicarse en el proceso soberanista catalán, como había sugerido el presidente de la Generalitat, Artur Mas, Mas-Colell ha querido abundar en las aclaraciones del mensaje del Govern que hizo el presidente catalán.
También ha querido tranquilizar al auditorio empresarial del acto sobre las implicaciones en la economía que puede tener el conflicto político: "Si somos cuidadosos, el conflicto no afectará negativamente a la economía".
Ha reconocido que lo lógico es que las organizaciones empresariales tomen posiciones moderadoras, con llamamientos al diálogo y la negociación: "Por parte de la Generalitat serán siempre bien recibidas, aunque no olviden que para el diálogo y la negociación se necesitan dos partes".
Sobre este punto, ha discrepado con las declaraciones de este miércoles de la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho, sobre que la pelota no está en el lado del Gobierno central.
"La lanzan cada día con la Lomce, la ley de unidad de mercado y la ley local, etcétera. De momento, solo veo movimiento en la dirección contraria al diálogo y la negociación".
Reivindicaciones de financiación y déficit
Mas-Colell se ha mostrado muy crítico con la actitud del Gobierno central, por ejemplo en el reparto de los límites de déficit -"creemos que responde a intereses políticos que responden a un interés de la deconstrucción del sistema autonómico"- y en los retrasos en la aplicación del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), que hacen peligrar el cumplimiento de los plazos de pago a proveedores de la ley de morosidad, ha señalado.
Preguntado por el nuevo sistema de financiación autonómica que prepara el Gobierno central para este año y con aplicación a partir de 2015, Mas-Colell ha señalado que Cataluña no liderará reivindicaciones ni participará en "ninguna comedia, porque el Ministerio no dejará que decida nadie más que el Ministerio", pero ha puntualizado que debe ser un sistema admisible, que no incluya patologías como ha pasado con el aumento del IVA, cuya mayor recaudación no repercute en las autonomías, que además deben pagar más por este incremento impositivo.
En todo caso, ha insistido en la necesidad de un amplio margen de autogobierno para Cataluña y en que el Gobierno catalán trabajará para contar con una Agencia Tributaria catalana "potente y que recaude los impuestos en Cataluña".