La NASA vigila un iceberg desprendido en la Antártida de 660 kilómetros cuadrados
- Tiene un grosor de 500 metros y es un 10% más grande que Madrid
- En la zona no hay un alto tráfico marítimo y la alarma es menor
- El iceberg, desprendido de un glaciar antártico, se derrite muy deprisa
La agencia espacial estadounidense, la NASA, vigila el desplazamiento de un enorme iceberg, uno de los más grandes que se conocen, que se desprendió en noviembre de 2013 del glaciar Pine Island en la Antártida y que ahora flota en el océano, ha informado la científica de la NASA, Kelly Brunt.
El iceberg, bautizado como B-31, tiene un grosor de 500 metros y una superficie de 660 kilómetros cuadrados, un tamaño que un 10% mayor que la ciudad de Madrid.
Quien también está pendiente de este enorme bloque de hielo es el Servicio Geológico de Estados Unidos, quien explica que el satélite Landsat ya tomó imágenes en 2011 de las divisiones del hielo en la parte occidental del glaciar.
Esa misma zona, en enero de 2012, sufrió una "ruptura importante" que se ha transformado en el témpano B-31, al desprenderse y alejarse de la costa.
El glaciar se derrite rápidamente
El iceberg es "lo suficientemente grande" como para que deba ser vigilado pero la alarma es menor debido a que la zona en la que flota no hay un alto tráfico marítimo, explicó Brunt.
El interés de los científicos en este iceberg no reside solo en su notable tamaño, sino sobre todo en que se ha originado en una zona donde no son habituales los desprendimientos de masas de hielo.
El glaciar del que se separó en noviembre, el Pine Island, está bajo observación de los científicos porque se derrite rápidamente y si continúa así, podría provocar un aumento considerable del nivel del mar.
Pine Island es uno de los glaciares más grandes y de más rápido movimiento en la Antártida. Las mediciones satelitales muestran que la cuenca del glaciar Pine Island tiene una mayor contribución neta de hielo en el mar que cualquier otra cuenca de drenaje del hielo del mundo.