Guardia Civil investiga por qué los padres de la niña secuestrada autorizaron el viaje a Bolivia
- El raptor ofreció a la familia llevarla a su país para unas cortas vacaciones
- El secuestrador obligaba a la menor a trabajar en plantaciones cocaleras
- Mantenía a la niña escondida en una zona de difícil acceso de la selva
La Guardia Civil investiga por qué los padres de la niña de L'Hospitalet (Barcelona) que ha permanecido siete meses secuestrada en la selva boliviana autorizaron que se fuera con su presunto raptor, un vecino al que conocían desde hace pocos meses y que les ofreció llevarse a la menor a pasar una semana de vacaciones en su país.
La Guardia Civil, los Mossos de Esquadra y las autoridades de Bolivia liberaron a la menor de origen marroquí que se encontraba retenida en una zona de difícil acceso de la provincia de Chapare donde los agentes tuvieron que acceder en helicóptero.
El arrestado se llevó a Bolivia a la niña a finales de agosto de 2013, había estado interno en un centro penitenciario de su país por violación y permanecía en España bajo identidad falsa.
La niña sufrió "un infierno" en la selva
En una rueda de prensa este jueves, el jefe del área central de Investigación de Personas de los Mossos d'Esquadra, el inspector Jordi Domènech, y el capitán Álvaro Moreno, jefe del grupo de Secuestros y Extorsiones de la Guardia Civil, han explicado que, tras la liberación de la niña y la detención de su secuestrador, la investigación sigue abierta porque todavía quedan muchos cabos por atar.
Una de las principales incógnitas con que se enfrentan los investigadores es descubrir por qué los padres de la chica, una niña magrebí residente en L'Hospitalet de Llobregat (Barcelona), autorizaron a un vecino, con el que habían entablado amistad pocos meses antes, que se llevara a su hija una semana de vacaciones a Bolivia, ya que quieren aclarar si éste les engañó o lo hizo con su connivencia, prometiéndoles algo a cambio.
Una vez en Bolivia, la niña sufrió un auténtico "infierno", en palabras de Moreno, ya que el secuestrador, que tenía la intención de casarse con ella, la obligó a trabajar en explotaciones cocaleras y a fabricar y vender zumos en mercados locales y, además, al sentir la presión policial, emprendieron caminatas de varios días por la selva para ocultarse en poblados recónditos de muy difícil acceso, según recoge EFE.
Denuncia ante los Mossos de los padres
Las pesquisas se iniciaron cuando los padres de la menor, que residen en L'Hospitalet (Barcelona), tras ganarse la confianza de la familia de la menor, les propuso llevarla a Bolivia para pasar unas cortas vacaciones, sin que ambos volvieran de nuevo a España.
Los padres presentaron la denuncia en la comisaría de los Mossos d'Esquadra de L'Hospitalet de Llobregat y manifestaron que el presunto autor de la detención ilegal, boliviano y vecino de L'Hospitalet, se ofreció para llevar a la niña a su país.
Con esta información y ante el riesgo evidente para la menor, de forma inmediata se hizo cargo de la investigación la Unidad Central de Secuestros y Extorsiones de los Mossos d'Esquadra, al tiempo que se activó el protocolo previsto para estos casos.
Las primeras gestiones de los investigadores evidenciaron que, efectivamente, los padres realizaron la autorización para que la niña pudiera viajar con él a Bolivia, pero enseguida se cortaron las comunicaciones y dejaron de tener noticias de su hija y de su presunto captor.
Rescate en una zona recóndita de la selva boliviana
El Juzgado de Instrucción 1 de L'Hospitalet y la Fiscal de zona, que han impulsado las investigaciones activamente desde el primer momento, iniciaron los contactos internacionales de socorro fiscal y judicial a los efectos de materializar la autorización de efectivos de la Guardia Civil a trasladarse a Bolivia.
A medida que avanzaban las investigaciones entre los dos cuerpos policiales, la Guardia Civil desplazó a Bolivia agentes con gran experiencia en la localización de personas víctimas de secuestros, Estos agentes, en colaboración con la Fiscalía y autoridades policiales de Bolivia, realizaron diversos operativos de rastreos en poblados de la selva boliviana donde existían indicios de que pudiera encontrarse la menor.
En el mes de febrero, los investigadores de la Guardia Civil junto con agentes de policía bolivianos se adentraron en la selva y localizaron una cabaña en la región amazónica de Chapare, una de las zonas más conocidas de Bolivia.
“Los agentes se adentraron en la selva en helicóptero“
En esta zona la menor había sido ocultada por su captor, si bien ambos habían abandonado el lugar días antes de personarse los agentes. Ambos se trasladaron a otro poblado de esta área amazónica, incomunicada en estas fechas debido a las riadas e inundaciones de la zona.
Tras las intensas gestiones en España y Bolivia, en los primeros días del mes actual, a través de diversas técnicas de investigación, se localizó un nuevo poblado selvático de la comarca de Chapare, ubicado en una zona casi sin comunicaciones terrestres, donde podría estar ocultando el secuestrador a la niña.
Nuevamente los agentes de la Guardia Civil, junto con personal especializado de la policía boliviana, se adentraron en la selva en helicóptero y lograron liberar a la niña secuestrada y detener a la persona que la retenía.
La menor, que se encuentra bajo custodia de las autoridades bolivianas, y el detenido fueron llevados a la ciudad boliviana de Cochabamba hasta cumplimentar los trámites oportunos para que los agentes de la Guardia Civil trasladen a la niña a España. Los Mossos y la Guardia Civil mantienen la investigación abierta para esclarecer plenamente los hechos investigados.