La justicia israelí condena a seis años de cárcel al ex primer ministro Ehud Olmert
- Fue declarado culpable por aceptar sobornos en el caso "Holyland"
- Es la primera pena de cárcel para un exmandatario israelí
El ex primer ministro israelí, Ehud Olmert, ha sido condenado a seis años de prisión por corrupción urbanística en el caso conocido como "Holyland". Es la primera ocasión en que un ex primer ministro israelí es condenado a pena de cárcel.
El tribunal de Tel Aviv que le juzgaba le ha condenado también al pago de un millón de shekels (210.000 euros) de multa por haber aceptado sobornos durante el tiempo que ejerció de alcalde de Jerusalén (1993-2003).
Olmert ha anunciado que recurrirá la sentencia ante el Tribunal Supremo, para no tener que en prisión el 1 de septiembre.
Corrupción urbanística en Jerusalén
El tribunal considera probado que el exregidor y exjefe de Gobierno aceptó 500.000 shekels (105.000 euros) de los promotores del proyecto "Holyland", un complejo de miles de viviendas de lujo que se erige en un cerro del sur de Jerusalén. Olmert tuvo que dimitir como primer ministro en 2008 por ese y otros escándalos.
Según la investigación, el dinero fue a parar a manos de uno de sus hermanos fuertemente endeudado, pero la fiscalía y el juez lo entendieron igualmente como un soborno al interpretar que fue hecho por invitación y conocimiento de Olmert, lo que este rechaza.
Los abogados de la defensa argumentan, entre otras alegaciones, que la condena de su cliente es desproporcionada respecto a otros casos de funcionarios israelíes que han sido condenados recientemente por corrupción.
Otros casos de corrupción
El caso "Holyland" estalló después de que Olmert, de 68 años, abandonara formalmente la jefatura del Gobierno israelí a principios de 2009, a la que llegó por primera vez en 2006 por la incapacidad física de su predecesor, Ariel Sharón, víctima de un derrame cerebral.
El político fue entonces llevado a juicio por otros casos: en el primero fue declarado inocente de recibir sobornos por una corte de Jerusalén en 2012; y en el segundo, culpable de abuso de poder por el nombramiento de un allegado a un cargo público que requería un concurso.
La Fiscalía cerró ese año otro caso contra Olmert que se remonta a cuando fue ministro de Industria y viceprimer ministro, cargos desde los que supuestamente aprovechó su estatus para beneficiar a activistas del Likud.
Además, para finales de semana está prevista que concluya la investigación sobre un posible delito de obstrucción a la Justicia y coacción a testigos iniciada contra el ex primer ministro a raíz de la información proporcionada por Shula Zaken, la histórica asistente de Olmert.