La bandera rusa ondea ya sobre todas las unidades militares ucranianas en Crimea
- Los militares dejarán la península en tren sin su armamento
- A Crimea solo le quedan unos cuantos barcos en Crimea
La bandera rusa ya ondea sobre todas las unidades militares ucranianas y casi la totalidad de los navíos de guerra de la Armada de Ucrania emplazados en Crimea.
El jefe del Estado Mayor de Rusia, Valeri Gerásimov, ha anunciado por su parte que los militares ucranianos empezarán a abandonar la península a lo largo del día y lo harán en tren y sin su armamento y equipos.
"En virtud de un acuerdo entre el Ministerio de Defensa de Rusia y la cartera ucraniana, los efectivos de las Fuerzas Armadas de Ucrania y miembros de sus familias saldrán de Crimea en transporte ferroviario", ha informado el general ruso a los periodistas.
Gerásimov ha indicado que "todos los militares que han manifestado su deseo de continuar el servicio en las Fuerzas Armadas ucranianas, están fuera de sus unidades tras haber entregado sus armas y se preparan para abandonar Crimea junto a sus familias y pertenencias personales".
Continurán su servicio en Odessa y fronteras
Mientras, Ucrania ha comenzado este miércoles la retirada de sus tropas emplazadas en Crimea después de que los soldados rusos izaran su bandera en todas las unidades militares ucranianas en la península.
"Nuestra postura de principio es que el repliegue de las tropas debe transcurrir con equipos militares y armamento", ha informado Victoria Siumar, subsecretaria del Consejo de Defensa y Seguridad Nacional de Ucrania, en rueda de prensa. Por el momento, ya han sido evacuados los tripulantes del buque "Kirovograd" y 47 infantes de marina de la base de la Armada ucraniana en el puerto de Feodosia.
La vicesecretaria del Consejo de Seguridad y Defensa de Ucrania, Victoria Siumar, explicó este martes que los efectivos de la Armada serán replegados al puerto de Odessa y a la región de Jersón, mientras que el resto de militares continuarán el servicio en las zonas fronterizas.
El exministro de Defensa ucraniano, Ígor Teniuj, aseguró, antes de presentar su dimisión aceptada luego por el Parlamento, que los 4.000 soldados ucranianos que desean seguir al servicio de Ucrania (de un total de casi 19.000) se retirarían de Crimea con todo su equipo.
El pasado lunes el presidente interino de Ucrania, Aleksándr Turchínov, anunció que retiraría a todas sus tropas de Crimea ante la creciente presión de las milicias prorrusas, ya había perdido prácticamente todas sus unidades y navíos en la península, negoció hasta última hora la posibilidad de replegarse con sus armamento, vehículos y equipos.
Turchínov, informó que la decisión se tomó por las "amenazas a las vidas y la salud de nuestro personal de servicio" y sus familias.
80% de los soldados cambian de bando
Tras un fin de semana dramático para las Fuerzas Armadas ucranianas, que ha perdido todos sus navíos, armamento y equipos en Crimea, las 203 unidades de este país en la península han izado ya la bandera rusa y casi el 80% de los soldados ucranianos han cambiado de bando para ponerse a las órdenes de Rusia o han abandonado el Ejercito.
"A 26 de marzo, las banderas de la Federación de Rusia han sido izadas en los 193 destacamentos militares y sede administrativas de las Fuerzas Armadas de Ucrania en Crimea", ha precisado el general Gerásimov a los periodistas.
La mayoría de las últimos destacamentos, bases y buques de guerra que seguían leales a Kiev fueron asaltados y tomados por las fuerzas rusas desde el pasado sábado, en medio de una absoluta inoperancia de la cúpula militar y política del país, denunciada como negligente por muchos oficiales ucranianos.
Al menos cinco oficiales ucranianos, entre ellos el comandante adjunto de la Armada de Ucrania para la Defensa del litoral, el general Ígor Voronchenk, han sido detenidos por las autoridades crimeas por resistir a los rusos.
Navíos en manos rusas
La Armada de Ucrania conserva tan solo un navío de guerra, una lancha con artillería y ocho barcos de apoyo después de que 51 embarcaciones de este país izaran la bandera rusa, según ha informado el jefe del Instituto de Investigaciones Político-Militares ucraniano, Dmitri Timchuk.
Uno de estos barcos, el dragaminas Cherkassy, atrapado en aguas del lago Dozuzlav después de que los rusos hundieras tres embarcaciones suyas cortarle la salida, protagonizó un intento de resistencia al asalto ruso.
Las tropas rusas iniciaron una operación de más de dos horas con la persecución y el hostigamiento por dos helicópteros y tres lanchas rápidas, desde las que se efectuaron disparos de metralleta al agua para intimidar a la tripulación del navío ucraniano.
El Cherkassy se defendió con bombas de humo para despistar a los asaltantes, paquetes explosivos y mangueras de agua, explicó el marinero mayor del buque, Alexandr Gutnik, que informó vía telefónica en tiempo real de los detalles del asalto al diario digital Ukraínskaya Pravda.
Los rusos obligaron finalmente a la tripulación, formada por 61 personas, a fondear su navío después de explosionar varias granadas contra el casco, tras lo cual los marineros se encerraron en el puesto de mando. La tripulación se rindió poco después, cuando un numeroso grupo de fuerzas especiales de asalto abordó el barco.