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Hollande renueva su Gobierno tras el varapalo electoral y nombra a Valls primer ministro

  • El presidente lo ha anunciado en un corto mensaje por televisión
  • Pide a Valls que lidere "un Gobierno de combate"
  • Dos ministros ecologistas asegurán que no formarán parte del Gobierno

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Hollande renueva el Gobierno y nombra a Valls primer ministro

El presidente de Francia, François Hollande, ha anunciado este lunes una remodelación del Gobierno y ha informado de que el hasta ahora ministro del Interior, Manuel Valls, sustituirá a Jean-Marc Ayrault como primer ministro. Horas antes, Ayrault  comunicaba oficialmente su dimisión del cargo y la de su gabinete. Esta remodelación se produce un día después del revés electoral de la izquierda en las municipales francesas, especialmente, del Partido Socialista.

"Es momento de abrir una nueva etapa. Así que he pedido a Manuel Valls que lidere el Gobierno de Francia", ha dicho el presidente francés, quien ha apuntado a su nuevo primer ministro que quiere "un equipo fuerte, un Gobierno de combate". "Este es un momento importante en la vida nacional. Han expresado su insatisfacción", y yo "he entendio su mensaje", ha dicho Hollande.

Hollande ha anunciado que la "nueva etapa" contará con un equipo más reducido (en el actual hay 38 ministros y ministros delegados) que dirigirá Valls con tres objetivos: devolver a Francia su fuerza económica, concentrarse en la justicia social y aumentar el poder adquisitivo de los franceses.

Para ello, Hollande ha reiterado su objetivo de establecer un "pacto de responsabilidad" entre el Estado y las empresas. "Menos carga para las empresas, sobre todo en los bajos salarios y, a cambio, más contratación y más inversión", ha argumentado el presidente, según AFP. "Son las empresas las que crean empleo. La primera de las injusticias es el desempleo. Es decisivo para el futuro de nuestro país producir más, en Francia, y de forma diferente", ha añadido y también ha prometido una "disminución de impuestos" y de las cotizaciones que pagan los trabajadores "de aquí a 2017".

En un corto discurso, Hollande ha tenido también unas palabras de reconocimiento para el que ha sido hasta ahora su primer ministro,  Jean-Marc Ayrault. "El gobierno de Jean Marc Ayrault se dedicó con valentía y generosidad en esa difícil tarea (enderezar el país) y logró restaurar una situación muy degradada que heredamos. Él inició reformas que honrarán a los que le han propuesto y votado. Quiero expresarle mi gratitud", ha dicho Hollande.

La dimisión de Ayrault

El anuncio de la dimisión de su predecesor, confirmado en un escueto comunicado, se ha conocido a media tarde de este lunes, y ha llegado al día siguiente de una histórica derrota del Partido Socialista (PS) en las elecciones municipales francesas. Desde le primer momento, la prensa francesa ha especulado con que el ministro de Interior, Manuel Valls, sería el nuevo primer ministro.

Un reciente sondeo publicado por el instituto BVA para la revista L'Express muestra que la popularidad del hasta ahora primer ministro se ha desplomado y solo cuenta con una aceptación del 25 % entre los franceses, un punto menos que en febrero. Por su parte Valls, de 51 años, es uno de los políticos más populares de Francia (53 %).

Valls, hasta ahora titular de Interior y situado políticamente en el ala más a la derecha del PS, no agrada a Los Verdes, que participaba en la coalición de Gobierno. Según un comunicado del que se ha hecho eco la agencia AFP, dos ministros ecologistas del anterior gobierno ya han anunciado que no quieren participar en el gabinete del nuevo primer ministro.

Se trata del hasta ahora ministro de Fomento, Pascal Canfin, y la ministra de Vivienda, Cécile Duflot quienes han considerado que "las ideas presentadas por el nuevo primer ministro (...) no son una respuesta adecuada a los problemas de los franceses ", según el comunicado.

Voces críticas en el Partido Socialista

Durante la mañana de este lunes, el jefe del Estado socialista ha  recibido durante más de hora y media a Ayrault, quien este domingo por  la noche admitió que los resultados de las elecciones municipales eran "una derrota para el Gobierno y para la mayoría". Así mismo, aseguró asumiría "toda la parte de (su) responsabilidad", aunque no ha dado pistas sobre si presentará su dimisión.

En paralelo, Ayrault se ha entrevistado con el primer secretario del Partido Socialista (PS), Harlem Désir, para analizar el sentir de una formación que este lunes resultó castigada de la segunda vuelta de las municipales, tras la que va a tener que asumir la pérdida por parte de la izquierda y en favor de la derecha de las alcaldías de más de 150 ciudades de más de 9.000 habitantes.

Desde el PS, algunas de las voces más conocidas del ala izquierda, como la diputada Marie-Noelle Lienneman, han reclamado a Hollande que abandone el llamado "pacto de responsabilidad" para una reducción masiva de las cotizaciones sociales de las empresas, que debe formalizarse en las próximas semanas, y que ese paso vaya acompañado de un plan de disminución del gasto público de 50.000 millones.

Entre esas grandes urbes, la izquierda logró salvar los muebles sobre todo en París, que tendrá como alcaldesa a la socialista franco-española Anne Hidalgo, pero también en Lyon, Estrasburgo y Nantes.

Castigo electoral

Desde la oposición de derechas, la gran ganadora de los comicios municipales, el presidente de la Unión por una Mayoría Popular (UMP), Jean-François Copé, ha instado al jefe del Estado a "hablar rápidamente", porque "los franceses no entenderían que permaneciera silencioso después de una desautorización tan fuerte", según informa Efe.

"Hay que cambiar de política, probablemente también de Gobierno", ha señalado en una entrevista a la cadena "BFM TV". La UMP y sus aliados han conseguido conquistar una decena de las grandes ciudades de más de 100.000 habitantes, en particular Toulouse, Saint-Etienne, Reims, Caen, Tours, Angers, Amiens o Limoges, que había sido gobernada por la izquierda desde 1912.

Otro elemento significativo del panorama municipal que dejan los comicios es cómo emerge el ultraderechista Frente Nacional (FN), que estará al frente de una docena de ayuntamientos en todo el país, el mayor el del distrito siete de Marsella, con una población de unas 150.000 personas.

La presidenta de esa formación, Marine Le Pen,  ha valorado este lunes de "una victoria histórica" y se vio con alas de cara a los comicios europeos de mayo, donde confía que el suyo sea el primer partido de Francia.

Le Pen ha reiterado, en una entrevista radio-televisada a RMC y BFM TV, su objetivo de hacer saltar por los aires la Unión Europea, a la que culpa de "infringir un inmenso sufrimiento" a Francia: "Es la única forma de recuperar nuestra soberanía (...) y por tanto nuestra libertad".