Así trabaja Linus Torvalds, creador del Linux
- Antes era un 'trabajador nocturno', pero los hijos le cambiaron su ritmo vital
- Su habitación de trabajo es una caótica colección de cables y gadgets
- Entre sus costumbres, 'nunca tirar los discos duros a la basura'
La Fundación Linux ha dado a conocer un pequeño vídeo donde Linus Torvalds (44), el mismísimo creador del sistema operativo Linux y héroe de una revolución para muchos informáticos e internautas, cuenta cómo es su día a día en el despacho, junto con algunas anécdotas divertidas sobre detalles cotidianos en su relación con la tecnología.
Torvalds parece haberse apuntado a la moda de las mesas de trabajo elevadas, que proponen esta solución como más adecuada por la postura y también para que el cuerpo haga un poco de ejercicio durante todas las horas que se suelen pasar sentados.
Pero Torvalds ha ido un paso más allá: utiliza como base una cinta andadora, de modo que puede caminar mientras trabaja con el ordenador, aunque ha de utilizar la velocidad mínima so pena de no acertar con el ratón en las esquinas de los iconos y ventanas.
La ciencia no tiene muy claro si esa postura y ese ejercicio sirve para algo; Torvalds tampoco: "La verdad, en realidad no sé si hacer esto sirve realmente para algo", dice jocosamente.
Cachivaches inútiles
Si utiliza ese puesto elevado es porque su antigua mesa está tan llena de cachivaches inútiles que se puede considerar completamente inutilizada: es todo una madeja de cables, cajas de electrónica y piezas diversas: "No es que le tenga mucho cariño a la tecnología, simplemente cuando sale algo nuevo dejo de usar lo viejo y se queda tirado por ahí".
Entre sus costumbres, no tirar nunca a la basura los discos duros de sus equipos. "Los tengo todos por ahí apilados... Imagina, quince años de discos llenos de datos. Cualquier día tendré que irme por ahí con un martillo para borrarlos definitivamente de una manera interesante."
Entre sus piezas de coleccionismo, decenas de pingüinos Tux, la mascota de Linux, que la gente le envía con cariño desde todas partes del mundo en señal de agradecimiento: "Guardo unos cuantos que son únicos pero el resto los tuve que regalar, eran demasiados".
También atesora un buen armario de trofeos, premios y reconocimientos. Su última afición: el submarinismo.
Juguete preferido
En el terreno tecnológico su juguete favorito -aunque reconoce no dedicarle demasiado tiempo- es una impresora 3D Replicator X2que puede usarse para crear todo tipo de piezas.
"Me gustaría tener más tiempo para modelar con ella; de joven me hubiera vuelto loco si hubiera tenido una de estas. Mi hijo el mayor es quien más partido le está sacando, creando objetos para proyectos del colegio", comenta.
El tema de los hijos es algo que según Torvalds cambió definitivamente su ritmo de vida. "Antes era un ave nocturna, trabajaba de noche, incluso me entretenía haciendo estadísticas sobre las horas a las que gente de todas partes del mundo enviaba su código para el Linux, para observar sus patrones de sueño y trabajo... Eso se acaba en cuanto tienes niños y has de levantarte a las 7.30 de la mañana. No es que sea un trabajo de 9 a 5, pero casi. De hecho ahora podría decirte qué desarrolladores tienen hijos con solo examinar las horas en las que trabajan y suben su código al sistema de desarrollo que utilizamos”.