La ONU pide ayuda para evitar en Sudán del Sur un genocidio como en Ruanda
- Más de 9.000 niños combaten en los dos bandos enfrentados
- Mujeres y niñas violadas, y matanzas de civiles sin control
La ONU no permitirá que un genocidio como el de Ruanda, ocurrido en 1994, se repita en Sudán del Sur. Los enfrentamientos devastan el país desde diciembre, un conflicto recrudecido además por las masacres étnicas. Así lo ha afirmado este miércoles en Juba el Consejero Especial para la Prevención del Genocidio de Naciones Unidas, Adama Dieng según informa la agencia AFP. La “incitación al odio” y matanzas “por motivos étnicos” en Sudán del Sur, "hacen creer que el conflicto deriva hacia una violencia grave que escapa a todo control”, ha declarado Dieng.
El consejero, antiguo secretario del Tribunal Internacional para Ruanda (TPIR), ha añadido: "Debemos asegurarnos de que los responsables de los crímenes cometidos aquí respondan de sus actos (...). La actual cultura de la impunidad no puede más que minar nuestros esfuerzos. Lo hemos aprendido a costa de lo ocurrido en otros lugares, sobre todo el genocidio perpetrado hace 20 años en Ruanda".
Al borde del desastre
Las últimas masacres perpetradas en Sudán del Sur indican que el país está al borde del desastre. Así lo ha manifestado Navi Pillay, Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.
"El asesinato de cientos de personas, muchos de ellos civiles, en Bentiu, y el asalto al campamento de la ONU que alberga a miles de desplazados internos en Bor, donde murieron más de cincuenta hombres, mujeres y niños, demuestra lo cerca que está Sudán del Sur de una calamidad", ha advertido Pillay en una rueda de prensa en Juba, la capital del país, según un comunicado de Naciones Unidas.
Masacre infantil
En los ejércitos enfrentados combaten más de 9.000 menores, alerta la comisionada Pillay. Treinta y dos colegios cayeron en manos de las tropas de los dos bandos y una veintena de refugios han sido atacados. Numerosas mujeres y niñas han sido violadas o secuestradas, y en las matanzas de civiles a manos de ambas partes han perecido una cantidad indeterminada de niños, manifiesta Pillay en declaraciones a la agencia AFP.
En Sudán del Sur se enfrentan desde diciembre tropas leales al presidente Salva Kiir contra el ejército fiel al antiguo vicepresidente Riek Machar.
Riesgo de hambruna
La inseguridad en la zona y los desplazamientos de población han paralizado la actividad agraria. La ONG Intermón Oxfam ha alertado este miércoles de que la población en riesgo de inseguridad alimentaria en el país podría pasar en los próximos meses de cuatro a siete millones de personas si no se incrementa la ayuda humanitaria en la zona.
"Escapamos de Bor con lo puesto y dejamos atrás todas nuestras pertenencias, incluso el dinero. Estuvimos escondidos durante cinco días y tuvimos que alimentarnos con hojas", relata a la organización Mary Bol, viuda que ahora vive con sus seis hijos en una tienda improvisada con plásticos en el campo de desplazados de Minkaman.
En su nota de prensa, Intermón Oxfam indica que el inicio de las lluvias y la falta de financiación harán que la situación se deteriore más. En todas las zonas en conflicto, los mercados han sido destruidos y las rutas comerciales están rotas.
"Las carencias alimentarias, las condiciones de vida de la población y la llegada de las lluvias podrían ser desencadenantes de epidemias que empeorarán más la situación de la población", advierte la ONG.