Detenidas 23 personas en la cuarta jornada de disturbios por el desalojo de Can Vies
- El alcalde de Barcelona ha ofrecido detener el derribo como vía para un acuerdo
- Los disturbios han llegado tras una protesta pacífica
Los Mossos d'Esquadra han detenido en la madrugada de este viernes a un total de 23 personas tras los nuevos incidentes registrados en el barrio barcelonés de Sants en protesta por el desalojo y el comienzo del derribo del centro ocupado de Can Vies, ha informado un portavoz de la Policía de la Generalitat.
Durante los incidentes, grupos de jóvenes encapuchados se enfrentaron a los agentes antidisturbios desplegados en el barrio, quemaron contenedores y causaron destrozos en el mobiliario urbano y en sucursales bancarias, en una de las cuales provocaron un incendio.
La noche comenzó con una cacerolada de protesta en la que participaron varios centenares de personas y a continuación muchos de los participantes se dirigieron hacia la comisaría de los Mossos d'Esquadra de Les Corts, donde permanecen algunos de los detenidos en los altercados de los tres últimos días.
La manifestación se disolvió poco antes de llegar a la comisaría debido al importante despliegue policial en las inmediaciones de la misma. Algunos grupos se dirigieron entonces a la sede del distrito de Sants-Montjuïc, situada en la confluencia de la calle de Sants con la de 22 de enero, donde los Mossos montaron una barrera y avisaron a los manifestantes de que cargarían si se acercaban.
Fue entonces cuando aparecieron grupos de encapuchados que empezaron a quemar contenedores y a destrozar los cristales de sucursales bancarias, incendiando incluso una de ellas, así como mobiliario urbano, señales de tráfico, marquesinas y paneles publicitarios.
Los encapuchados lanzaron también piedras y otros objetos a los agentes policiales, que realizaron entonces varias cargas para disolver a los alborotadores.
Las últimas 23 detenciones se suman a las 38 practicadas desde el comienzo de los disturbios el pasado lunes por la noche. De los 27 detenidos por los Mossos en la noche del miércoles al jueves, está previsto que 18 pasen hoy a disposición judicial, mientras el resto quedaron en libertad con cargos.
Destrozos tras la cacerolada
La protesta pacífica en forma de cacerolada, en la que han participado varios centenares de personas, en su mayoría jóvenes, ha comenzado hacia las nueve de la noche. La presencia policial se ha limitado a algunos agentes de la Guardia Urbana que han desviado el tráfico en la carretera de Sants para evitar atascos.
En la concentración se ha exhibido una pancarta en la que se leía: "Libertad detenidos. Policía fuera del barrio".
A diferencia de lo ocurrido en los últimos tres días, a primera hora de la noche las estaciones de metro del barrio de Sants estaban abiertas, aunque han sido cerradas cuando han comenzado los disturbios.
Tras disolverse la manifestación cerca de la comisaria de los Mossos, grupos de manifestantes se han dirigido de nuevo a la carretera de Sants, que estaba cortada al tráfico, donde han realizado una breve sentada antes de emprender de nuevo la marcha, esta vez en dirección a la sede del distrito de Sants-Montjuïc.
Ha sido entonces cuando han aparecido grupos de encapuchados que han empezado a quemar contenedores y a destrozar los cristales de entidades bancarias, marquesinas y paneles del Metro de Barcelona.
Al igual que ha ocurrido en las últimas noches, un helicóptero de la policía catalana dotado de un potente foco para localizar a los alborotadores sobrevuela la zona.
Algunos de los asistentes a la concentración han realizado diferentes pintadas en paredes y cristaleras de entidades bancarias en las que puede leerse: "No negociamos. Luchamos", o "Sants, Gamonal, Atenas, Río".
Cargas y detenciones
El balance de los tres días anteriores ha sido de 38 detenidos, que han comenzado a declarar ante el juez y, paulatinamente, quedan en libertad con cargos tras prestar declaración. A ellos habría que sumar los, al menos, 21 detenidos de esta madrugada, aunque fuentes policiales informan de que se trata de una cifra provisional que podría aumentar.
Desde entidades cívicas, partidos de la oposición y sindicatos se han alzado voces para reclamar diálogo entre el Ayuntamiento de Barcelona y los jóvenes okupas que ha intentado propiciar este jueves el Centro Social de Sants-Asociación de Vecinos.
La manifestación de este jueves se había convocado contra el desalojo y derribo de Can Vies -un centro okupado desde hacía 17 años- el pasado día 26 y contra la actuación policial de los últimos días.
Barcelona, y en concreto el barrio de Sants, ha sido escenario en las últimas tres noches de violentos enfrentamientos entre la policía autonómica y grupos de jóvenes encapuchados que han quemado contenedores, lanzado piedras y botellas y causado numerosos daños en el mobiliario urbano, entidades bancarias y sedes de partidos políticos.