Las autoridades australianas creen que el avión desaparecido volaba con piloto automático

• Se basan en la trayectoria regular del aparato antes de desaparecer
• Definida una nueva zona de búsqueda del vuelo MH370

El vice primer ministro australiano, Warren Truss, indica en un mapa la nueva zona de búsqueda del vuelo MH370

Las autoridades australianas, responsables de coordinar la búsqueda del avión de Malaysia Airlines desaparecido en marzo, creen "muy probable" que el aparato operara con el piloto automático hasta que se quedó sin combustible y se estrelló en el Océano Índico.

"Se puede decir, creo, que es muy, muy probable que el avión estuviera volando con el piloto automático. De lo contrario, no habría trazado la trayectoria tan regular identificada a partir de los datos de satélite", ha declarado este jueves en rueda de prensa el vice primer ministro australiano, Warren Truss.

El jefe de la Autoridad Australiana de Seguridad en el Transporte, Martin Dolan, ha indicado por su parte que la trayectoria sugiere que "el avión estaba operando con el piloto automático hasta que se quedó sin combustible".

El vuelo MH370 partió de la capital malasia, Kuala Lumpur, con destino a Pekín el 8 de marzo, y desapareció poco después. Los investigadores creen que el Boeing 777, con 239 personas a bordo, fue desviado de su ruta deliberadamente antes de estrellarse en el mar.

Definida la nueva zona de búsqueda

Truss ha comparecido ante la prensa para anunciar la nueva zona de búsqueda de los restos del aparato. La zona definida abarca 60.000 kilómetros cuadrados a lo largo de un estrecho arco en el Océano Índico y a 1.800 kilómetros de la costa oeste australiana.

"La nueva área de prioridad está aún centrada en el séptimo arco, donde el avión se comunicó con el satélite por última vez. Ahora hemos dirigido nuestra atención a un área más al sur de ese arco, basándonos en nuestros cálculos", ha declarado Truss.

El barco Fugro Equator, contratado por Australia, y el navío Zhu Kezhen, de la Marina china, llevan trabajando varias semanas en la elaboración de un mapa del fondo marino y deberán completar sus tareas en unos tres meses. Las nuevas labores de rastreo comenzarán probablemente en agosto y podrían extenderse durante un año.

En mayo, un robot submarino terminó sin resultado el rastreo de una zona de 850 kilómetros cuadrados de fondo marino más al norte, donde se habían detectado unas señales acústicas que se creyó que serían de la caja negra del aparato.