Se recrudece en Irak la lucha por el control de Tikrit, la ciudad natal de Sadam Hussein
- El ejército irakí combate contra facciones radicales
- Al Maliki pide a EE.UU. que use drones contra la insurgencia
- En la frontera siria combaten contendientes de ambos conflictos
El Ejército de Irak ha centrado este sábado sus esfuerzos en la ofensiva que ha lanzado para arrebatar a los insurgentes del Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL) el control de la ciudad de Tikrit, a unos 170 kilómetros al norte de Bagdad y cuna del fallecido dictador Sadam Husein.
El portavoz de las Fuerzas Armadas, general Qasem Ata, ha señalado en una rueda de prensa que sus fuerzas avanzaron hacia Tikrit, capital de la provincia de Saladino, lo que llevó a "huir de forma masiva" a los supuestos terroristas, según informa la agencia Efe.
Ata ha precisado que entre ayer y hoy han muerto decenas de combatientes rebeldes en los combates en Saladino, aunque no ha dado cifras de las bajas en las filas del Ejército. Entre los fallecidos ha citado a Abu Abdel Hadi, un líder militar de los insurgentes en el norte de la mencionada ciudad.
Las otras muertes se han registrado en la ciudad de Samarra, localidad a 40 kilómetros al sur de Tikrit. Se trata de una ubicación que las tropas controlan y han establecido como punto de partida en su camino hacia la ciudad natal de Sadam.
En la ofensiva han participado tanques y vehículos blindados. Además, la aviación iraquí ha bombardeado posiciones de los yihadistas del Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL). Una fuente del hospital público de Tikrit ha señalado que han recibido heridos por los bombardeos con aviones y artillería lanzados desde este sábado contra la mayoría de sus barrios.
Según fuentes militares, las fuerzas gubernamentales han llegado a las afueras de Tikrit, donde han pasado a controlar la sede del gobierno local. Sin embargo, representantes tribales y testigos negaron a Efe que las tropas se hayan acercado hasta ese punto y explicaron que los insurgentes controlan la mayor parte de la carretera que une Tikrit con Samarra, paralela al río Tigris.
De acuerdo a esas últimas versiones, las fuerzas leales al gobierno del chií Nuri al Maliki se han enfrentado a los insurgentes en la localidad de Makishifa, a solo 12 kilómetros de Samarra, causando muertos en los dos bandos.
Choques en la frontera con Siria
El Estado Islámico de Irak y el Levante tiene además otro frente activo en la estratégica ciudad siria de Al Bukamal, en la frontera con Irak. La localidad se encontraba en manos de la organización "Yund al Haq" (soldados del derecho) fieles al Frente al Nusra –próximo a Al Qaeda- hasta la semana pasada, cuando sus milicianos juraron lealtad al EIIL, pasando de esta forma el control a las manos de este grupo.
Sin embargo, Islamistas rivales del Estado Islámico de Irak y el Levante (EIIL) han lanzado este sábado una contraofensiva para retomar la estratégica localidad fronteriza. El portavoz rebelde Abu Huzaifa, vocero del Ejército del Islam, que colabora junto al Frente al Nusra, ha explicado a Efe por internet que las facciones opuestas al EIIL en Al Bukamal se han unido en el llamado Consejo de la Shura de los Muyahidines (guerreros santos) para expulsar a sus enemigos de allí.
Ejecuciones masivas
Los radicales han tomado varias partes de Tikrit, incluidos algunos palacios de la época de Sadam, y han ejecutado a cientos de soldados y civiles, unas acciones que la ONU ha calificado de "crímenes de guerra".
Este viernes, la organización Human Rights Watch (HRW) apuntó que había identificado dos sitios donde supuestamente el EIIL masacró a entre 160 y 190 hombres hace dos semanas.
Más al norte, en la ciudad de Mosul, tomada el pasado 10 de junio por el EIIL, las fuerzas iraquíes también han atacado por aire varios de sus barrios, informó la televisión oficial Al Iraqiya, que anunció la muerte de Omar al Ahmed, un antiguo jefe militar del anterior régimen, por los bombardeos.
Junto a los yihadistas se han unido seguidores del ilegalizado partido Al Baaz, de Sadam, y combatientes tribales suníes contrarios a la discriminación que dicen sufrir por parte de Al Maliki.
Al sur de Bagdad, en la provincia de Babel, al menos 22 efectivos de las fuerzas del orden iraquíes y decenas de terroristas murieron en combates en la zona de Yarf Asajr, apuntaron fuentes policiales.
Las operaciones militares también prosiguieron en la provincia occidental de Al Anbar, feudo del EIIL, que pretende crear un califato islámico en Irak y Siria.
Actitud vigilante de Estados Unidos
Los avances de estos grupos radicales han alarmado a países de la región como Jordania y Arabia Saudí, mientras que Estados Unidos ha pedido a los rebeldes sirios que contengan a los extremistas, contra quienes también combaten en el noreste de Siria.
Además, Washington ha reconocido que está utilizando aviones no tripulados armados (drones) para sobrevolar Bagdad y proteger su Embajada en la capital iraquí y a los asesores militares destacados en el país. Pero por el momento, las autoridades estadounidenses no han autorizado el uso de estos aparatos para bombardear a los insurgentes, como ha pedido Al Maliki.
El secretario de Estado estadounidense, John Kerry, ha insistido en que para lograr respaldo internacional Irak debe antes formar un gobierno de unidad nacional, a lo que se niega el primer ministro.
La máxima autoridad chií en Irak, el ayatolá Ali al Sistani, también está presionando a Al Maliki y el viernes pidió que se alcance un acuerdo político antes del martes, cuando se celebrará la primera sesión del parlamento elegido en abril.