Berlusconi cumplirá su condena de un año por fraude trabajando en un centro de ancianos

• Será "al menos un día a la semana y no menos de cuatro horas"
• Los abogados están "satisfechos" con esta medida "equilibrada"
• Fue condenado a prisión, pero no podía ingresar por su edad

El ex primer ministro italiano no ha entrado en prisión por la ley de indultos y su elevada edad.

El expresidente del Gobierno italiano Silvio Berlusconi cumplirá condena de un año por fraude fiscal de su empresa Mediaset realizando trabajos sociales en un centro para ancianos en la región de Lombardía (norte de Italia), una decisión que ha satisfecho al magnate.

Así se lee en la sentencia del juez del Tribunal de Vigilancia penitenciaria de Milán, Pasquale Nobile de Santis, que ha aceptado la propuesta de la Oficina de Ejecuciones Penales Externas (UEPE) de acudir "al menos un día a la semana y no menos de cuatro horas" a una residencia para ancianos y discapacitados cerca de Arcore.

El veredicto dice además que Berlusconi podrá salir de la región de Lombardia (norte) sólo para acudir a su domicilio de Roma y de martes a jueves, y con la obligación de regresar a su residencia de Arcore a las 23:00 horas del mismo jueves. El beneficio de los trabajos sociales permitirá al exmandatario mayor libertad de movimientos, aunque no podrá salir de casa desde las 23.00 a las 06.00 horas, ni podrá alejarse de la provincia de Milán.

En el veredicto del juez de Santis se darán más detalles sobre el centro al que será destinado Berlusconi para cumplir sus trabajos en beneficio de la comunidad, ya que no estaba prevista la reclusión al ser mayor de 70 años.

El magnate se ha mostrado "satisfecho" de no haber sido condenado a arresto domiciliario, que era la otra opción que barajaba la justicia. "La decisión del tribunal parece equilibrada y satisfactoria con las necesidades de actividad política de Berlusconi", han dicho en un comunicado recogido por Reuters sus abogados Franco Coppi y Niccolo Ghedini.

 

Seis años de inhabilitación

Berlusconi fue condenado en firme a cuatro años por el caso Mediaset, en el que se juzgaba la compraventa de derechos de transmisión de películas estadounidenses por valor de 470 millones de euros por parte del grupo audiovisual entre 1994 y 1999 con un supuesto aumento artificial del precio de los derechos para evadir dinero al fisco y desviarlo a cuentas en el extranjero. Gracias a la ley de indultos la pena fue reducida a un año de prisión, pero no estaba prevista su reclusión al ser mayor de 70 años y, por eso, se ha visto ahora conmutada a servicios sociales.

La justicia también le condenó por el caso Mediaset a dos años de inhabilitación para ejercer cualquier cargo público, un período que se amplía a seis por así efectos derivados de la Ley Severino, que castiga de esta forma a quien acarree condenas en firme superiores a dos años y por lo que fue expulsado del Senado el pasado 27 de noviembre.

La pérdida de condición de parlamentario le deja, además, sin inmunidad judicial para afrontar otras causas que tiene pendientes: el caso Ruby, por prostitución de menores, en el que en primera instancia ya ha sido condenado a siete años, y otro proceso por haber comprado presuntamente a un senador para hacer caer al Ejecutivo de Romano Prodi.