Ramón K. Pérez: "Tras el éxito del cómic, 'Cuento de arena' podría convertirse en película

• El canadiense adaptó un guión de Jim Henson perdido durante 40 años
• En 2012 arrasó en todos los premios de la industria del cómic americano

Ramón K. Pérez y fragmento de una viñeta de 'Cuento de arena'

Aunque adaptar un guion ajeno, "perdido" durante 40 años, puede ser un riesgo, especialmente si el autor es el fallecido Jim Henson, padre de Barrio Sésamo, Ramón K. Pérez no pudo rechazar la oferta y convirtió Cuento de arena (Norma editorial) en un viaje psicotrópico,  premiado con varios Eisner, los Óscar del cómic.

Con esta atípica novela gráfica -candidata a la mejor obra extranjera editada en España en los premios que hoy concede el Salón del Cómic de Barcelona- el lector creerá estar ante a las aventuras de una especie de héroe obligado a recorrer, sin saber por qué,  unos grandes estudios como sería la Paramount a mediados de los años 50.

"El libro es como una de esas pruebas de manchas de tinta a las que someten a los pacientes psiquiátricos, cada persona que lo lea tendrá una interpretación diferente", asegura el dibujante canadiense Ramón K. Pérez, quien a pesar de su nombre y de que su padre es nacido en Zamora, no tiene un castellano muy fluido y prefiere hablar en inglés.

"Atrapado en un bucle"

Para Pérez, ilustrador polifacético capaz de compaginar obras tan complejas como esta -donde predomina la imagen sobre el texto- con los dibujos de Lobezno para la serie de The X Men o el Capitán América, Cuento de arena (Norma) es "el viaje de la vida, la sensación de cómo a veces te puedes sentir atrapado en un bucle, en medio del desierto".

El guion para lo que debía haber sido un largometraje de carácter experimental fue elaborado por Henson y Jerry Hull a principios de los setenta -poco antes de que el primero se volcara en su carrera televisiva con los Muppets y Barrio Sesamo- y no se llegó a rodar porque era demasiado "original" para los productores, eufemismo que realmente quería decir: "no entendemos nada".

El éxito de los teleñecos que le hicieron famoso y rico "obligó" a Henson a aparcar el proyecto del largometraje a pesar de varias intentonas.

El artista murió en 1990 -este viernes se cumplen 14 años- y fue después de la muerte de su padre cuando Lisa Henson halló el original en los archivos de la compañía familiar y se puso manos a la obra para darle una segunda oportunidad, al menos, como novela gráfica.

El mejor cómic de 2012

La hija del creador de Cristal oscuro contactó con varios autores y se decantó por la propuesta secuencial de Ramón K. Pérez (Ontario, 1973) al comprobar que sus dibujos estaban a la altura de la imaginería de Henson.

"Fue emocionante, porque Jim había sido una gran fuente de inspiración cuando yo era niño", asegura Pérez, que recibió total libertad de la "heredera" y sólo tuvo que oponerse a la pretensión de Lisa Henson de que Mac, el protagonista,  tuviera los rasgos de su padre.

"El guión describía al personaje de una manera y no tenía sentido cambiarlo", defiende el dibujante, que antes de ponerse sobre el papel repasó la filmografía de Henson previa a los Muppets, una producción que no tenía nada que ver con los trabajos dirigidos a audiencias populares.

"Ver aquellos filmes universitarios experimentales me abrió los ojos acerca del mundo de Henson, fue una fuente de inspiración para enfrentarme al guion", señala el dibujante de Cuento de arena -editada por Norma en España hace unos meses con el guión completo- que en 2012 logró los premios Eisner a la mejor obra, mejor artista y mejor diseño.

Ramón K. Pérez señala que el éxito que ha tenido el libro está provocando que algunos productores se planteen de nuevo hacer una película, y se baraja tanto la posibilidad de un filme de animación como rodarla con actores de carne y hueso.