Miles de personas tiñen de color las calles de Madrid en la marcha del Orgullo Gay
- El defile ha discurrido entre la estación de Atocha y la Plaza de Colón
- Denuncian la injusticia que padecen los homosexuales en 80 países
- "Nos manifestamos por quienes no pueden", reza el eslogan de la marcha
Decenas de miles de personas se han manifestado este sábado por el centro de Madrid para denunciar la injusticia que padecen lesbianas, gais, transexuales y bisexuales en 80 países, donde son perseguidos por las autoridades, e incluso condenados a muerte en algunos de ellos.
"Nos manifestamos por quienes no pueden", decía el lema de la pancarta de cabecera de la marcha, que ha transcurrido entre la glorieta de Carlos V (Atocha) y la plaza de Colón.
En demasiados lugares los Derechos Humanos son una pura ilusión o una declaración en papel mojado, según el manifiesto leído al final.
Esta manifestación de "unidad y solidaridad" ha sido el acto central del 'Orgullo LGTB' en Madrid, convocado por el Colectivo de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales de Madrid (Cogam) y la Federación Estatal de Lesbianas, Gays, Transexuales y Bisexuales (Felgtb).
La fiesta de la diversidad
Según estas organizaciones, se trata de la fiesta de la diversidad más grande de Europa.
Boti G. Rodrigo (Felgtb) ha recordado que en diez países del mundo ser homosexual está penado con la muerte y ha recalcado que la ciudadanía "entera" de Madrid, y no solo su colectivo, invade las calles por los que no pueden defender sus derechos.
Asimismo, Esperanza Montero (Cogam) ha recalcado también que en muchos países las personas del colectivo LGTB sufren pena de cárcel y ha remarcado que el muchas veces denominado desfile del Orgullo Gay es una "manifestación" reivindicativa.
En la cabecera de la manifestación, junto con otros responsables de su partido, la secretaria de Igualdad del PSOE, Puri Causapié, ha indicado que su partido se une a la manifestación para apoyar la reivindicación de los colectivos LGTB.
También han asistido, entre otros, el secretario general de UGT, Cándido Méndez, y el diputado de IU Ricardo Sixto.
Un ambiente festivo
Han participado cincuenta organizaciones sociales, una treintena de carrozas reivindicativas y un gentío -también curiosos- que ocupaba los carriles centrales de los paseos del Prado y de la Castellana o se agolpaba en las aceras. Así, la manifestación ha presentado un ambiente de gran celebración, con multitud de personas disfrazadas de toreros, de gladiadores e incluso de Conchita Wurst, una de las pregoneras que dio comienzo a estas Fiestas del Orgullo 2014 el pasado miércoles.
Al desfile también han acudido multitud de familias con sus hijos pequeños, al igual que extranjeros venidos distintos puntos del mundo y españoles de todas las regiones del país.
Los asistentes agitaban cientos de banderas del arcoíris y letreros y coreaban eslóganes a favor de una sociedad laica y plural y la libertad sexual, algunos vestidos de piratas, vikingos, romanos, legionarios, diablos o en ropa interior, animados constantemente por música de batucada.
"Orgullo, sí. Botella, no"
Al pasar por la sede del Ayuntamiento de Madrid, se han oído gritos de "Orgullo, sí. Botella, no", en alusión a la alcaldesa de la capital, cuya dimisión han reclamado reiteradamente.
"Se nos trata como a delincuentes por el mero hecho de amar a alguien del mismo sexo o sentir que naces en el cuerpo equivocado" según el manifiesto leído por cuatro activistas.
“Se nos trata como a delincuentes por amar a alguien del mismo sexo“
Pero el delito, han precisado, debería ser el odio, la tortura, el encarcelamiento, el asesinato impune, pues toda persona tiene derecho a la vida, a la libertad y a la seguridad. El manifiesto denuncia la situación que se vive en lugares como Centroamérica y Brasil, y países de Europa, África y Asia, donde estas personas sufren cada día "la exclusión, la estigmatización, la violencia y la muerte con impunidad".
"Exigimos a los responsables políticos que se ponga fin a esta situación y al Gobierno de Mariano Rajoy que tome ejemplo de los países que hacen de la lucha LGTB su bandera", según el manifiesto leído.
En Europa, la gestión de la crisis económica ha agravado la situación de discriminación y ha alentado el surgimiento de ideologías no compatibles con la diversidad, según los organizadores.