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Una zona tropical de los Andes, permanentemente nevada

  • Es la cordillerra Blanca, con una cumbre de 6.768 metros
  • Es una zona con cientos de glaciares que recogen agua de lluvia
  • Están sufriendo consecuencias del cambio climático

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Monte Huascarán, en los Andes de Perú.
Monte Huascarán, en los Andes de Perú.

Unas cumbres de la cordillera de los Andes ubicadas en una zona tropical, la cordillera Blanca, están permanentemente cubiertas de hielo y nieve. Así se ha podido comprobar en una imagen tomada por el satélite japonés ALOS el 24 de agosto de 2010.

A pesar de estar en una región de la Tierra que rodea al ecuador, estas cumbres son los suficientemente altas para mantenerse nevadas.

Glaciares como fuente de energía y de agua

Esta cordillera cuenta con cientos de glaciares, que constituyen una importante fuente de agua para los regadíos y para la producción de energía hidroeléctrica, según ha informado la ESA.

Los glaciares y las zonas cubiertas de nieve ‘recogen’ el agua de las precipitaciones durante la temporada húmeda y luego la liberan lentamente durante las épocas más secas del año.

En las últimas décadas estos glaciares han sufrido las consecuencias del cambio climático, amenazando el futuro del suministro de agua durante la estación seca. 

Huascarán, confluencia de glaciares

Cerca del centro de esta imagen se puede distinguir el macizo nevado Huascarán, donde se encuentra la cumbre más elevada de Perú, con una altitud de 6.768 metros. Este pico es uno de los puntos más alejados del centro de nuestro planeta y, consecuentemente, el lugar donde la aceleración de la gravedad es menor. 

Al norte de Huascarán podemos ver la confluencia de dos glaciares, el segundo procedente del pico Chopialqui, más al este. En los valles de la zona se pueden distinguir un gran número de lagos de color azul glacial

Esta región forma parte del Parque Nacional Huascarán, declarado como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1985. El oso de anteojos, el puma, el gato andino, el venado de cola blanca o la vicuña son algunas de las especies locales más representativas, pero todas ellas han sufrido una caza excesiva.