La reforma eléctrica del Gobierno resta 801 millones de euros al beneficio de Iberdrola en 2013
- Ganó 2.572 millones en 2013, un 7% menos por el impacto de las medidas
- La compañía fija un "suelo" para 2014 de 2.300 millones de beneficio neto
- Prevé invertir 9.600 millones entre los años 2014 y 2016, un 15% en España
- Sánchez Galán: "Si el regulador dice que no hace falta no vamos a invertir"
La reforma eléctrica del Gobierno ha tenido un impacto negativo en los resultados de Iberdrola de 801 millones de euros, tal como ha explicado la eléctrica en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Así, el beneficio neto de Iberdrola en 2013 fue de 2.571,8 millones, lo que supone un descenso del 7% respecto a los 2.840 millones de 2012, como consecuencia del efecto de las medidas regulatorias en España. Aunque este efecto ha quedado parcialmente compensado por los negocios liberalizados y renovables.
El resultado bruto de explotación (Ebitda) se situó en 7.205 millones, un 6,8% menos que en el ejercicio anterior, afectado por el aumento del 33% de los tributos en España, sumando 521 millones, tras las tasas sobre la generación y las renovables.
En conferencia con analistas para presentar los resultados, el presidente de Iberdrola, José Ignacio Sánchez Galán, ha cargado especialmente contra los impuestos en España, ya que solo los nuevos tributos aplicados desde el pasado año suponen 486 millones, distribuidos en 250 millones por el impuesto del 7% para todas las tecnologías, 128 millones del canon hidráulico y 108 millones de la tasa a los residuos nucleares.
Así, "la introducción de impuestos a la generación ha tenido un impacto sobre la generación tradicional y renovable", hasta el punto que actualmente el apartado fiscal en España supone un coste mayor que la partida de personal.
Además, Sánchez Galán ha asegurado que el negocio de generación en España "pierde dinero" y ha criticado la política energética emprendida por el Gobierno que, ha dicho, ha llevado a frenar la inversión del grupo en España y a tener que cerrar centrales. "Los reguladores dicen que sobra inversión en redes y generación. Si el regulador dice que no hace falta no vamos a invertir", ha dicho.
Por su parte, las ventas de la compañía fueron de 32.807,9 millones, un 4,1% menos que en 2012, y el flujo de caja operativo disminuyó un 9,8%, hasta los 5.619 millones, a diferencia del margen bruto, que se mantuvo estable en 12.577 millones gracias a las mejoras de los negocios de generación y renovables.
Reduce su deuda neta en 2.271 millones
Asimismo, Iberdrola explica que en un año de alta generación hidráulica (+74,5%) y eólica (+12,9%), los segmentos residencial y servicios en España se vieron afectados por la caída de la demanda eléctrica ajustada del 2,2%.
En cualquier caso, la compañía presidida por Sánchez Galán redujo su deuda neta en 2.271 millones en los últimos doce meses, situando el apalancamiento en el 44,2% incluyendo el déficit de tarifa, un 42,8% excluyéndolo.
Esta reducción de la deuda es fruto de la generación positiva de caja del negocio (2.566 millones), la contención de las inversiones, el avance "positivo" de las desinversiones (745 millones) y los fondos recibidos por las titulizaciones (2.806 millones).
Por otra parte, Iberdrola ha concluido ya su plan de desinversiones por 2.000 millones contemplado en su plan estratégico, después de desprenderse de participaciones en EDP, Itapebi y Nugen.
Iberdrola estima en 1.310 millones el impacto regulatorio en 2014
En lo que respecta al ejercicio de 2014, Iberdrola calcula que las distintas medidas regulatorias adoptadas desde 2012 tendrán un impacto de alrededor de 1.310 millones en sus cuentas.
El director general de Operaciones de la eléctrica, José Luis San Pedro, ha explicado que las distintas medidas aprobadas hasta julio de 2013 supondrán un impacto de 868 millones y las tomadas desde entonces -es decir, la reforma energética de julio-, de 442 millones. El impacto de la reforma energética se distribuirá en 240 millones estimados por el recorte de la retribución del régimen especial (renovables, cogeneración y residuos), que todavía no ha sido definida; 132 millones por el ajuste en transporte y distribución y 70 millones por los cambios en los pagos por capacidad.
Así, San Pedro ha asegurado ante los analistas que la eléctrica presentará recursos judiciales ante "ciertas normas que en nuestra opinión tienen dudosa legalidad", como las relativas a la distribución, las renovables, el bono social o los impuestos a la generación. San Pedro ha criticado que "más que una reforma del sistema de regulación es una reforma fiscal con carácter puramente recaudatorio" aunque ha alabado el objetivo de terminar con la generación de déficit tarifario -desfase entre ingresos y gastos del sistema eléctrico- estructural.
En ese sentido, ha cifrado en 150 millones el importe máximo de déficit tarifario que Iberdrola se vería obligada a financiar a partir de este año, cuando han entrado en vigor los mecanimos automáticos para corregir posibles desfases.
El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, ha afirmado que, con lo que conoce hasta ahora y desde el punto de vista técnico, ve "imposible" implantar el nuevo mecanismo para fijar el componente de energía de la tarifa eléctrica que irá vinculada a la evolución del mercado.
En rueda de prensa para presentar los resultados de 2013 y el plan de inversiones de la compañía hasta 2016, Sánchez Galán ha dicho que cualquier sistema que lleve a "más transparencia y a menos coste" es bueno, pero ha advertido de las dificultades técnicas que conlleva éste.
Iberdrola prevé invertir 9.600 millones entre 2014 y 2016
Además, Iberdrola prevé invertir 9.600 millones entre los años 2014 y 2016, que estarán enfocados a "negocios y países con una regulación predecible y estable" y de los que solo un 15% se dedicará a España.
Según su plan de perspectivas presentado a la CNMV, las inversiones de estos dos años se dirigirán principalmente al Reino Unido (un 41% del total), Latinoamérica (23%), Estados Unidos (17%) y España (15%). Por negocios, la mayor parte de las inversiones se destinarán a redes (57%) y, en menor medida, a renovables (22%). El 88% de todas las inversiones se centrarán en negocios regulados.
En términos de personal, la eléctrica prevé reducir su plantilla en 1.000 empleados, hasta situarla en unos 27.000 a finales de 2016.
En esta documentación, la compañía fija un "suelo" para sus resultados de 2014 de 2.300 millones de beneficio neto y 6.600 millones de resultado bruto de explotación (ebitda), una vez aplicados los nuevos criterios contables y tras el impacto regulatorio de las últimas medidas aprobadas. A partir de ahí, la compañía prevé incrementar estas magnitudes alrededor de un 4% anual.
Al mismo tiempo, prevé desinversiones por 500 millones -adicionales a los 2.000 millones ya concluidos- y reducir la deuda neta en unos 1.800 millones hasta situarla en 25.000 millones en 2016.
Por último, la empresa prevé mantener el "suelo" de retribución a los accionistas en 0,27 euros anuales -la cantidad fijada para 2013-, que evolucionará en línea con el beneficio neto.