El Banco de Inglaterra endurece la concesión de hipotecas para evitar una burbuja inmobiliaria
- Se detecta una incipiente burbuja en Londres y el sureste de Inglaterra
- En Londres la propiedad se ha revalorizado casi un 20% en el último año
- El nivel de endeudamiento de los hogares no "presenta un riesgo inminente"
El Banco de Inglaterra ha endurecido los requisitos para la concesión de hipotecas con el fin de evitar el crecimiento de la incipiente burbuja inmobiliaria que se detecta en Londres y el sureste de Inglaterra.
El gobernador del banco central, Mark Carney, ha explicado que los bancos no podrán conceder más de un 15% de hipotecas por un valor 4,5 veces superior al salario del solicitante para prevenir que en caso de impago ello tenga un efecto determinante en las entidades.
“Tomamos medidas hoy de manera proporcionada y gradual para reducir el riesgo en el futuro“
Además, se requerirá a los bancos que comprueben que las finanzas de las personas que piden préstamos hipotecarios pueden aguantar un aumento de hasta el 3% de los tipos de interés en un periodo de cinco años, igualmente para prevenir futura morosidad.
Aunque el Comité de Política Financiera del Banco de Inglaterra -instituido por el Gobierno para prevenir riesgos sistémicos tras la crisis crediticia de 2008- no opina que el nivel de endeudamiento de los hogares británicos "presente un riesgo inminente", quiere actuar ahora para evitar un aumento de la deuda a largo plazo.
"Tomamos medidas hoy de manera proporcionada y gradual para reducir el riesgo en el futuro", ha dicho Carney. El gobernador ha señalado que para consolidar la recuperación económica y garantizar "una expansión duradera" hay que corregir el desequilibrio que supone el auge del mercado inmobiliario sobre todo en Londres, donde la propiedad se ha revalorizado casi un 20% en el último año.
El Banco está preocupado por los futuros niveles de deuda
El Banco está preocupado por los futuros niveles de deuda si sigue la tendencia de dar hipotecas con poco depósito, pues, aunque los hogares británicos han conseguido sanear algo sus cuentas desde la crisis hipotecaria global, empezaban "en posición vulnerable", con un 140% de deuda respecto a sus ingresos disponibles.
Por su parte, el Gobierno de David Cameron ha parado la concesión de hipotecas 4,5 veces por encima del salario en su controvertido programa Ayuda para Comprar, por el que avala a compradores de primera vivienda con depósito bajo.
No se espera que las medidas anunciadas por el Banco de Inglaterra tengan un efecto inmediato, pues ningún banco británico sobrepasa en la actualidad ese 15% para las hipotecas de riesgo y la mayoría comprueba además la solidez de las finanzas del solicitante respecto a los tipos de interés.
Pero las medidas están destinadas a limitar el riesgo a largo plazo, en el supuesto de que, en base a la tendencia actual, continuara aumentando la concesión de hipotecas con un alto coste en proporción al depósito.
El Banco de Inglaterra indicó hace unos días que es posible que este mismo año empiece a subir los tipos de interés, que en 2009 se bajaron hasta el mínimo histórico del 0,5% a fin de estimular el mercado crediticio y alentar la recuperación de la economía.