Artur Mas pide a Rajoy que ponga "fecha y hora" para dialogar y le reta a reformar la Constitución

• Mas insiste en que se ha rechazado solo uno de los "caminos" para la consulta
• Para él, el rechazo del Congreso "no fue un punto final, sino un punto y aparte"

Artur Mas pide a Rajoy que ponga "fecha y hora" para dialogar y le reta a reformar la Constitución

El presidente de Cataluña, Artur Mas, ha pedido este miércoles al del Gobierno, Mariano Rajoy, que ponga "día y hora" para mantener un encuentro, y le ha retado a presentar una propuesta de reforma constitucional, después de que el Congreso rechazara este martes delegar a la Generalitat la competencia para convocar un referédum consultivo.

"Señor Rajoy, ponga día y hora; más fácil es absolutamente  imposible", ha dicho durante la sesión del control al Govern en el  Parlament, en respuesta a la diputada del PP Alicia Sánchez Camacho, que le ha pedido diálogo, y al portavoz del PSC, Pere Navarro.

Mas ha lamentado que el PP accedió a reformar la Constitución porque así lo quería la canciller alemana, Angela Merkel, pero no hace lo mismo cuando lo pide el pueblo de Cataluña, por lo que ha concluido que la Ley Fundamental es "antes alemana que catalana, como tantas otras cosas".

Artur Mas señala que quedan más "caminos" para la consulta

No obstante, pese a esa oferta de diálogo al que, ha asegurado, las instituciones catalanas están dispuestas a diferencia de las españolas, Mas también se ha reafirmado, en respuesta al portavoz de ERC, Oriol Junqueras, en el compromiso con el proceso soberanista y la consulta del 9 de noviembre, porque este martes "se perdió solo uno de los caminos que se habían trazado para hacer la consulta, uno entre bastantes otros".

Según expuso, con la petición al Congreso de los Diputados de la cesión de la competencia para convocar la consulta, se quería "que quede claro" en Madrid, "pero también en Bruselas y en todo el mundo", que la primera intención de los sobranistas era "dialogar, negociar y hablar" con el Estado.

"Se nos ha dado un portazo, legítimo, democrático y mayoritario", reconoció Mas, concluyendo que ésa es ya "una vía cerrada porque ellos no quieren, pero hay otras abiertas". 

En concreto, se refirió a la ley de consultas que prevé aprobar el Parlamento catalán y a los "marcos internacionales, a ver cuáles nos pueden amparar, porque la mayoría de los ciudadanos catalanes siguen queriendo hacer la consulta".

Por tanto, le dijo a Sánchez-Camacho, el rechazo en la votación del Congreso de este miércoles "no fue un punto final, sino un punto y aparte".

"Llamar al diálogo" y "volver a la democracia"

La popular Alicia Sánchez Camacho ha emplazado a Mas aceptar como demócrata el resultado de la votación en el Congreso de los Diputados y a "llamar al presidente del Gobierno para iniciar un diálogo leal, sincero y democrático, en el marco" de la Constitución.

Tras lamentar que Mas no frene el proceso, ha apreciado que ella misma y muchos catalanes están viviendo el debate con mucho dolor, y, sobre los catalanes que también se sienten españoles, ha dicho: "Nos obligan a ser extranjeros en nuestra propia tierra".

En esa línea, el líder de C's, Albert Rivera, ha afirmado: "No podemos seguir en el desgobierno invitando al conflicto. Vuelva a la democracia", y le ha instado a dar un giro de 180 grados en su estrategia, algo que el presidente ha rechazado.

El primer secretario del PSC, Pere Navarro, ha conminado al Gobierno y a la Generalitat, al PP y a CiU, a "abandonar las trincheras" y, "por responsabilidad", encontrar un "punto de encuentro" que permita salir del debate sobre la consulta con una solución "sin vencedores ni vencidos".

Navarro ha puesto de ejemplo el "esfuerzo" de los socialistas para llegar a consensos, y ha deslizado: "Ayer quedó muy claro que lo tendremos que sacar (a Mariano Rajoy) de la Moncloa para llegar a un acuerdo entre Cataluña y el resto de España".

Joan Herrera (ICV-EUiA) ha instado a Mas a valorar el gesto del grupo de Izquierda Plural -donde se integra IU-, que apoyó la consulta en el Congreso: "Vimos autoritarismo, pero también una España diferente", algo que desde Cataluña también se debe tener en cuenta, ha apuntado.