Grecia da un toque de atención al Gobierno en la primera vuelta de las municipales
- Syriza gana en Ática, la región más poblada, pero pierde en Salónica
- No hay un claro ganador y todo depende de la segunda vuelta
- La nueva ronda coincide con las europeas en las que el gobierno de coalición entre conservadores y socialdemócratas se juega su legitimidad
Los griegos han dado este domingo un toque de atención al Gobierno de coalición entre conservadores y socialdemócratas en las elecciones regionales y municipales, si bien la coalición de la izquierda radical de Syriza no ha logrado dar el golpe de timón que esperaba.
En la capital, Atenas, el alcalde independiente Yorgos Kaminis ha logrado finalmente colocarse en primer lugar con algo más del 21%, en contra de lo que apuntaban las encuestas a pie de urna, dejando al candidato de Syriza, Gavriil Sakellaridis, en el segundo lugar con un 20%.
Ambos deberán medirse el próximo domingo en la segunda vuelta, que coincidirá con las elecciones europeas, calificadas como la verdadera prueba de fuego para el gobierno del conservador Andonis Samarás.
No en vano, el primer ministro ha reconocido que "la verdadera batalla serán las elecciones europeas", en las que los ciudadanos deben decidir si quieren seguir teniendo estabilidad o volver hacia atrás", en clara alusión a Syriza, al que el Gobierno ha acusado de querer poner en peligro los esfuerzos del Ejecutivo por salir de la crisis.
Por su parte, Kaminis ha declarado sentirse seguro de que podrá lograr "una gran victoria" en la segunda ronda.
Syriza golpea pero no hace virar a Grecia
Pese a lo pronosticado por el partido, Syriza sí ha podido dar el golpe de sorpresa en la región capitalina de Ática, donde vive en torno al 40% de la población del país, cuya candidata Rena Duru, se ha colocado en el primer puesto, con en torno al 23,5%, por delante del favorito, el presidente regional, Yannis Sgurós, que se ha quedado en segundo lugar, con algo más del 22%.
Sgurós se ha presentado como independiente, pero iba respaldado por los socialdemócratas de Pasok, el socio menor de la coalición de Gobierno dirigida por el conservador Andonis Samarás.
En su primera comparecencia ante los medios, Duru ha agradecido a los ciudadanos una victoria inesperada y les ha pedido que acudan a votar en la segunda ronda: "Si conseguimos gobernar en Ática, lo conseguiremos en toda Grecia".
Por otra parte, en Salónica se han cumplido las expectativas y el popular alcalde independiente Yannis Butaris, apoyado por el centroizquierda, ha logrado colocarse en el primer lugar con el 36%, con clara ventaja frente al candidato de la conservadora Nueva Democracia, Stavros Kalafatis, con cerca del 27%.
Por ahora los analistas y políticos son cautelosos a la hora de interpretar los resultados, habida cuenta de que en todas las regiones habrá una segunda vuelta, al igual que en la gran mayoría de los municipios.
No hay nada decidido
Lo único que parece estar claro es que no hay un ganador destacado, pues Nueva Democracia, por ejemplo, ha mejorado su presencia en las regiones y en 12 de las 13 pasará a la segunda vuelta -en ocho incluso con su candidato a la cabeza- pero no tiene posibilidad alguna en regiones de gran peso como Ática, Macedonia Central, e importantes ciudades como Atenas, Salónica, Pireo o Patras.
Syriza, por su parte, acude en cinco regiones a la segunda vuelta, en dos de ellas con su candidato a la cabeza.
En 2010, el partido izquierdista apenas tenía relevancia en el panorama político griego, situación que cambió radicalmente en las elecciones generales de junio 2012, cuando obtuvo cerca del 27%, tan solo tres puntos por detrás de Nueva Democracia.
"Los mejores goles se consiguen en la segunda vuelta", ha afirmado en un escueto comentario su líder, Alexis Tsipras, al entrar en la sede de su partido en Atenas.
El Gobierno se juega su legitimidad
Candidatos independientes apoyados por Pasok, estarán presentes en la decisiva segunda vuelta en siete regiones, todos ellos actualmente en el cargo. En las elecciones de 2010, Pasok ganó ocho regiones.
Los resultados de Pasok en la segunda vuelta y especialmente en las europeas puede ser decisivos de cara a la supervivencia de la coalición de Gobierno, que tan solo cuenta con dos escaños de mayoría en el Parlamento.
El líder de los socialdemócratas y viceprimer ministro, Evángelos Venizelos, advirtió en las pasadas semanas que un mal resultado de su partido podría conducir a un problema de legitimidad y a su salida del Ejecutivo.
A la vista del nerviosismo que estas declaraciones generaron en el seno del Gobierno, Venizelos intentó recular algo en los últimos días al asegurar que su intención no era cuestionar la supervivencia de la coalición.
Pasok ha sido el partido más castigado por el elector en la Grecia de la crisis y el rescate financiero, del 43,9% alcanzado en las elecciones generales de 2009, el año previo al primer rescate financiero, ha pasado a rondar el 6% en las encuestas.