El Gobierno ha indemnizado a las víctimas del 11M con 318,2 millones en diez años

El Ministerio del Interior ha concedido indemnizaciones y otras ayudas de tipo sanitario, psicológico o educativas a los heridos y familiares de los 192 fallecidos en los atentados del 11M por un importe total de 318,2 millones de euros desde que se cometiera la masacre hace diez años.

Según ha informado Interior en un comunicado, de la cifra total, 315 millones de euros, corresponden exclusivamente a indemnizaciones directas abonadas a los 1.758 heridos o familiares de los fallecidos.

Además, se han concedido 113.000 euros para becas a víctimas en edad de estudio y las ayudas sanitarias han ascendido a 311.250 euros como prótesis, tratamientos psicológicos, de rehabilitación y manutención, entre otras.

Atención a personas con discapacidad auditiva

Recientemente, se ha puesto en marcha un programa de atención a personas con discapacidad auditiva sobrevenida, ya que las explosiones y los efectos de la onda expansiva originaron numerosas secuelas auditivas en las víctimas que han derivado en muchos casos en sordera total.

El departamento que dirige Jorge Fernández Díaz recuerda que durante estos diez años la Dirección General de Apoyo a Víctimas del Terrorismo ha mantenido activas todas las áreas que se ocupan de la atención a las víctimas del 11M, entre ellas, un equipo de ocho especialistas dedicado al seguimiento de estas personas y de sus familiares.

Una atención que se ha desarrollado de manera integral porque las personas que sufren la experiencia traumática que supone un atentado no solo presentan daños físicos sino también desequilibrios emocionales.

Los asuntos relativos a vivienda también han sido objeto de ayuda, pues las víctimas que no contaban con recursos para una casa, especialmente inmigrantes, fueron beneficiarios del programa del IVIMA en régimen de alquiler.

Adaptar viviendas a las necesidades de los lesionados

También, las graves lesiones sufridas por varias personas en los atentados han exigido que se tomaran medidas para adaptar viviendas a las necesidades de los lesionados a fin de facilitar su movilidad.

Igualmente, se han financiado las obras de reconstrucción de las viviendas que resultaron dañadas como consecuencia de la explosión terrorista registrada en la localidad madrileña de Leganés, el 3 de abril de 2004, por un importe de casi 1,3 millones de euros, a cuyos vecinos se concedieron ayudas extraordinarias de 3.000 euros.

En el terreno laboral también se han tomado medidas encaminadas a acelerar la reinserción al mundo del trabajo de las víctimas del 11-M.

Al menos 89 personas con graves incapacidades físicas

Asimismo, los atentados dejaron a 89 personas inválidas o con un alto grado de incapacidad física que supuso, en un tercio de los casos, la inhabilitación total para trabajar.

La mayoría de afectados eran de clase media trabajadora que se dirigía a sus lugares de trabajo, aunque también viajaban en los trenes en los que explosionaron las bombas ciudadanos en paro y estudiantes.

Así, el 78% de las víctimas tenían entre 36 y 65 años, el 17 por ciento se situaban entre los 21 y 35 años (en su mayoría estudiantes) y el 5 por ciento eran mayores de 65 años, ya jubilados.