El precio de la gasolina sube un 0,7% durante la Semana Santa y supera el umbral de los 1,4 euros

• Un 3% más barata que durante la Semana Santa de 2013
• El precio del litro de gasóleo se sitúa en 1,32 euros el litro
• Los carburantes cuestan en España menos que la media de la UE

En Semana Santa se esperan 12,5 millones de desplazamientos.

El precio de la gasolina ha registrado una subida media del 0,7% durante la Semana Santa y se sitúa por primera vez en mes y medio por  encima del umbral de los 1,4 euros, según datos del Boletín Petrolero de la Unión Europea (UE).

En concreto, el litro de gasolina marca una media de 1,41 euros, un precio ligeramente superior a los 1,407 euros con los que inició el año y un 1,6% por encima del mínimo de los últimos meses, marcado a finales de enero.

En todo caso, este combustible, utilizado por cerca del 80% del  parque automovilístico nacional, es un 3% más barato que durante la Semana Santa de 2013, que se celebró en marzo.

En cuanto al gasóleo, su precio actual es de 1,32 euros el litro, apenas un 0,07% más elevado que hace una semana cuando marcó 1,319 euros de media. Este combustible cuesta en la actualidad un 2,7% menos que los 1,357 euros de inicio del año.

La DGT espera 12,5 millones de desplazamientos

La Dirección General de Tráfico (DGT) calcula que entre el pasado fin de semana y el correspondiente a las festividades de Semana Santa se producirán 12,5 millones de desplazamientos de vehículos.

En el escenario actual, llenar un vehículo de gasolina con un depósito medio de 55 litros de capacidad cuesta 77,5 euros, 60 céntimos más que hace una semana, frente a los 72,6 euros que requiere el llenado del depósito de un vehículo de gasóleo, 10 céntimos más.

Los carburantes siguen costando en España menos que la media de la UE, donde el litro de gasolina asciende a 1,544 euros y a 1,58 euros en la zona euro. Por su parte, el precio del litro de gasóleo asciende a 1,407 euros de media en la UE de los 28 y a 1,386 euros en la zona euro.

El menor nivel de precios finales con respecto a los países del entorno se debe a que España, pese a las subidas del IVA, a los mayores impuestos autonómicos y a los nuevos gravámenes al biodiésel, sigue contando con una menor presión fiscal.