Calentamiento local para combatir el calentamiento global

• La 'calefacción inteligente' solo dirige el calor hacia el público
• El sistema es aplicable a edificios como centros comerciales y exteriores
• La instalación funcional reclama un uso más eficiente de la energía

El sistema de calefacción dinámica se puede ubicar en el exterior de edificios.

La calefación inteligente Local Warming, desarrollada por investigadores del MIT Senseable City Laboratory, se basa en la premisa de reducir el consumo de la energía destinada a calentar edificios grandes, como por ejemplo los centros comerciales, dirigiendo el calor hacia las personas que transitan por ellos en sustitución de los sistemas de calefacción convencionales que se basan en mantener cálido todo el edificio.

Según el estudio Local Warming, en EE. UU. los centros comerciales consumen el 20% del total de la energía dedicada a la calefacción, lo que supone que, cambiando los métodos actuales de calefacción, se podría ahorrar una cantidad considerable de energía.

"Se gastan enormes cantidades de energía durante la noche y en zonas que no se están utilizando o que se ocupan solo parcialmente y que sin embargo se mantienen calientes junto con el resto del edificio porque no existe una solución mejor", explican.

“El sistema de calefacción dinámica mejoraría la eficiencia energética“

La calefacción dirigida a las personas vendría a sumarse a las mejoras en termostatos y materiales de construcción y supondría, según el estudio, "una mejora de varios órdenes de magnitud en la eficiencia energética".

Sensores de movimiento y fuentes de calor directo

El sistema de calefacción dinámica se basa en el uso de sensores de movimientos para detectar la presencia de las personas que ocupan y que transitan los edificios, capaz de seguir sus movimientos. De este modo el sistema, a través de un ordenador, 'sabe' dónde están las personas y qué zonas del edificio están ocupadas y cuáles no.

Con esa información, las fuentes de calor móviles se dirigen constamente y en tiempo real directamente hacia las personas, las cuales perciben el calor dirigido hacia ellas independientemente de la temperatura del entorno.

“Las fuentes de calor móviles se dirigen directamente hacia las personas“

Aunque las personas pueden moverse libremente por el edificio, el suelo dispone de una serie de marcas que determinan el alcance del sistema y de las fuentes de calor; es decir, aquellas zonas que están dentro del alcance de las bombillas infrarrojas dispuestas en paredes y techos utilizadas como calefacción directa y localizada que únicamente se activan y dirigen el calor cuando detectan la presencia de público.

El sistema puede aplicarse en interiores y en exteriores, sustituyendo a las fuentes de calor estáticas y de funcionamiento constante que se utilizan actualmente. El sistema "ofrece la posibilidad de cambiar los entornos de manera eficiente, y permite difuminar los límites físicos entre el exterior y el interior de los edificios".

De momento, la instalación de un sistema de calefacción directo, dinámico e inteligente es puramente experimental y está en desarrollo, pero para los investigadores ofrecer una experiencia que el público puede percibir de forma tangible también sirve "para comunicar un modelo en el uso más eficiente de la energía".