Inmigración, Ucrania y el empleo centran el primer debate de candidatos a presidir la CE
- Han participado cuatro candidatos y se ha desarrollado en inglés
- Se ha celebrado en la ciudad holandesa de Maastricht
La inmigración, la crisis en Ucrania y el empleo han centrado este lunes el primer debate entre los candidatos a presidir la Comisión Europea (CE) que se constituirá tras las elecciones al Parlamento de la UE del próximo 25 de mayo. En el mismo han participado cuatro de los representantes de las fuerzas que se presentan a las elecciones europeas.
Ante una audiencia de 700 jóvenes, Jean Claude Juncker (Partido Popular Europeo), Martin Schulz (Partido Socialista Europeo), Guy Verhofstadt (Alianza de los Liberales y Demócratas) y Ska Keller (Verdes Europeos) han expuesto sus prioridades en un debate en directo desde la ciudad holandesa de Maastricht, ofrecido por la cadena de televisión Euronews. No ha estado el candidato del Partido de la Izquierda Europea (PIE), Alexis Tsipras.
Sobre la inmigración, caballo de batalla de los partidos euroescépticos, sin representación en el debate, Schulz, Verhofstadt y Keller se mostraron explícitamente a favor de una política de inmigración legal al estilo de la que existe en países como Estados Unidos, Canadá o Australia.
Juncker, por su parte, ha asegurado estar en contra de "que Europa tenga que abrir la puerta a toda la miseria del mundo", si bien ha apuntado que el envejecimiento de la población en la Unión Europea (UE) en las próximas décadas "convertirá en necesaria la inmigración".
La crisis de Ucrania
La política europea en relación a la crisis ucraniana ha evidenciado también diferencias entre los candidatos favorables a aumentar con nuevas sanciones la presión al presidente de Rusia, Vladímir Putin, y los que confían en el diálogo como única herramienta. Keller y Schulz se han posicionado a favor de esa vía diplomática como mejor salida posible, lo que Verhofstad calificó de "ingenuo".
"Putin no parará si ve a una Unión Europea débil. No digo que tengamos que empezar con sanciones económicas pero al menos sí imponer medidas a los oligarcas cercanos a Putin, algo que EEUU si ha tenido el coraje de hacer", ha señalado el liberal belga.
Juncker, por su parte, se ha mostrado a favor de continuar con la doble vía del diálogo y las medidas de presión y se aventuró a apuntar que en la próxima década Ucrania será miembro de la UE.
El empleo, la principal preocupación
Respecto al empleo, la principal preocupación de la población europea, especialmente de los jóvenes, Juncker ha defendido una renta mínima en todos los países. Keller, por su parte, ha llevado el debate a la educación y la brecha entre la oferta formativa y las posibilidades de empleo, "no de cualquier empleo, (sino de) un empleo digno", ha señalado. También Schulz hizo hincapié en la precarización del empleo que sufre "una generación de jóvenes extremadamente formados que son explotados de forma irresponsable".
Para Verhofstad, "para crear empleo hay que crear crecimiento", objetivo para el que propuso poner en marcha iniciativas a nivel europeo "como la unión bancaria". Por otro lado, las ideologías antieuropeas y extremistas fueron también objeto de crítica y advertencia por parte de los candidatos, y contra ellas hicieron frente común en favor de las fuerzas democráticas y europeístas.
En ese punto del debate Verhofstadt y Keller han mencionado los comentarios en contra de Alemania del exprimer ministro italiano Silvio Berlusconi, quien esta semana dijo que para los alemanes los campos de concentración nunca existieron.
Auge de la extrema derecha
El candidato liberal y la ecologista han interrogado a Juncker, de la misma familia política europea que Il Cavaliere (Forza Italia), sobre si piensa permitir que esa formación siga formando parte del Partido Popular Europeo (PPE). El luxemburgués, que no ha contestado a la pregunta concreta, sí ha querido reiterar su condena a las palabras de Berlusconi por las que ha asegurado sentir "asco", y se ha mostrado en contra de que el PPE promueva cualquier coalición con la extrema derecha.
En sus palabras finales han apelado al voto, Juncker ha hecho un llamamiento a una Europa más unida y "a escapar de esa división entre la Europa del norte y el sur", al tiempo que apostó por seguir por la vía de la consolidación fiscal para desarrollar una economía social de mercado.
Schulz, por su parte, ha abogado por "una Europa de los ciudadanos y no de los bancos y los especuladores", y aseguró que si llega a presidente de la CE luchará por "devolver a los europeos la justicia y la equidad". Verhofstad ha invertido su último turno de palabra en prometer una CE con un 50% de mujeres y con un nuevo liderazgo europeo "que actúe con libertad de Berlín y París".
Keller, la única mujer del debate y la más joven (la candidata de origen alemán tiene 32 años) ha abogado por "una Europa en lo que lo más importante sean las personas".
Los europeos están llamados a votar entre el 22 y 25 de mayo próximos para elegir a los 751 diputados que compondrán la Eurocámara durante la próxima legislatura. Los primeros en votar serán Reino Unido y Holanda (22 de mayo), seguidos de Irlanda (día 23), Estonia (día 24), y el resto de países, entre ellos España, lo harán el domingo 25.