La Justicia italiana absuelve a Silvio Berlusconi por el caso Ruby
- Berlusconi fue condenado a siete años de prisión e inhabilitación perpetua
- Fue considerado culpable de abuso de poder e incitación a la prostitución
El Tribunal de Apelaciones de Milán ha absuelto a Silvio Berlusconi de la condena a siete años de prisión dictada en 2013 por los delitos de abuso de poder e incitación a la prostitución de menores.
El primer ministro italiano había apelado la condena pronunciada el 24 de junio del año pasado que incluía la inhabilitación perpetua para el ejercicio de un cargo público por el conocido como caso Ruby.
"Gracias, gracias", ha apuntado únicamente Berlusconi cuando abandonaba el centro de mayores en el que presta esos servicios sociales cerca de la capital lombarda, aunque sus abogados afirmaron que la decisión del tribunal va "más allá de nuestras mejores previsiones".
Berlusconi fue condenado el 24 de junio de 2013 a siete años de prisión y a la inhabilitación perpetua para el ejercicio de un cargo público por el conocido como caso Ruby.
A Berlusconi se le consideró entonces culpable de la supuesta incitación a la prostitución de menores al mantener relaciones sexuales bajo pago con la joven marroquí Karima El Marough, que se hacía llamar Ruby, cuando ésta no había cumplido aún 18 años.
Además, también cometió abuso de poder, según los jueces, cuando llamó a una comisaría de Milán para pedir que liberaran a la marroquí, tras ser detenida por un robo.
Diferentes abogados
La fiscalía había confirmado esta semana su petición de siete años de prisión para Berlusconi y la defensa pidió la absolución por falta de fundamentos de los hechos por los que fue condenado y por fallos procesales, como la consideración de que las interceptaciones en las que se basó la imputación no pueden ser utilizadas.
En su fallo de este viernes, el tribunal milanés consideró que en cuanto a la imputación de abuso de poder, este cargo "no tiene fundamento" y en relación al cargo de incitación a la prostitución han considerado que "el hecho no constituye delito", según Efe.
En este proceso Berlusconi no está siendo defendido por sus históricos abogados, Niccolò Ghedini y Piero Longo, ya que ambos figuran en el listado de investigados en el caso "Ruby Ter", por un supuesto delito de corrupción en acto judicial, al haber podido inducir a sus testigos a prestar falso testimonio en este proceso.
Berlusconi seguirá cumpliendo servicios sociales -una labor que desarrolla desde mayo- por otra condena, esta vez en firme, por fraude fiscal en el caso Mediaset. El ex primer ministro italiano tiene, además, otra causa pendiente con la justicia por el caso De Gregorio, el senador al que supuestamente compró para hacer caer el gobierno de Mario Prodi.
"Pacto del Nazareno"
La sentencia absolutoria llega además para Berlusconi en buen momento porque confirma que podrá seguir interviniendo en política aunque no sea parlamentario ni su partido esté en el Gobierno, ya que mantiene un acuerdo con el primer ministro, Matteo Renzi.
Ambos alcanzaron un compromiso, conocido como el "pacto del Nazareno" (por el nombre de la sede del Partido Demócrata, PD, que lidera Renzi) que permite que el primer ministro lleve adelante su programa de reformas sin que los partidarios de Berlusconi las impidan por sistema.
Sin embargo, en las últimas semanas algunos miembros del partido de Berlusconi, la conservadora Forza Italia (FI) han dado por muerto ese pacto, que el propio ex primer ministro ha dicho que mantiene en sus líneas generales. Tras conocerse la sentencia absolutoria, miembros de FI han comenzado a expresar su alegría, como es el caso de la diputada Elena Centemero, quien ha asegurado que era "la noticia que esperábamos desde hacía tiempo".
"Berlusconi finalmente ve reconocidas sus justas razones. La absolución no elimina lo que se ha hecho a nuestro líder pero le devuelve a él y todos los que le apoyamos desde hace años la alegría de la verdad", ha apuntado la diputada conservadora.