Los placeres efímeros del arte japonés

• Un total de 116 estampas de la colección ukiyo-e representan el teatro kabuki
• La exposición 'Fantasía en escena' reúne el "torrente creativo" de Kunisada
• Pueden verse en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando hasta julio

El campesino Jihizö, de Kawarazaki Gonjurö, de la obra teatral 'Veinticuatro ejemplos de piedad filial en Japón' (1861)

Un total de 116 estampas de la colección ukiyo-e que hasta ahora no han sido expuestas y que incluso son desconocidas entre los propios expertos podrán verse hasta el 10 de julio en Madrid en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando en la exposición 'Fantasía en escena. Kunisada y la escuela Utagawa'.

"Lo hemos llamado fantasía en escena porque mostramos muchas de las escenas de kabuki", una forma de teatro japonés tradicional que se caracteriza por su drama estilizado y el uso de maquillajes elaborados en los actores, ha señalado a RTVE.es uno de los comisarios de la muestra, Daniel Sastre de la Vega.

El experto ha explicado que los grabados reproducen imágenes que “muestran los momentos clave,  los climax de muchas de las obras que tenían una gran popularidad entre la población de Edo, nombre que recibía Tokio hasta 1868".

En ese periodo (1615-1868), los artistas proyectaban sus fantasías a través de sus grabados para "lograr evadirse de una sociedad que en algunos momentos podía ser muy restrictiva", ha afirmado Sastre de la Vega, que destaca que lo interesante es ver "cómo cada uno de estos artistas va a dar una interpretación personal a cada uno de estos momentos”.

Ukiyo o los placeres efímeros

Con el comienzo de esta era se produjo un crecimiento de la industria y el comercio que repercutió directamente en un aumento de la población en los núcleos urbanos, especialmente en la capital.

En las ciudades, la presencia de barrios de placer, casas de té y teatros de kabuki denotaba una mentalidad que valoraba ante todo el mundo de los placeres fugitivos o temporales, denominado ukiyo.

Este mundo fue excepcionalmente captado por los ukiyo-e, cuya temática abarca los asuntos de la vida cotidiana, vistas de lugares famosos o actores de kabuki.

Fundada en el siglo XVIII por el famoso grabador Utagawa Toyoharu, fue con su discípulo Utagawa Toyokuni I (1769-1825) con el que la escuela Utagawa consiguió una popularidad, pujanza y permanencia superiores al resto de escuelas de ukiyo-e.

Tres artistas simultáneos

El ascenso al reconocimiento público de los Utagawa se manifestó con la segunda generación de discípulos, que iniciaron su carrera ascendente en los últimos cinco años del siglo XVIII y disfrutaron del favor del público hasta el declive en popularidad de la manifestación artística del ukiyo-e.

Excepto los Utagawa, ninguna escuela contó entre sus filas, al mismo tiempo, con tres artistas en plenas facultades creativas, cada uno líder de su propia especialidad.

En ella coincidieron, simultáneamente Kunisada (1786-1865), maestro de retratos de bellezas femeninas y actores de kabuki, Kuniyoshi (1797-1861), especialista en estampas de guerreros, y Hiroshige (1797-1858), el gran creador de paisajes.

El grabador mejor representado en la exposición es Utagawa Kunisada, quien disfrutaría en vida de una reputación que supo mantener mediante imágenes constantemente actualizadas a los gustos del momento. "Cualquier persona que vaya a la exposición se dará cuenta del torrente creativo de Kunisada", ha asegurado Sastre de la Vega.

Año Dual España-Japón

Esta exposición enfatiza el reconocimiento de la alta calidad alcanzada por los maestros de la escuela Utagawa y el renovado interés suscitado por las representaciones gráficas de actores de kabuki, del que dan testimonio las diferentes muestras de yakusha-e celebradas en 2013 y 2014 en varios museos de Europa.

Los ejemplares seleccionados para la muestra, que conserva la Academia de Farmacia, son los que mantienen la coloración original y son un ejemplo de primeras impresiones.

La exposición está coorganizada por la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, la Real Academia Nacional de Farmacia, FUJITSU y la Fundación Cajamurcia, en colaboración con la Embajada del Japón en España y forma parte de los actos programados para conmemorar el Año Dual España-Japón.