El Congreso acoge este lunes la capilla ardiente de Suárez, que será enterrado en la catedral de Ávila
- El velatorio se abrirá al público a las 10.00 horas durante un día
- El funeral de Estado se celebrará en La Almudena el 31 de marzo
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La capilla ardiente con los restos mortales del expresidente Adolfo Suárez se instalará este lunes en el Congreso de los Diputados, donde permanecerá durante 24 horas, desde las 10.00 horas, han confirmado fuentes de la Cámara.
El velatorio íntimo por el expresidente del Gobierno Adolfo Suárez permanecerá abierto para familiares y amigos hasta las 23.00 horas de esta noche en la capilla de la Clínica Cemtro, donde ha fallecido este domingo. A partir de esa hora, se cerrará el velatorio y sólo permanecerán en el centro hospitalario los familiares más cercanos para velar el cuerpo.
El féretro de Adolfo Suárez será trasladado este lunes al Congreso, aunque no se ha precisado la hora en la que saldrá el cortejo fúnebre. Fuentes del Ejecutivo han asegurado a Efe que el funeral de Estado se celebrará en la Catedral de La Almudena el 31 de marzo.
Suárez recibirá los mismos honores que su sucesor en el cargo, Leopoldo Calvo-Sotelo, fallecido en 2008, por lo que la capilla ardiente se instalará en el Salón de Pasos Perdidos de la Cámara Baja.
Preparativos en la Cámara
El presidente de la Cámara, Jesús Posada, y la vicepresidenta primera de la Mesa, Celia Villalobos, se encuentran ya en el Congreso supervisando los preparativos, en los que se afanan numerosos trabajadores de la casa.
Además, una furgoneta de los servicios funerarios ha entrado en el llamado Patio del Congreso, con material para la capilla ardiente.
Posada, quien ha salido a la calle a hablar con los periodistas, ha explicado que la capilla se abrirá a las diez de la mañana y que, al igual que con Calvo-Sotelo, los ciudadanos podrán acceder por la Puerta de los Leones, que sólo se abre para ocasiones especiales, como el Día de la Constitución.
Ha recordado que el Congreso se puso a disposición de la familia desde el primer momento para acoger la capilla ardiente y ha agradecido que finalmente haya aceptado ese ofrecimiento. Fue desde allí desde donde Suárez "encauzó la transición", ha enfatizado Posada, y también desde allí enfocó y aprobó la Constitución.
"Último homenaje, muy merecido"
Así, ha considerado que la Cámara debía rendirle "el último Homenaje, muy merecido", y también acoger el de todo el pueblo español. Ha recordado que Suárez fue quien le nombró gobernador civil de Huelva, cargo que ocupaba cuando la intentona de golpe de Estado de 1981.
La bandera española ondea ya a media asta en la fachada del Congreso y los ujieres están ya vestidos de gala, a la espera de la llegada del cuerpo.
También muchos ciudadanos se están acercando a la Carrera de San Jerónimo interesados por la hora en la que se abrirá la capilla.
Los restos mortales del primer presidente de la democracia española estarán custodiados por soldados de los tres Ejércitos y agentes de la Guardia Civil, en un ceremonial que se estrenó el 4 de mayo de 2008 con Calvo-Sotelo. El féretro se expondrá en el Salón de Pasos Perdidos cubierto por una enseña nacional.
Después, cuando se cierre la capilla, antes de su traslado al lugar de su enterramiento, el féretro será despedido desde el Palacio de las Cortes con honores de Estado, cubierto con la bandera de España y bajo los acordes del himno nacional.
Entierro en la catedral de Ávila
Posteriormente, Adolfo Suárez será enterrado en una tumba que ya ha quedado abierta en el claustro de la catedral de Ávila, a escasos diez metros de donde está sepultado quien fuera presidente del Gobierno en el exilio durante la II República Claudio Sánchez Albornoz.
Según ha informado el Ayuntamiento de Ávila, que ha decretado tres días de luto, Suárez será enterrado tras la celebración de una misa de funeral.
Por su parte, los restos de Amparo Illana, mujer de Adolfo Suárez, enterrada en la capilla de Mosén Rubí, de Ávila, desde su fallecimiento en 2001, serán trasladados con posterioridad al mismo lugar de enterramiento del expresidente en la catedral.
La tumba en la que reposarán los restos de Adolfo Suárez se encuentra a escasos diez metros de la de Claudio Sánchez Albornoz, enterrado ahí el 10 de julio de 1984.
A la misa de funeral por Sánchez Albornoz acudieron el entonces presidente del Gobierno, Felipe González, acompañado por los ministros de Cultura, Javier Solana, y Educación, José María Maragall.
El propio Adolfo Suárez acudió al funeral de quien fue presidente del Gobierno en el exilio durante la II República, entre 1962 y 1971 y cuyo cortejo partió de la sede del Gobierno Civil, hasta la catedral de Ávila, no sin antes realizar una parada en la iglesia de San Pedro, donde las campanas repicaron por expreso deseo de Sánchez Albornoz