El 3,5% de los trabajadores sufrió un accidente laboral en 2013, según el INE

• Los hombres sufren más accidentes y se lesionan más que las mujeres
• Los accidentes de tráfico son el 6,5% de los que provocan lesiones

Obras del AVE en A Gudiña donde ha fallecido un trabajador de cuarenta años.

El 3,5% de los trabajadores sufrió un accidente laboral en 2013, según el módulo sobre accidentes laborales y problemas de salud relacionados con el trabajo de la Encuesta de Población Activa que publica este miércoles el Instituto Nacional de Estadística.

La siniestralidad es mayor entre los hombres. El 3,9% de los varones de 16 o más años tuvo un accidente durante la jornada laboral o in itinere, en trayectos con origen o destino en el lugar de trabajo, por un 3% de las mujeres.

Por grupos de edad, los mayores porcentajes de accidentes laborales se dan entre los hombres de 25 a 34 años y las mujeres de 45 a 54 años, aunque la siniestralidad de estas últimas (3,23%) es menor que la de los varones de su edad (4,10%).

El porcentaje de personas que trabajaron el último año que tuvieron un accidente laboral se reduce del 3,5% al 2,8% si se cuentan solo los que provocaron lesiones. Aquí también los varones sufren más lesiones que las mujeres, un 3,1% por un 2,4%. De estos accidentes que provocaron lesiones durante la jornada laboral, un 6,5% fue de tráfico.

Más siniestralidad laboral en agricultura, industria y construcción

El 65% de los accidentes se produce en el sector servicios, el 17,6% en la industria, el 9,3% en la construcción y el 5,8% en la agricultura.

Sin embargo, la proporción de siniestros es superior al peso del sector en la agricultura, la industria y la construcción. Por contra, la siniestralidad laboral relativa es inferior en el sector servicios.

En cuanto a la situación profesional de los accidentados, el 73% eran asalariados en el sector privado, una proporción superior a su peso sobre el total de ocupados (65%), al contrario de lo que sucedió con los autonómos y los empleados públicos. Los trabajadores por cuenta propia sufrieron un 11,8% de los accidentes y los asalariados del sector público un 14,6%.

La siniestralidad laboral más alta se registró en la Comunidad Valenciana con un 4,7% de los accidentes y la más baja en Cataluña (2,7%). Si se considera los accidentes laborales que provocaron lesiones, Asturias concentra el mayor número, un 4,1% y La Rioja el menor, un 2%.

Un 18,18% vuelve al trabajo el mismo día del accidente

Casi una de cada cinco personas que sufren un accidente laboral se reincorpora a su puesto de trabajo el mismo día (18,18%). La proporción es mayor entre las mujeres, el 22,63%, que entre los varones, el 15,70%.

La duración más frecuente de las bajas por accidente laboral es inferior a tres meses. Un 18,5% de los accidentados se reincorporan entre cuatro y 13 días después del suceso, mientras que el 18,4% lo hace entre uno y tres meses más tarde. Otro 15,4% vuelve al tajo entre dos semanas y un mes después de sufrir un accidente laboral.

En el extremo opuesto, un 3,3% de los trabajadores que sufrieron un accidente con lesión en su jornada laboral no esperaba volver a trabajar o su baja duró entre seis meses y un año.

Uno de cada cuatro enfermos empeoran por el trabajo

El 18,7% de las personas ocupadas de 16 y más años tuvo alguna enfermedad en 2013. El 20% de las mujeres se vió afectada por alguna dolencia y el 17,5% de los hombres.

La incidencia de las enfermedades aumenta con la edad. Así el porcentaje llega al 29% en los varones de 55 y más años y al 33,4% en las mujeres de ese mismo grupo de edad.

Del total de trabajadores que sufrieron una enfermedad en el último año (6.377.400), uno de cada cuatro manifestó que su dolencia se había visto provocada o agravada por el trabajo. El 21,9% sufrió una enfermedad laboral y el 3,7% dos o más. El 39,3% de los que padecieron una enfermedad laboral afirman que la dolencia limitó "considerablemente" sus actividades cotidianas.

Las enfermedades laborales más comunes fueron los problemas óseos, articulares o musculares que afectan principalmente a la espalda (28,3%), al cuello, los hombros, los brazos o las manos (18%) y a las caderas, piernas o pies (16,2%). Por detrás se situaron las enfermedades ligadas al estrés, depresión o ansiedad (12,8%).

Pese a la enfermedad, el 40,3% de los ocupados no faltaron ni un día al trabajo. Un 19,6% estuvo de baja entre nueve meses y un año o no esperaba volver a trabajar. Un 2,6% estuvo ausente de su puesto por enfermedad entre tres y seis meses y un 1,5% entre seis y nueve meses.

Un 85% denuncian sobrecarga de trabajo

Un total de 10.181.200 ocupados denuncian haber estado sometidos a algún tipo de factor adverso para su salud física. La "adopción de posturas o realización de movimientos difíciles que formen parte del trabajo" se señala como el mayor riesgo por el 24,9% de las personas (33,5% mujeres y 19,2% hombres).

El 22,6% de los afectados apuntan el riesgo de accidentes, que perciben los hombres (29,6%) en mayor medida que las mujeres (12,2%).

En 2013, un total de 4.526.800 trabajadores declararon haber estado expuestos a factores perjudiciales para su bienestar mental. En el 84,8% de los casos el factor negativo más grave fue tener "presiones de tiempo o sobrecarga de trabajo" (85,2% varones y 84,3% mujeres).

Un total de 458.900 personas afirman haber sufrido "violencia o amenaza de violencia", el 10,1% un porcentaje que sube al 10,6% en el caso de los hombres. Las mujeres son más sensibles al "acoso o intimidación" con una incidencia del 6,1%, que en el global baja hasta el 5,1%. Con todo, 229.700 personas de ambos sexos se sintieron acosadas o intimidadas en el ámbito laboral.