Los disturbios en Venezuela se extienden a los estados de Tachira y Mérida
- El número de muertos sigue siendo de seis
- Estudiantes y Policía se enfrentan en San Cristóbal
- El Gobierno anuncia medidas especiales
Fuerzas de seguridad y manifestantes se enfrentaron este jueves en varias localidades de Venezuela, en una oleada de protestas violentas que dejan al menos seis muertos y decenas de heridos y detenidos.
Los manifestantes, muchos de ellos estudiantes, piden la dimisión del presidente, Nicolás Maduro, al que culpan de la creciente inseguridad ciudadana, la inflación y los problemas de distribución.
El propio Maduro ha informado de la muerte de un trabajador. "En Barquisimeto hace una hora, un trabajador, Arturo Alexis Martínez se encontraba limpiando escombros (...) y fue asesinado de unos balazos de unos edificios por uno de estos grupos, porque estaba limpiando escombros para él pasar con su vehículo", ha explicado Maduro en un acto de Gobierno en Caracas transmitido por televisión.
Maduro ha explicado que el obrero de la estatal Siderúrgica del Orinoco (Sidor) al que se dio por muerto tras ser tiroteado en una marcha a favor del Gobierno sobrevivió aunque está "gravemente herido".
En los jardines del Palacio Presidencial, Maduro ha mostrado varios autobuses con agujeros de bala. "Esta es la obra del fascismo", ha dicho.
Incidentes en Tachira y Mérida
Los disturbios más graves se han producido en los estados de Tachira y Mérida (oeste del país). En la capital del primero, San Cristóbal, muchos negocios permanecen cerrados mientras los estudiantes han levantado barricadas.
El Gobierno ha anunciado "medidas especiales" para acabar con la violencia. "Esto no es una militarización", ha dicho el ministro de Interior, Miguel
Rodríguez Torres. "Estamos aquí para trabajar para la gran mayoría de la gente de Tachira. Antes de tener diálogo, debemos tener orden".
Maduro ha advertido que no permitirá que la oposición convierta Tachira "en otro Bengasi", en referencia a la ciudad libia.
Los incidentes se iniciaron el pasado día 12, cuando una manifestación organizada por el dirigente opositor Leopoldo López degeneró en violencia y un ataque a la sede del Ministerio Público en Caracas. López permanece detenido, acusado de alentar la violencia.
El Gobierno asegura que Estados Unidos y otros países están detrás de las protestas en un supuesto intento de desestabilización en el país, mientras que la oposición acusa al chavismo de "infiltrar" grupos armados dedicados a generar violencia.
Maduro amenaza con cortar la emisión de la CNN en Venezuela
Por otro lado, Maduro ha acusado a la cadena estadounidense CNN de "envenenar con sus mentiras" y ha amenazado con echarla del país "si no rectifica". "Las 24 horas del día su programación es de guerra", ha denunciado.
El mandatario ha insistido en que la cadena "quiere mostrar al mundo que en Venezuela hay una guerra civil". En este punto, ha asegurado que ha pedido a la ministra de Comunicación e Información, Delcy Rodríguez, que notifique a CNN que ha iniciado "un proceso administrativo para sacarlos de Venezuela".
"Se va CNN si no rectifican", ha sentenciado el jefe de Estado, que ha insistido en su intención de retirarla de las cable operadoras de Venezuela si mantienen la misma actitud, tal y como ya se hizo --por orden presidencial-- con el canal colombiano de noticias NTNT24 el pasado 12 de febrero. "No acepto propaganda de guerra", ha apostillado.
Por otra parte, Maduro ha asegurado que los trabajadores de los medios oficialistas, como Cantv y Corpoelec, "también han sido agredidos". "Ellos no saben la fuerza volcánica de la clase obrera, que es capaz de todo", ha añadido el presidente, mientras mostraba las unidades "agredidas por el fascismo", tal y como ha recogido el diario venezolano 'El Nacional'.