Sustituido un ordenador estropeado en el exterior de la Estación Espacial Internacional
- Forma parte del sistema de control de esta
- Su fallo estuvo a punto de retrasar el lanzamiento de la cápsula de carga Cygnus
- Fue necesaria menos de hora y media para completar el paseo espacial
Rick Mastracchio y Steve Swanson acaban de sustituir un ordenador estropeado en el exterior de la Estación Espacial Internacional cuya avería el pasado 11 de abril estuvo a punto de provocar el retraso del lanzamiento de la cápsula de carga Dragon del pasado viernes 18 de abril.
El ordenador en cuestión, conocido como External Control Zone-2 Multiplexer-Demultiplexer o EXT-2 MDM, es uno de los que controlan parte del funcionamiento del brazo robot de la Estación, de parte del sistema de generación de electricidad mediante los paneles solares de esta, y de parte del sistema de control térmico.
Su fallo no era especialmente grave pues todos los sistemas de la Estación incorporan varios niveles de redundancia, y además el EXT-2 no estaba siendo usado cuando falló, sino que era el EXT-1 el que estaba activo.
Pero no estaba claro qué impacto podría tener sobre el proceso de captura de la Dragon un posible fallo del EXT-1 mientras el EXT-2 no estuviera reparado, ya que podía impedir la activación del brazo robot, imprescindible para la captura de la cápsula y su amarre a la Estación.
Al final la conclusión que alcanzaron los responsables de la Estación fue la de que con dejar activados algunos sistemas necesarios para la captura de la Dragon y que dependen del EXT-1 esta podía llevarse a cabo aunque fallara el ordenador, y por eso autorizaron igual el lanzamiento de la Dragon, que fue capturada sin problemas el pasado día 20.
Redundancia ante todo
Pero como no les gusta tenerla en funcionamiento sin todas las medidas de seguridad posibles activas en cuanto el EXT-2 falló comenzaron los preparativos para su sustitución, lo que requería un paseo espacial de contingencia.
Estos son los paseos espaciales no programados que hay que hacer de vez en cuando, como por ejemplo los llevados a cabo en diciembre de 2013 para reparar el sistema de refrigeración de la Estación, paseos que aunque no estén programados no quiere decir que los astronautas no se hayan entrenado para ellos.
Aparte de repasar todo el proceso de sustitución con la ayuda del personal de tierra y de preparar las herramientas necesarias para llevarlo a cabo y revisar los trajes los tripulantes de la EEI también tuvieron que configurar uno de los repuestos que había a bordo, pues estos ordenadores –hay en total 45 en la Estación, 24 dentro y 21 fuera– pueden cumplir varias funciones en la Estación, según las tarjetas que tengan instaladas en su interior, y probarlo antes de sacarlo al exterior.
Al final todo fue según lo previsto y en un paseo espacial de una hora y veintisiete minutos Mastracchio y Swanson no solo sustituyeron el ordenador estropeado por uno nuevo sino que además consiguieron desbloquear las puertas de uno de los distribuidores de corriente de la Estación, una tarea de baja prioridad que estaba pendiente desde 2013 y que había sido incluida en el paseo espacial de este miércoles por si por fin daba tiempo.