Marine Le Pen, la cara 'amable' de la ultraderecha que cautiva a obreros y jóvenes
- En 2011 consiguió reemplazar a su padre al frente del Frente Nacional
- Es partidaria de la salida de Francia del euro y de políticas antiinmigración
Con un programa y una retórica xenofoba, nacionalista y antieuropea y una imagen joven y atractiva, Marine Le Pen cautivó a parte del electorado más joven -el más afectado por el paro y la crisis- en las elecciones presidenciales de 2012.
“Soy la candidata de los jóvenes porque soy la candidata antisistema”, ha manifestado a presidenta del Frente Nacional (FN). Y algunas de sus medidas parece demostrar esta afirmación, polémicas propuestas como “renegociar todos los tratados europeos para recuperar la soberanía nacional”, prohibir la discriminación positiva o reestablecer la pena de muerte.
Salida del euro
Aboga por el "patriotismo económico" contra los "dictados" de Europa, la "prioridad nacional", el nuevo nombre de "preferencia nacional" contra los inmigrantes, y quiere que Francia vuelva a la “libertad económica” abandonando el euro.
Nacida en 1968 en la exclusiva localidad de Neuilly-sur-Seine, a las afueras de París, la tercera hija del líder ultraderechista Jean Marie Le Pen, se formó como abogada en uno de los mejores colegios de Francia, se unió a la lista de defensores públicos dispuestos a defender cualquier caso en que el acusado no pudiera pagarse un abogado.
En 1998 dejó de ejercer la profesión de abogado para asumir la jefatura del Departamento Jurídico del Frente Nacional. Sus primeros pasos en política los dio en 2002, en una campaña electoral en la que su padre logró clasificarse para la segunda vuelta de las Presidenciales desbancando al candidato socialista Lionel Jospin.
Nueva imagen de la ultraderecha
Su imagen joven y su facilidad para desenvolverse en los medios la aseguró frecuentes apariciones en los debates de televisión. "Algunos dijeron: Aquí hay una mujer que es joven, que contrasta con la imagen caricaturesca que algunas personas pueden tener del Frente Nacional - un partido machista, un partido bastante difícil ", comentó a Afp en aquel momento".
Marien Le Pen se ha enfrentado a numerosos críticos, algunos incluso dentro de su propio partido, que la describían como poco más que una cara bonita. Sin embargo, ella pasó a construir una fuerte base política como consejero regional de Nord-Pas-de-Calais uno de los bastiones del Frente Nacional, que se vio duramente golpeado por el declive industrial.
Liderazgo del partido
En 2003, se convirtió en vicepresidente del partido, y en 2009 ya se había convertido en una figura nacional por propio derecho. Pocos se sorprendieron cuando esta madre de tres hijos y dos veces divorciada derrotó con facilidad a su rival Bruno Gollnisch en la contienda por el liderazgo del partido en enero de 2011.
Si su padre, Jean-Marie Le Pen, consiguió que el 30 % de los obreros franceses votasen a la extrema derecha a finales del siglo XX y principios del siglo XXI, su hija Marine está se ha propuesto convertir el FN en un partido atractivo para una parte de la juventud francesa.
En las elecciones presidenciales del 2012, más de un 30 % de los obreros votaron por ella. Y hoy, dos años después y agitando el fantasma de Bruselas, parece que va a conseguir que la ultraderecha se convierta, por primera vez en unos comicios nacionales, en la fuerza más votada en Francia.