Endesa ganó 1.879 millones en 2013, un 8% menos, por el impacto de la reforma eléctrica
- Su beneficio cayó un 17% en España y Portugal por los cambios regulatorios
- La eléctrica afirma que el cambio de tarifas no se podrá aplicar hasta 2015
Endesa obtuvo un beneficio neto de 1.879 millones de euros en 2013, lo que supone una reducción del 8% respecto al obtenido en el mismo periodo del año anterior, por el impacto de la reforma eléctrica y las medidas regulatorias y fiscales introducidas en 2012 y 2013.
Sólo las medidas aplicadas durante el pasado año han reducido el beneficio neto en 659 millones de euros, según ha informado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En concreto, el beneficio neto del negocio de España y Portugal cayó un 17%, como consecuencia de dichas medidas, hasta situarse en 1.176 millones, con una contribución del 63% al resultado neto total.
Precisamente este martes Endesa ha recurrido ante el Tribunal Supremo un real decreto y una orden de retribución que baja la remuneración por la distribución de energía eléctrica.
Frente a este retroceso de las ganancias, el beneficio neto de Latinoamérica se situó en 703 millones, un 13% más, gracias a la buena evolución del negocio y al reconocimiento, por parte del Gobierno argentino, de la compensación de las variaciones de costes no trasladados a tarifa desde 2007 hasta febrero de 2013. Estos dos efectos compensaron la devaluación de las monedas locales frente al euro.
Por su parte, el resultado bruto de explotación (Ebitda) registró una reducción del 4% en 2013, hasta 6.720 millones de euros. Esta disminución se corresponde, por una parte, con una caída del 14% en el negocio de España y Portugal, con 3.277 millones, y, por otra, con un aumento del 7% en el negocio de Latinoamérica, hasta 3.443 millones.
Bajan los costes fijos
En el negocio de España y Portugal, las medidas fiscales aplicadas en 2013 (664 millones de euros más en costes) y el resto de medidas adoptadas por el Gobierno (269 millones de euros menos en ingresos) tuvieron un impacto en el Ebitda de 933 millones de euros. A ello se añade a los 396 millones del impacto anual recurrente para Endesa de las medidas regulatorias puestas en vigor en 2012.
La suma de todas las medidas fiscales y regulatorias aplicadas en España desde el inicio de 2012 han tenido un impacto negativo total de 1.329 millones de euros en el Ebitda de 2013.
Los esfuerzos para conseguir mejoras operativas han compensado, en parte, los impactos negativos de las medidas, y han dado como resultado una reducción de 142 millones de euros en los costes fijos de 2013. Como consecuencia de lo anterior, el Ebitda ascendió a 3.277 millones de euros y el resultado neto de explotación (Ebit) a 1.651 millones de euros, con una reducción del 14% y del 17% respectivamente.
Más negocio en Iberoamérica
Asimismo, el aumento en el negocio de Iberoamérica (234 millones de euros más) es debido al reconocimiento, por parte del Gobierno argentino, de la compensación de las variaciones de costes no trasladados a tarifa desde 2007 hasta febrero de 2013 por un importe de 293 millones de euros.
Esta situación ha compensado el importe pendiente (63 millones de euros) de los sobrecostes excepcionales de compra de energía que han soportado las compañías distribuidoras de Brasil. Este importe se compensará en las sucesivas revisiones tarifarias, de acuerdo con lo establecido en la regulación brasileña. El Ebitda de Latinoamérica supone ya el 51% del total de la compañía, mientras que el Ebit representa un 62%.
Asimismo, las inversiones en el negocio de España y Portugal fueron de 604 millones de euros en 2013, un 33% menos que en el mismo período del año anterior, mientras que las inversiones en el negocio de Latinoamérica ascendieron a 1.216 millones de euros, un 5% más.
Endesa tenía acumulado, a 31 de diciembre, un derecho de cobro de 3.146 millones de euros por diversas partidas reconocidas en la regulación eléctrica española: 1.985 millones de euros por la financiación del déficit de ingresos de las actividades reguladas y 1.161 millones de euros por las compensaciones derivadas de los sobrecostes de la generación extrapeninsular.
La nueva tarifa eléctrica no puede funcionar antes de 2015
Endesa ha señalado los "principales problemas" del nuevo sistema planteado por el Gobierno para fijar el coste de la energía en la tarifa eléctrica, y ha advertido de que los sistemas de telecomunicaciones y de facturación "no pueden modificarse antes de 12 a 18 meses" y con una "cuantiosa inversión". "Cuando el nuevo sistema sea implementado, no antes de 2015, es muy probable que veamos un elevadísimo nivel de reclamaciones", añade.
Tras anular la última subasta trimestral Cesur, el Gobierno propuso que a partir del próximo abril el coste de la energía, que supone alrededor de la mitad del recibo eléctrico, esté vinculado a la evolución del mercado mayorista. Un sistema al que Endesa ve varios problemas: los precios no se conocerán con adecuada antelación al consumo, serán muy volátiles y no resultarán "transparentes" para compararlos con otras ofertas.
Asimismo dice que se darán "subsidios" cruzados entre aquellos clientes que no dispongan de contadores inteligentes ya que su patrón de consumo será, por lo general, diferente del patrón estándar empleado para calcular su tarifa. "Creemos que esta metodología actuará en sentido contrario al esperado. En lugar de permitir un mayor grado de liberalización se reducirá el espacio para comercializadores en el ámbito minorista", concluye la eléctrica.
El mercado "spot", al que irá referenciado el precio de la energía con el nuevo sistema, "es un mercado físico a corto plazo para ajustes residuales diarios y no es una referencia adecuada de precios minoristas a plazo".
Al precio voluntario para el pequeño consumidor (PVPC), que sustituye a la antigua tarifa de último recurso (TUR), están acogidos unos 16 millones de consumidores con una potencia contratada de menos de 10 kilovatios (kw).