Un exdirectivo de Bankia dice que Rato no presionó para contratar a Lazard al salir a Bolsa
- Pedro Vázquez afirma que no le constaron presiones para elegir asesor
- También dice desconocer las críticas del supervisor sobre las remuneraciones
El exdirector general de Medios de BFA-Bankia Pedro Vázquez ha asegurado en la Audiencia Nacional que nunca tuvo constancia de que existieran presiones por parte del expresidente Rodrigo Rato para contratar a Lazard como asesora en la salida a Bolsa.
Según fuentes jurídicas, en su declaración como testigo ante el juez Fernando Andreu, Vázquez también ha dicho que desconocía la relación entre Rato y el presidente en España de Lazard, Jaime Castellanos.
Rato trabajó durante años para Lazard, y Castellanos declaró en su momento que se conocían "desde mucho antes" y explicó que juntos habían creado la sociedad inmobiliaria Paracuga, sin actividad y en fase de liquidación. Aseguró también que no existían negocios entre ellos, aunque ambos forman parte de una comunidad de bienes titular de un local comercial en Alcorcón.
Preguntado por el abogado de UPyD por las críticas del Banco de España a las políticas retributivas de Bankia en un informe de diciembre de 2011, Vázquez ha respondido que ignoraba ese documento y que el supervisor siempre las aprobó.
Bartolomé defiende la morosidad de Caja Madrid
Además ha declarado como testigo en el caso Bankia el exresponsable de Bankia Hábitat Juan Bartolomé, que ha afirmado que la morosidad de Caja Madrid era igual o incluso mejor que la del resto de cajas. Algo que se contradice con lo expuesto por el Banco de España en un informe de diciembre de 2010.
En dicho informe, los inspectores insistían en que el 70% de la cartera refinanciada de la entidad tuvo su origen entre los años 2005 y 2007, bajo la presidencia de Miguel Blesa, cuando se concentran "debilidades de concesión", con unas ratios de morosidad tanto en la red de agentes colaboradores (canal Apis) como de Mapfre, que representaban el 30% y el 16%, respectivamente.
Así, en el total de créditos hipotecarios a particulares, la morosidad ascendía al 4,6%, muy por debajo del 7,6% registrado en junio de 2009, cifra que superaba holgadamente la media del sector de bancos y cajas, situada en el 2,7% y 2,3%, respectivamente.
El juez le ha preguntado también por los préstamos de Bancaja, una de las integrantes de Bankia, al Valencia Fútbol Club para la construcción de su nuevo estadio o el proyecto Polaris World, en Murcia. Sobre ellas, Bartolomé ha indicado que la situación era "muy complicada" y que se intentó renegociar la deuda en favor de los clientes, en el primer caso ganando tiempo para no ampliar el riesgo.
Respecto a la segunda, ha precisado que se trató de una operación "muy compleja" y con "malas artes", y que había "muchas presiones" de Polaris para refinanciar la deuda.