La incidencia del melanoma crece un 10% cada año y preocupa el aumento entre adultos jóvenes
- Los dermatólogos alertan de la exposición al sol y las cabinas de bronceado
- Del 12 al 16 de mayo harán exámenes gratuitos de piel con cita previa
- En www.aedv.es/euromelanoma y 91 543 45 35 | Euromelanoma 2014 (.pdf)
La incidencia del melanoma, el cáncer de piel más agresivo, está aumentando cada año en España un 10%, una cuestión que preocupa a los dermatólogos, que advierten de que cada vez son más frecuentes los casos de tumores en adultos jóvenes debido a una exposición intensa al sol y a las cabinas de bronceado.
Estos son algunos de los datos que han dado a conocer los miembros de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV) en la presentación de la Campaña del Euromelanoma 2014, que comienza este miércoles en España y termina el próximo 7 de junio.
La campaña, que lleva el lema "El cáncer de piel se puede ver", tiene como objetivo informar y concienciar sobre el cáncer de piel, las estrategias que existen para evitar que se desarrolle y la importancia del diagnóstico precoz para frenar la enfermedad porque como han señalado los especialistas "tiene varias caras y múltiples formas de manifestarse".
La campaña se desarrolla en más de 30 países de Europa y, en España, será posible hacerse exámenes gratuitos de piel en busca de lesiones sospechosas del 12 al 16 de mayo previa cita en la web www.aedv.es/euromelanoma y a través del teléfono 91 543 45 35.
Según informa Efe, hay muchos tipos de cáncer de piel, pero más del 90% se agrupan en cáncer cutáneo no melanoma (basocelular y carcinoma epidermoide) y el melanoma, el más agresivo pero menos frecuente comparado con los anteriores, y además si se diagnostica en fases precoces la curación es superior al 95%. No obstante, si el tumor ha crecido de forma significativa existe mayor riesgo de metástasis.
La incidencia en España del cáncer cutáneo no melanoma se estima que es siete veces superior a la del melanoma, que es actualmente de unos diez casos por cada 100.000 habitantes, según ha detallado el vicepresidente de la AEDV, el doctor Pablo Lázaro.
Pero, a pesar de que la incidencia del melanoma es menor es de destacar que en los últimos años ha aumentado un 38%, cerca de un 10% cada año.
El melanoma, cuya mortalidad se estima en torno al 20%, aparece con más frecuencia en el tronco en los hombres (50%) y en las piernas en las mujeres (entre extremidades y tronco, 30%), mientras que el cáncer no melanoma se desarrolla en mayor medida en la zona de la cara y el cuero cabelludo (80% sobre todo en hombres calvos).
Pero el cáncer de piel puede aparecer en zonas que no están expuestas al sol, como detrás de las orejas o en las plantas de los pies, de ahí que el dermatólogo Eduardo Nagore aconseje a las personas con mayor riesgo que se hagan una autoexploración al mes.
Alertan del uso de las cabinas de bronceado
El cáncer de piel puede afectar a cualquier persona, pero hay algunas que tienen mayor riesgo: las que cuentan con un historial familiar de cáncer cutáneo y personas que tienen la piel muy clara, que se queman con facilidad y no tienen la capacidad de broncearse, con pelo rubio o pelirrojo y aquellas que se han expuesto de forma intensa al sol y a la radiación ultravioleta artificial de las cabinas de bronceado.
Los casos de adultos jóvenes están aumentando, porque el cáncer de piel se recibe y se fabrica cuando se tiene menos de 20 años, pero se padece a los 50.
De ahí que la doctora Isabel Longo, coordinadora de la campaña y dermatóloga del Hospital Gómez Ulla, considere que la ley sobre el uso de estas cabinas debería ser más restrictiva porque el nivel de radiación UVA que se puede recibir puede ser hasta diez veces superior al de un día soleado en el Mediterráneo.
Pero de la luz natural también hay que protegerse, porque el sol emite radiación ultravioleta e infrarroja, aunque ésta última puede producir arrugas, pero no está probado que tenga incidencia en el cáncer de piel, según el doctor Lázaro.
Hay que evitar tomarlo entre las 12 y las 16 horas, protegerse la cabeza con un sombrero, llevar gafas adecuadas y aplicar sin escatimar el fotoprotector con la piel seca y en casa, unos 30 minutos antes de tomar el sol.