El Parlamento de Chipre aprueba una nueva versión de la ley de privatizaciones
- El Parlamento del país había rechazado la ley el pasado jueves
- Era uno de los requisitos exigidos a cambio del cuarto tramo del rescate
- Nicosia debe lograr 1.700 millones hasta 2017 con las privatizaciones
El Parlamento de Chipre ha aprobado este martes la nueva versión de la ley sobre privatizaciones de empresas estatales, de la que depende el desembolso del próximo tramo del rescate, y que fue rechazada inicialmente el pasado jueves. Con la aprobación de esta ley se abre el camino a las privatizaciones, en un principio, de la compañía estatal de electricidad AHK, de la empresa de telecomunicaciones CYTA, y de la autoridad portuaria de Chipre.
Los planes de privatización han llevado a las calles a los sindicatos de las tres empresas, cuyos miembros se reunieron nuevamente ante el Parlamento para protestar contra un plan que describen como la "venta de la riqueza pública".
El Gobierno del presidente Nikos Anastasiadis introdujo algunas enmiendas en la versión original de la ley con el objetivo de lograr el apoyo necesario en el Parlamento para que fuera aprobada, ya que es uno de los requisitos de la troika para obtener el cuarto tramo del rescate, valorado en 236 millones de euros.
Según la hoja de ruta del acuerdo firmado en 2013 con la troika (Comisión Europea, Banco Central Europeo, Fondo Monetario Internacional) a cambio del rescate financiero de 10.000 millones de euros, Chipre tiene que conseguir 1.400 millones de euros a través de las privatizaciones de la CYTA y de la autoridad portuaria, previstas hasta 2015, y de AHK, hasta finales de 2017.
Una vez aprobada la ley se espera que el Eurogrupo dé luz verde al desembolso del nuevo tramo en su próxima reunión del próximo lunes.
Respaldo de los exsocios del Gobierno
La nueva versión obtuvo el apoyo de 30 diputados, los 20 del partido gobernante conservador DISY, uno del diputado EVROKO, el pequeño socio gubernamental presente con solo un parlamentario en la Cámara, un independiente, y los 8 parlamentarios del centrista DIKO, hasta la semana pasada socio del Ejecutivo. En contra se pronunciaron 26 diputados, los 19 diputados del comunista AKEL, 5 del socialista EDEK, y el único representante de los ecologistas.
La abstención de 5 de los 8 diputados de DIKO en la votación del jueves pasado, justificada como reacción al rechazo de las enmiendas presentadas por esta formación, llevó a que la ley no lograra la aprobación necesaria. En la nueva versión, el Gobierno de Anastasiadis incluyó algunas de las demandas de este partido para asegurarse el respaldo de su exsocio.
DIKO abandonó el miércoles el Gobierno en protesta por la reanudación del diálogo para la reunificación de la isla. El pasado viernes, el Consejo de Ministros dimitió al completo para abrir paso a una remodelación de gabinete que se traducirá por lo menos en la sustitución de los cuatro ministerios que hasta ahora estaban en manos de DIKO.