El Supremo de EE.UU. elimina los límites totales a la financiación electoral de los partidos
- Esto aumentará la influencia de los donantes más ricos en las campañas
- Solo se mantiene el límite de 1.900 euros por candidato y donante
- Pero la cantidad global a la campaña no tiene topes
El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha suprimido este miércoles los límites en la suma de contribuciones que un único donante puede aportar a candidatos, partidos y comités de acción política durante un ciclo electoral de dos años, infligiendo una derrota al presidente Barack Obama quien se oponía a la decisión. Este fallo, emitido a pocos meses de las elecciones legislativas de noviembre, aumentará la influencia de los donantes más ricos en las campañas
El fallo potenciará aún más si cabe el peso de las grandes fortunas en los procesos electorales, cuya influencia se disparó con la sentencia que eliminó hace cuatro años los límites a las contribuciones de sindicatos y empresas en organizaciones independientes de los candidatos y que ayudó a reforzar el auge del Tea Party en los comicios legislativos de 2010.
Por cinco votos a favor y cuatro en contra la mayoría conservadora de la Corte ha rechazado el argumento de la administración de que con la actual normativa se impedía que se burlaran los límites y se aportara a varios candidatos, cumpliendo en consecuencia el objetivo de combatir la corrupción.
"Concluimos que los límites acumulados contribuyen poco, en el mejor de los casos, a enfrentar ese problema, mientras que restringen seriamente la participación en el proceso democrático y se entrometen sin justificación en la capacidad de un ciudadano para ejercer los derechos de la primera enmienda de la Constitución", ha expresado el Tribunal en una resolución leída por su presidente, John Roberts. Estas palabras reflejan la visión de los juristas conservadores, que defienden que las donaciones electorales son una mera manifestación económica de la libertad de expresión.
Hasta el fallo de este miércoles, en cada ciclo electoral, que dura dos años, un solo individuo podía donar un total de 48.600 dólares a candidatos a cargos federales y un máximo de 74.600 a los PAC u otras entidades de un partido. Esto se suprime. No hay límites. La decisión, no obstante, deja intacto el límite de 2.600 dólares (unos 1.900 euros) que puede recibir un solo candidato a un cargo federal por parte de un donante.
Las grandes fortunas tendrán más influencia
El peticionario en este caso era un empresario, Shane McCutcheon, que en las elecciones de 2012 donó alrededor de 33.000 dólares a 16 candidatos republicanos al Congreso y una suma similar a comités de ese partido. McCutcheon quería seguir con sus donaciones, pero no pudo por los límites establecidos en una ley federal y anulados este miércoles.
Quienes quieren hacer donaciones políticas en EE.UU. tienen dos opciones: contribuir directamente a la campaña de un candidato o aportar dinero a una de las comisiones de acción política que no tienen vínculos expresos con el aspirante pero hacen campaña a su favor.
La distinción entre ambas opciones la marcó en 1976 un fallo del Supremo que proclamó que solo las donaciones a comisiones independientes estaban protegidas por la primera enmienda y que el Estado solo podía restringir las contribuciones directas a los candidatos. Un extremo que desvió las donaciones más jugosas a las comisiones independientes, que en EE.UU. se conocen como PACs o superPACs.
La sentencia de este miércoles suprime ese punto de vista y potenciará las contribuciones directas de las grandes fortunas en los comicios legislativos de noviembre, en los que los republicanos aspiran a recuperar el control del Senado y tomar posiciones para la campaña presidencial de 2016.