El Ayuntamiento de Barcelona paraliza el derribo del edificio 'okupado' de Can Vies y ofrece diálogo
- Anuncia que protegerá el perímetro "para evitar riesgos a las personas"
- Los representantes de Can Vies piden que les dejen reconstruir el edificio
- El Gobierno condena la violencia y ofrece su ayuda ante el conflicto
El Ayuntamiento de Barcelona ha confirmado este viernes que, pese a que el colectivo de Can Vies ha rechazado sus propuestas para acercar posiciones, ha detenido el derribo del centro desalojado para mostrar su "voluntad de diálogo", mientras ha anunciado que protegerá el perímetro de la casa "para evitar riesgos a las personas".
El anuncio de poner este perímetro de seguridad en el inmueble, situado en la calle Jocs Florals del barrio de Sants de Barcelona, se produce después de que el colectivo de Can Vies haya hecho un llamamiento público a participar este sábado en la reconstrucción del inmueble, que se encuentra parcialmente derruido.
El colectivo de Can Vies ha anunciado que dependerá de la actitud que adopte el Ayuntamiento y la policía para dejarles reconstruir el centro que el conflicto se acabe o se acentúe, aunque han enmarcado el problema "más allá del tema de Can Vies".
En un comunicado, el Ayuntamiento de Barcelona ha reiterado su "voluntad de negociar con los colectivos de Can Vies para encontrar una solución a la situación que vive el barrio de Sants en los últimos días".
A pesar de la posición anunciada esta mañana por Can Vies, el Ayuntamiento ha asegurado que "mantiene la apuesta por encontrar una solución acordada y satisfactoria para todas las partes", y ha agradecido la mediación realizada ayer por el Centro Social de Sants y la Federación de Asociaciones de Vecinos de Barcelona (FAVB).
Negociaciones rotas
Representates de Can Vies han pedido este viernes al Ayuntamiento de Barcelona que si quieren negociar, les dejen reconstruir el edificio demolido tras el desalojo del pasado lunes.
En una rueda de prensa, han solicitado hacerlo ellos mismos, ayudados por arquitectos y vecinos del barrio de Sants, este sábado desde las 10.00 horas, día en el que han convocado una nueva protesta manifestación.
Tras cuatro noches de altercados, han pedido la dimisión del alcalde, Xavier Trias, y del concejal del distrito, Jordi Martí, detener el derribo del edificio (algo a lo que Trias se mostró dispuesto el jueves si se negocia, sólo tras ceder la violencia) y que se retire la presencia policial en la zona.
Asimismo, los afectados dan por rotas las negociaciones pese a las cuatro propuestas presentadas el jueves por el Centre Social de Sants tras reunirse con Martí, y han confirmado que continuarán con las protestas, pues, en su opinión, van más allá del conflicto de Can Vies.
El Gobierno rechaza la violencia
La vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, ha expresado este viernes la condena "más absoluta" del Ejecutivo a la violencia desatada en Barcelona y ha ofrecido a las autoridades de la Generalitat la "experiencia" de las Fuerzas de Seguridad del Estado.
Un ofrecimiento sincero, tal y como ha dicho Saénz de Santamaría en rueda de prensa tras la reunión del Consejo de Ministros, en la que ha reiterado la condena del Gobierno a la violencia y a cualquier forma de expresión de ésta.
Y ha recordado que los derechos de los ciudadanos deben ejercerse pacíficamente y de acuerdo con los límites que imponen las leyes y la Constitución Española.
Saénz de Santamaría ha explicado que el Ministerio del Interior ha ofrecido ya a las autoridades de Cataluña y de Barcelona su colaboración para el mantenimiento de la seguridad ciudadana y el orden público tras los disturbios que se han originado en protesta por el desalojo y el comienzo del derribo del centro ocupado de Can Vies.
"Saben que estamos a su entera disposición para que en caso de que así lo estimaran, podamos servir de ayuda", ha enfatizado la vicepresidenta, quien ha insistido en el ofrecimiento sincero a la Generalitat y al Ayuntamiento, y a cualquier otra instancia que necesitara la experiencia y el trabajo de las Fuerzas de Seguridad del Estado.
Cuatro días de incidentes violentos
Los Mossos d'Esquadra detuvieron anoche a un total de 23 personas tras los nuevos incidentes registrados en el barrio barcelonés de Sants por esa protesta.
Durante los incidentes, grupos de jóvenes encapuchados se enfrentaron a los agentes antidisturbios desplegados en el barrio, quemaron contenedores y causaron destrozos en el mobiliario urbano y en sucursales bancarias, en una de las cuales provocaron un incendio.
Según indicaron fuentes policiales, Interior ha enviado varias unidades de antidisturbios, con un total de casi 300 agentes, destinados a proteger las instituciones del Estado en Barcelona.