Los detalles de por qué Whatsapp le ha costado una millonada a Facebook
- Facebook ha adquirido una pequeña empresa de 50 empleados
- Sus cifras son millonarias en todos los sentidos: valoración, usuarios, mensajes
- La reacción general ha sido de sorpresa por la altísima valoración de WhatsApp
Este miércoles se conocía que Facebook adquiría el servicio de mensajería WhatsApp por unos 13.800 millones de euros (19.000 millones de dólares).
Es una de esas operaciones de tal magnitud que puede ser un poco difícil de entender, pero analistas y expertos han ido desgranando detalles al respecto, algunos realmente curiosos.
Como tales, algunos son simplemente datos que no juzgan ni están a favor ni en contra de nada; otros entran dentro del campo de las predicciones y los puntos de vista.
Algunos puede que no sean del todo acertados o técnicamente precisos, pero también son curiosos y permiten hacerse una idea de lo que ha supuesto la operación.
- Los 19.000 millones de dólares se dividen en tres tramos: 4.000 en efectivo, 12.000 en acciones de Facebook y otros 3.000 en opciones sobre acciones que los empleados de WhatsApp podrán hacer efectivos en cuatro años.
- Es difícil hacerse una idea de cuánto son 19.000 millones de dólares, pero es más que el producto interior bruto de Jamaica, Corea del Norte o Islandia. Esta aproximación circula bajo la idea "Si WhatsApp fuera un país... sería el 113º del mundo".
- Comparando la operación con otras similares, en cuanto a valoración de empresas: la capitalización bursátil de Sony es de 17.000 millones de dólares, la de la aerolínea United Airlines 15.700 millones o las tiendas de moda Gap de 18.900 millones.
- Tras la operación, los propietarios de WhatsApp ahora poseen cerca de un 8% de las acciones de Facebook.
- En la misma línea y teniendo en cuenta lo que se pagó por otras empresas tecnológicas en su momento, se podría decir que WhatsApp vale tanto como 10 Youtubes, 20 Instagrams, 2 Skypes, 3 Nokias, 75 Washington Posts, 270 Boston Globes o 1 Motorola y medio.
- En WhatsApp se cifran en 400-450 millones el número de usuarios a nivel mundial. De modo que, dividiendo el coste de la operación, sale un 'valor' de unos 30-40 euros por usuario. Este valor ('coste por usuario') es uno de los que suele manejarse en este tipo de operaciones como fundamental.
- WhatsApp siempre se ha considerado una aplicación gratuita, aunque los usuarios de algunas plataformas tenían que pagar un euro para instalarlo y pasado un año también se pedía un euro en concepto de suscripción. No obstante, estos ingresos palidecen ante los gastos que debe tener la empresa en cuanto a servidores y comunicaciones o el monto de la propia operación.
- Brian Acton, uno de los creadores de Whatsapp, acudió hace cuatro años y medio a Facebook a una entrevista aspirando a un puesto de trabajo. Pero le rechazaron. Se lo tomó con deportividad y tuiteó: "Era una gran oportunidad de conectar con gente fantástica, pero bueno... A ver qué próxima aventura surge en mi vida".
- En WhatsApp trabajan unas 50 personas. En Facebook, 6.300.
- Otros analistas apuntan a lo interesante para Facebook, una compañía con unos 1.200 millones de usuarios registrados activos, de haber adquirido los 'números de teléfono' de 400 millones de personas, que ahora podrán 'enlazar' con sus cuentas de Facebook. Los más detallistas recuerdan que con esa adquisición también los millones y millones de mensajes diarios y el histórico de conversaciones personales, de negocios y conexiones de todos esos clientes de Whatsapp ahora son propiedad de Facebook.
En general, la sensación en Internet entre los analistas ha sido de sorpresa por la altísima valoración de WhatsApp, algo que tan solo el tiempo dirá si ha sido algo adecuado, demasiado alto o demasiado barato.
La situación recuerda a muchos al a burbuja de Internet: una pequeña compañía creada de la nada, sin apenas ingresos y cuyo único objetivo parece haber sido ser vendida al gigante de turno (Google, Yahoo, Microsoft... en este caso, Facebook).
Por otro lado, los usuarios de programas de mensajería que aborrecen Facebook ya están emigrando y animando a los demás a cambiarse a otros programas de mensajería, como Telegram o Line.
Seguramente, en cuanto las aguas se calmen un poco se conocerán más detalles sobre la operación y su alcance: algo que a la gente de la calle poco le afecta porque sus mundanas preocupaciones con la mensajería y las redes sociales suelen ser otras.