Renzi se reivindica en Italia y se convierte en el referente del centroizquierda en Europa
- El primer ministro italiano recibe un apoyo histórico del 40%
- Los resultados le legitiman en Italia y también en la Unión Europea
- Será presidente rotatorio de la UE el próximo semestre, su mejor plataforma
Si hay un ganador indiscutible de las elecciones europeas, ese hombre es Matteo Renzi. El primer ministro italiano es el único líder que ha recibido un espaldarazo contundente, un apoyo de más del 40 % de los votos que le sitúa como referencia del centroizquierda europeo.
El florentino ha teñido de rojo el mapa azul italiano de hace cinco años y ha encontrado en las urnas europeas la legitimidad que usurpó con un golpe interno hace el pasado febrero al entonces pimer ministro y compañero de partido Enrico Letta. Los resultados además de legitimarle para gobernar e implementar las reformas en Italia, le conceden un papel importante en Europa.
Desde los tiempos del partido de masas de la Democracia Cristiana (DC), ningún otro partido había superado el 40 % de los votos, como lo hizo el domingo la formación del actual presidente del Gobierno que ha conseguido, además, ser la fuerza más votada en todas las regiones.
Con un discurso optimista y enérgico, la campaña de Renzi ha frenado la "antipolítica" del Movimiento 5 Estrellas (M5S) de Beppe Grillo, que se ha desfondado en la recta final y se ha quedado 20 puntos por debajo del centroizquierda y dos millones de votos menos que en las generales de 2013. Ha mantenido a raya a Silvio Berlusconi y su Forza Italia en un raquítico 16%. Y ha dejado a la xenófoba Liga Norte con un resultado descolgado de sus colegas ultraderechistas europeos: baja del 10 % al 6,16 % respecto a los comicios europeos de 2009.
Presidente de turno de la UE
"Ha ganado la esperanza contra la rabia", ha dicho Renzi en una estocada a Beppe Grillo y su movimiento. Y ha añadido que no hay excusas para posponer las reformas que ha prometido en su país, ni en Europa, donde su formación se convertirá en la más votada del Partido Socialista Europeo (PSE) y en la segunda por detrás del bloque de centroderecha alemán, lo que no dejará de recordar en las cumbres y, sobre todo, desde el próximo julio cuando Italia asuma la presidencia de turno de la UE.
En sus primeras declaraciones, el primer ministro italiano ha asegurado que este resultado daba a Italia la capacidad de "influir" en Europa.
"Italia existe. Italia es más fuerte que todos los miedos que la atenazan y será capaz ahora de influir en Europa", ha dicho Renzi en una rueda de prensa en la sede de Gobierno para comentar los comicios europeos.
"Ha llegado la hora de cambiar la UE. Por una parte están las fuerzas populistas y por otra la idea de Europa que ha fracasado, y en medio existe la posibilidad de realizar un gran cambio”, ha agregado.
Contrapeso a Angela Merkel
Ese espaldarazo histórico es también un desafío. Renzi no tiene excusas para no pisar fuerte en Bruselas con su agenda procrecimiento. El líder italiano ha criticado las políticas de austeridad que han asfixiado a las economías del sur de Europa los últimos tres años. Y los resultados de las elecciones le avalan: el Partido Popular Europeo y los Liberales -las dos formaciones que han promovido la ortodoxia presupuestaria- han sido los partidos más castigados. Los primeros han perdido 62 escaños y la alianza de Guy Verhofstadt 13.
La presidencia rotaroria de la UE será la mejor plataforma para un líder carismático y telegénico al que algunos ven como el contrapunto a la canciller alemana Angela Merkel, la otra líder que ha salido reforzada, aunque por la mínima, de estas elecciones europeas.